LOVE AGAIN ━━ fubuki shirou

capítulo nueve

  Una vez que llegaste al instituto Hakuren te dirigiste rápidamente hacia el campo de fútbol, tenías un asunto pendiente con el mismo joven que habías visto anteriormente un día antes.

  Para cuando tus ojos se detuvieron sobre el joven de cabellos azules una sonrisa se había formado sobre tu rostro, él estaba entrenando por sí mismo nuevamente justo como el día en el que lo hacía conocido. Y es que esto es lo que necesitabas ahora, algo en lo que debías de ocupar todo tu tiempo para no tener que pensar en todo lo que había sucedido con tu vida.

  Una vez que dejaste tu bolso en las bancas las cuales se encontraban lo bastante cerca de las canchas de fútbol, una vez que estabas a punto de acercarte hacia él joven te detuviste por completo debido a lo que él había hecho a continuación.

— ¡Eterna ventisca!

  El oxígeno había abandonado tus pulmones por completo, tu rostro estaba sumamente sorprendido y tu cuerpo se paralizó después de observar la técnica que había hecho Yukimura. La única persona que conocías que podría realizar aquella técnica era él antiguo entrenador de Hakuren, Shirou Fubuki, la persona que lamentablemente tuvo que enfrentarse a Fifth Sector.

— ¡Entrenadora (T/N)!

  Después de escuchar tu nombre al instante recuperaste la compostura por completo, la culpa había estado dentro de ti durante estos días y al ver la técnica de Fubuki definitivamente sabías que no sería nada fácil tener que saber que por tu culpa, él ya no se encontraba en Haruken entrenando junto con Yukimura.

— Yukimura veo que has estado entrenando desde hace varios minutos— trataste de disimular tu reacción, tomando un balón de fútbol que se encontraba cerca de las bancas.

— Si— afirmó él acercándose hacia ti—. Es la técnica que me enseñó el antiguo entrenador ¿La conoces?

  Una vez que tomaste el balón entre tus manos presionaste tus dedos contra ellos apretando cada parte del balón, no podías decirle que no a Yukimura. Además de que él ya estaba enterado de que pertenecías a Inazuma Japan.

— Si— diste un pequeño suspiro—. Es de un antiguo compañero.

— ¡Es cierto!— exclamó el joven llamando tu atención—. Ustedes estaban en el mismo equipo ¿No sabes dónde está el entrenador Fubuki ahora?

  Tragaste en seco.

  Desde que se fue del instituto Hakuren habías perdido por completo el rastro de Fubuki, esperabas al menos que él se encontrará bien en donde sea que esté. Pero, después de lo que había sucedido cuando nuevamente se volvieron a ver, sabías que sería todo lo contrario.

— No lo sé— respondiste con sinceridad—. Hace tiempo que no nos hemos visto.

  Tomaste un mechón de tus cabellos colocándolo detrás de tu oreja, mentir era lo único que te quedaba ahora y aunque no eras buena haciéndolo Yukimura aún así te había creído.

— Ahora tenemos que comenzar con nuestro entrenamiento— el menor asintió con una sonrisa, él se encontraba sumamente animado para continuar.

  Colocaste una mano sobre tu cadera, él muchacho parecía ser el as del instituto Hakuren tiene muy buenas cualidades y lo más seguro es que si lo ayudas a mejorar, podría ser mucho mejor.

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— ¿Cómo va el entrenamiento?— un hombre se había acercado hacia ti, sosteniendo su sombrero.

— Los chicos son buenos— resumiste acomodando algunos papeles del instituto—. Tienen muchas cosas que mejorar.

  No le dirigiste la mirada a Kuroki, quién se había colocado frente a ti con los brazos sobre su espalda. La verdad es que ya estabas acostumbrada a que él apareciera en cualquier momento, en todas esas veces Ishido Shuuji es el que le ordena verificar como es que estás haciendo el trabajo y aunque la verdad es que en ocasiones eso te estresaba, no tendrías de otra ya que de esta forma se aseguraban de que cumplirás el trabajo.

— Tienes mucho trabajo (T/N)— afirmó Kuroki—. El emperador espera buenos resultados.

— Nunca le he fallado— lo observaste después de escuchar sus palabras, provocando una sonrisa en su rostro.

  Kuroki se habia retirado del lugar sin decir nada más, como siempre solía hacerlo. Por lo que seguiste acomodando los papales que se encontraban en aquel escritorio, anteriormente Fubuki había dejado un desorden en el lugar por lo que tendrías que acomodar los permisos de los jóvenes, las tácticas que había utilizado, entre otras cosas.

  Una vez que tomaste un papel entre tus manos, lo que se encontraba escrito en él te había llamado la atención.

— ¿Qué es esto?— sostuviste el papel leyendo el título— ¿Barrera absoluta?

  Decidiste hojear aquellas hojas con ese título y gracias a esto sabías que eso se trataba de una táctica especial, y haciendo resumen se trataba de una técnica que habían perfeccionado con el antiguo entrenador.