Festín [Tonibowl]

Hambre

—Dimelo todo, James.

Sonrojado —Emmm yo... es que...

—¿Nervioso? Tranquilo, estarás bien.

—Es que... su presencia, ammm, es muy guapo.

Ríe —Gracias.

—Es una lastima que seas el hijo de la lujuria.

Alza una ceja —¿Porque?

—Pues... muchos... te... persiguen -se aclara la garganta y desvía la mirada-.

—¿Ahora eres parte de los hombres que me hacen gemir?

—¿Eh? -se pone aún más rojo- yo... l~lo dudo, soy... un ángel así que...

—Entiendo, eres virgen -lo mira cubrirse el rostro- eres muy tierno, sin duda eres un ángel.

Baja la mirada —Ya no lo soy, me arrancaron mis alas, ahora soy solo un ángel caído.

—¿Que paso exactamente?

—Dijeron que eras un peligro para angeles y demonios, por lo cual se necesita de tú exterminación, yo estoy en contra de todo esto con los demonios, no me parece justo que dejen hijos con castigos de por medio, y los angeles no hacen nada por frenarlo, me revele y... aquí estoy.

—¿Hace cuánto?

—Hace menos de 24 horas, muchos se alteraron un poco por lo que pasó con Soberbia.

—Se enteraron más rápido de lo que pensé.

—Solo el cielo, el infierno aún permanece ignorante sobre todo esto, después de todo ellos están abajo.

—¿Sabes exactamente porque sucede todo esto?

Asiente —Si, pero quizás debamos irnos de aquí.

—Mmm nunca he intentado transportarme con alguien más, habrá que intentar.

Tomo la mano del ángel caído y chasqueo los dedos esperando que funcionase, para la fortuna de ambos estaban en "El pueblo", James se sorprendió pero se aferró más al brazo del contrario y lo llevo hasta la pequeña casa en la que comenzó a habitar.

Al entrar y cerrar la puerta, se dió cuenta de algo... ¿Porque Toni no lo llevo a dónde él vivía? ¿Porque aquí?

Pero al voltear su pregunta fue respondida al ser acorralado contra la puerta y ser besado en los labios, intento seguir el ritmo, aún era algo complicado para él.

—Y~ya te dije que yo... n~no podría satisfacerte como deseas.

—Por mi experiencia se que los que más inocentes se ven más fetichistas y pervertidos resultan ser.

Se sonroja como tomate —¿Que dices? No soy... así, soy un ángel.

—Por eso -lo sienta en el sillón- es muy fácil caer en el pecado, sobre todo en la lujuria -se inca frente a él y le intenta bajar el pantalón-.

—¿Q~que haces? -se agarra fuerte el pantalón-.

—Sabes lo que hago, no te pongas difícil, ambos sabemos que es lo que quieres

Aflojó su agarre, Toni tomo eso a su favor y bajo el pantalón del chico junto por el bóxer.

Por otro lado... Horacio entro al departamento cerrando con llave, miro al rededor, todo parecía tranquilo, suspiro algo cansado y dió una pequeña mirada al cuarto de Toni, pudo divisar a Gustabo durmiendo, así que cerró la puerta sin hacer mucho ruido, fue a la habitación que le fue prestada y se recostó en la cama.