Festín [Tonibowl]

Pecado

—No creo que sea buena idea que yo esté aquí -dijo James nervioso-.

—Necesito de tú apoyo en esto, eres el que sabe más de este tema después de todo -le dijo Toni con calma-.

—Podria matarme.

—Tranquilo -mira a un agente- llévame con Conway.

Ambos chicos fueron a la comisaría por respuestas, el agente los llevo hasta el despacho del superintendente y los dejo entrar, Conway estuvo a punto de quejarse pero vio que se trataba de Toni, eso no lo tranquilizaba pero ahora entendía porque lo dejaron entrar así como así a su despacho.

—¿Que tenemos aquí? La mayor puta de Los Santos ¿Que quieres? -se llevo un cigarro a la boca, solo tenerlo enfrente le estresaba-.

—Venia por respuestas.

—Aja -mira a James- ¿Quien es tu amiguita?

—El ex mandamiento del Amor, saluda.

—No es un gusto señor Soberbia -dijo James con los ojos entrecerrados como si lo juzgará-.

—Lo mismo digo -mira a Toni- ¿Porque trajiste un lame botas de Dios a mi oficina?

—Apoyo moral. Cómo sea, más vale que respondas con la verdad o tendré que obligarte y no creo que te guste.

—¿Quien te crees para hablarme así? -se levanta enojado-.

—Sabes de lo que soy capaz -le sonríe- ahora responde... antes de él -señala a James- había otro mandamiento del amor ¿Le conocías?

Niega y se cruza de brazos —No nos mezclamos mucho entre ángeles y demonios.

—Hace algunas décadas ¿Recuerdas haber preñado a una bruja?

Desvía la mirada pensativo —¿Es una pregunta retórica? Hubo muchas.

Face palm —¿Nunca follaste con un ángel caído?

—Lo dudo.

James niega con la cabeza, en señal de que era mentira, ante eso Toni frunce el seño y se para frente a Conway.

—Di la verdad.

—Es... la verdad, no lo sé, no lo creo.

—Dice la verdad -suspira- se presume que el antiguo mandamiento del Amor fue desterrado, le arrancaron las alas y se hizo pasar por una bruja en la época, lo cual no era beneficioso en ese entonces, lo último que se supo es que fue quemada, no sin antes tener un hijo, del cual fuiste padre.

—Ya que lo mencionas, hubo una bruja que no me pagó lo que me debía, dejo como deuda su vida, al morir su alma no fue a mi, desapareció.

—¡Mierda! ¡Fue lo mismo que me dijo la Lujuria!

—No desapareció -dijo James- el alma de ella fue a su hijo, hijo de la Soberbia e hijo del Amor.

—Esto debe ser una broma... -Toni toma asiento- no puede ser...

—Esa es la razón por la que Toni es tan poderoso, viene de un linaje que fue preparado maquiavélicamente, su árbol genealógico está conformado por hijos de pecados y de un mandamiento, todo fue fríamente calculado.

—¿Con que fin? -pregunto Conway-.

—Erradicar a los pecados y mandamientos de una vez por todas.

Conway quedó en shock, después de todo el era un pecado, Toni se levantó y camino hasta Conway, James salió de la oficina, Jack intento tomar al italiano del cuello sacando sus garras de demonio.

—Quieto.

Se paralizó, intento moverse pero no pudo ¿Ese sería su fin? ¿Sería asesinado por un mocoso?

—Se supone que mi objetivo es matarlos a todos para que esto se detenga, por otro lado, eres el padre de mi amigo, no sé si soy capas de hacer algo tan deleznable, aún que él no lo sabe, no soy un monstruo.

—¿Y que piensas hacer princesita?

—Puedo dejarte vivir, pero... con mis reglas claro está.

—¿Que? ¿Seré tu perrito fiel?

—Más o menos.

—Como prefieras, pero tengo una condición.

—¿Cuál? -ve que sonríe- no puedes dejarme embarazado.

—Con llenarte el culo de semen me basta y sobra.

Lo piensa un poco —De acuerdo, acepto, serán las veces que quieras, pero si intentas revelarte te aseguro que te mataré. Ya puedes moverte.

Apenas Conway sintió que podía moverse a voluntad, tomo a Toni del brazo y lo estampó contra el escritorio sin soltarlo, incluso lo torció un poco para que no se moviera, frente a él tenía ese enorme trasero que no dejo de ver desde la primera vez.

—¿Que le pasa? No sea tan agresivo.

—Las reglas en el coito las pongo yo, nenaza, no quiero ni una queja -le da una nalgada.

Soltó un gemido involuntario, se sonrojo por eso ¿Dónde estaba el autocontrol? Sus pantalones fueron bajados y sintió como algo entraba en su interior, con su mano libre enterró sus uñas en el escritorio perforando el material con el que estaba hecho, las embestidas comenzaron haciendolo gemir de placer, nunca había tenía un polvo tan bueno, no era para menos, después de todo un pecado que deja hijos por el mundo evidentemente tendría experiencia sexual.

—¿Que sucede? -se burla Conway- ya no hablas tanto -ríe y lo embiste con más fuerza haciendo que el choque de cuerpos resuene en la oficina-.

Toni no podía contestar, ni siquiera estaba escuchando, su mente estaba perdida en un mar placentero, intento masturbarse pero fue tomado de su brazo, con ambos brazos aprisionados solo le quedaba gemir, disfrutar y sufrir por no darse placer así mismo.

El mayor no hacia más que disfrutar las vistas que tenía, era exquisito ver cómo su polla se perdía en aquellas nalgas grandes y jugosas, sus colmillos de demonio picaban, debía morderlo, demostrarle quien es el que mandaba, siguió sus impulsos y mordió el cuello del chico que termino por correrse por ese acto, un par de embestidas más y se corrió en su interior soltandole los brazos.

Toni tuvo algunos espasmos, la había pasado muy bien, sin duda follar con un pecado era algo inolvidable, no sentía tener la capacidad de levantarse, o caminar a pesar de conseguir energía del pecado.

Para su sorpresa fue volteado estando frente al pecado que lo tomo de las piernas, su corazón comenzó a palpitar a mil, sin duda fornicar con el pecado se volvería una de sus actividades favoritas.

—No creas que esto acabará tan pronto, apenas voy empezando, princesita.

Se mordió el labio, ya quería tener esa verga una vez más en su interior destrozándolo y asiendolo sentir como basura.

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Si Toni ya era fuerte antes... ¿Que tan fuerte se le puede considerar ahora teniendo en cuenta que tiene a un ángel y un pecado de su lado?

¿Toni podrá completar el plan de su tatarabuela de eliminar a los pecados y mandamientos?