Aegon II Targaryen, el primer vástago del rey Viserys Targaryen y su esposa, la reina Alicent Higthower.
Aegon, "EL USURPADOR" "EL BORRACHO" fue el triste legado que dejó sin precedentes. Una lágrima salió apresurada del rostro del joven rey cuand...
El consejo estaba hecho un caos, una reunión fue convocada de emergencia. El rey quien estaba sentado a la cabeza de la mesa, tenía el rostro pálido y una mirada cansada.
El consejo privado fue convocado de inmediato a la sala del consejo, un emisario de la casa Velaryon había llegado y al parecer no portaba buenas noticias.
— Majestad, se nos ha informado que la Triarquía ha quemado la mayoría de los barcos de la Serpiente Marina. — habló Otto Higthower. — Está guerra a desangrado a la corona, las arcas están vacías, el pueblo se queja de los impuestos, y ahora nos enfrentamos a ser bloqueados en el comercio. Todo por culpa de la obstinación de Lord Corlys y el príncipe Daemon. — arrojo con desprecio los últimos nombres.
— La corona se beneficiaría si la Serpiente Marina ganará la guerra en los Peldaños de Piedra. Considero que enviar la ayuda prometida sería oportuno majestad. La casa Stark y Arryn ya enviaron a sus hombres, todos están reunidos aquí en King's Landing esperando su autorización para zarpar. — habló Lord Beesbury.
— ¡Zarpar! Ese lugar debe ser una carnicería. Enviar a los hombres de esas casas sería una locura. Todo por seguir el capricho de una princesa sin experiencia en batalla. — se quejó Otto. — Majestad, de la orden de retirar nuestras tropas y barcos, aún podemos salvar algo. Después veremos como negociamos con la Triarquía. — propuso.
— Solo un hombre sin honor propondría tal acto de cobardía, además de ser una clara afrenta contra la casa Velaryon dejándola sola en esta guerra. — la voz de cierta joven causó revuelo.
— La princesa Rhaenyra Targereyan, heredera al trono de hierro y princesa De Dragonstone. — anunció Ser Harrold.
— Rhaenyra, acabas de salir de labor, deberías estar descansado. — el rey se levantó para ayudar a su hija a tomar asiento.
— Leanor a partido hacia los Peldaños de Piedra, Aegon llora indeciblemente por su padre. Necesitaba salir de la habitación. — suspiro la joven dejándose caer en la silla.
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Aegon se encontraba en la habitación de su madre, el pequeño niño se aferraba a una manta de terciopelo que su padre le había dado, en ella tenia bordado el emblema de la casa Velaryon. El pequeño la sujetaba con fuerte mientras sollozaba.
