Palpitar

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—Disculpe...

José se sentó frente a Carlo, este estaba en el comedor bebiendo algo de té  y leyendo un libro que cerró un segundo después de que el demonio menor llamará su atención.

—Su hermano está diferente -mira que pone cara extrañada- no lo digo como algo malo, todo lo contrario, antes siempre estaba triste, lloraba, vomitaba por ataques de ansiedad, estaba destruido pero ahora... se ve mucho mejor, ríe, disfruta, se ve más vivo.

Sonríe —Sin duda mi presencia ayudo a su persona, pero si su autoestima se elevó no fue gracias a mi.

—¿De que habla?

—Solo miralo, está radiante, no he estado tanto tiempo con él, pero saber que estoy cerca le tranquiliza, la verdadera razón por la que está así es por Raúl.

—¿Que tiene ese ex Mandamiento de importante?

—Nada, tú lo has dicho, es un ex Mandamiento, ya no tiene valor para el cielo ni para el infierno, pero Toni le tiene aprecio, eso es lo que lo vuelve importante, pero solo es importante para él, y ese es el punto.

—Si Raúl puede irse... ¿Porque no lo hizo?

—Observo a Toni de lejos por un tiempo, más las cosas que yo llegue a decirle de él cuando era joven... supongo que le intereso saber más de él, por eso es que siempre viene de visita, es solo para verlo a él -da un sorbo a su taza-.

José analizo bien las palabras, después vio a aquellos dos juntos riéndose, nunca lo había visto tan feliz, eso lo hizo sentir mejor.

—Ese fue mi momento más humilde -cuenta Raúl sin dejar de reír-.

—No puede ser -se cubre la boca sin dejar de reír- eres un payaso.

—Me gusta verte sonreír.

—¿En~enserio? -desvía la mirada sonrojado- n~no es para tanto.

—Es que, esa sonrisa te hace ver más hermoso.

—Cállate -lo empuja con la mano en la cara- eres molesto.

—No puedo parar, es que... no sé, cuando te veo siento que necesito halagarte -toma la mano contraria y la posa sobre su pecho- ¿Sientes eso? Pasa solo cuando estoy contigo.

—Palpita muy rápido, pareciera que tú corazón se saldrá de tu pecho ¿A qué se debe?

—A tí -toca el pecho de Toni- estás igual ¿Es por mi?

—C~creo que si , es confuso para mí.

Raúl se acercó más a Toni y lo tomo de la barbilla, el menor se puso nervioso, era muy raro aquel sentimiento, al unir ambos labios y llevar un leve vals fue como algo mágico, ya había besado antes, de muchas formas diferentes, pero está ocasión era diferente, único, no quería separarse pero tuvo que hacerlo cuando el angel se separó.

—¿Que fue eso? -estaba en shock, sentía cosas que hace mucho no sentía-.

—Un beso... -responde nervioso de ser rechazado-.

—N~no eso, l~lo que siento, me siento como en las nubes, creo que siento... amor... por... tí... -baja la mirada apenado-.

—No importa, porque siento lo mismo, ya deberías saber que no es raro amar -lo toma de las mejillas- ¿Sabes lo que significa?

—Ya no estoy maldito -sonrie y lo abraza fuerte- ¿Así es como te sientes?

—Si, solo contigo Toni.

Parecía ser un momento bastante feliz, Toni estaba bien, pero en eso, una luz fuerte encandiló a los cuatro, una mujer rubia de cabello corto, con una venda blanca en los ojos, seis alas grandes y blancas apareció frente a ellos.

—Demonios -se adelanto Carlo- es la representante de la Gran Arcángel.

—Cuanto pecado junto -hablo la mujer- Esperanza, es... bueno verte. La Gran Arcángel quiere que regreses, te regresarán tu Mandamiento y tus alas.

—Un momento -Toni se levantó encarando a la Arcángel- les dije claramente que todo esto de los Mandamientos debía acabar, me abstuve de arrancarte las alas a tí y ala Gran Arcangel.

—Aun hay Pecados Capitales, así que deben existir Mandamientos para mantener un balance.

—¿Asi? ¿Y cuántos has convocado? Porque solo quedan dos con vida.

—Estamos buscando a nuevos ángeles para esto, pero nadie a aceptado, Pacifismo y Amor se negaron a volver, aún que me parece que ahora los conocen como James y David.

—Asi es, se dieron cuenta de lo falsos que ustedes son, así que hazme el gran favor de irte,  no quiero volver a escuchar de ello.

—Seguimos tu petición de que ellos actuarán más en el mundo terrenal, no queremos contradecir al Rey del Infierno.

—¿Eres rey del infierno? -pregunto Carlo sorprendido-.

—Mate a muchos demonios mayores y los menores me nombraron rey, soy el más fuerte del infierno -mira a la Arcángel- y del cielo.

—¿Raúl? -la Arcángel mira al mencionado- tú respuesta.

—Lo lamento -respondió Raúl- en realidad no, no lo lamento, pero creo que ya no soy un ángel, talvez soy uno de los más débiles, de los de más bajo rango y eso no me molesta, porque quiero estar con Toni, no me importa lo demás, rechazo la propuesta.

—Es una lástima, pero Toni nos hizo ver nuestros errores, por lo que respetaremos tú opinión -chasquea los dedos- considera esto un regalo de parte de La Gran Arcángel.

—Raúl -Toni lo veía fascinado- tus alas, están de vuelta.

—¿Cómo? -se toca la espalda sintiendo sus alas- están aquí -sonrie-.

—La Gran Arcángel está arrepentida por todo el daño provocado, si me disculpan, debo retirarme, hay que entrenar a los nuevos reclutas.

La mujer desapareció por completo, Toni se alegro del "golpe de estado" que hizo en el cielo y el infierno, todo pareció mejorar desde entonces. Miro las alas de Raúl, eran lindas, las tocó un poco feliz por su... ¿Amigó?

—Me... me alegra que las tengas de vuelta, es mi culpa que no las tuvieras.

—No importa, entiendo la razón, pero quisiera saber algo -le extiende la mano- ¿Volarías conmigo?

—Es... ¿La pregunta correcta? -mira la mano extendida-.

—Quería intentar algo nuevo, preguntar si te gustaría ser algo más que amigos me parecía muy básico.

Sonríe —En ese caso, me encantaría volar a tú lado.

Toni dejo salir sus alas, ya no se veían como las de un murciélago, si no, eran como las grandes alas de un ángel, pero oscuras y con las plumas levemente quemadas demostrando el poder que tenía tanto en el cielo como en el infierno. Sin soltar sus manos corrieron hasta el balcón y saltaron volando libremente como pájaros libres, en su zona de confort, estar juntos era su zona.

—¿Lo vez? -pregunto Carlo llendo al balcón junto a José- yo ayude un poco pero... alguien más debía hacerle ver lo que nadie podía.

Festín [Tonibowl]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora