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—¿Que viste Lea..?— Me preguntaba Tom, estábamos en su casa, era el mediodía y me recomendó ir ahí así mientras los niños jugaban, yo podía le contar sobre ayer.

—Era..James..—Me miro confundido—Ya se que me escucharé como una loca, pero era el..

—Lea, esta muerto

—Me miraba con una horrible sonrisa macabra— Continúe, estaba mirando hacia la nada, tenia dificultad para hablar parecía estar, traumada.

—Eso es imposible— Me convencía Tom, aunque parecía intentar convencerse más a él.

—Tenía algo en los ojos, algo rojo y.. silbaba— La voz se me quebraba un poco.

—¿Silbaba? Seguro fue una alucinación tuya Lea..

—No— Conteste con rapidez —Osea, lo fue, pero no una alucinación cualquiera, siento que podría haber sido..— Mire hacia la puerta donde estaban mis niños, reían inocentemente— Algún tipo de aviso..— Nos quedamos en silencio, me sonaba los dedos nerviosa.

—Esta bien, te creo..— Lo mire fijo al escucharlo decir eso— Pero no debes asustarte por una alucinación, ¿Si?

—Bien, pero debemos estar alertas, pero los dos tenemos trabajo, ¿Como cuidaremos a los niños? Oh ya lo sé, contrataremos a alguien..

—O..— Me interrumpió Tom—Tenemos personas más confiables en Alemania Hamburgo, quien puede cuidarlos— Lo mire confundida hasta que entendí.

—Ni en tus mejores sueños le llevare mis niños a mis padres, no hay manera— Me levante alterada de mi silla.

—Es la única forma Lea

—¡No! ¡Por dios Tom no me veran luego de tres años con dos niños!— Grite, el se quedó callado y frunció los labios.

—Es la manera más segura..— Me hablaba con tranquilidad, tenia razón, pero yo no quería aceptarlo, mi hermano estaba en esa casa, Jonathan fue cómplice de James ¿Quien sabe que hizo por estos últimos tres años?

—Jonathan..— Fue lo único que me salio— El ayudo a James Tom, ¿Y si se metió a la "pandilla"— Hice comillas con los dedos en la última palabra— Matará a los niños, no tendrá piedad, como no la tuvo conmigo cuando era una niña..

—Lo peor es que ya no esta con Bill, no sabría que decirte Lea..— Contesto, parecía estar de acuerdo, suspiro— Pero sigue siendo la manera más segunda, yo quede encantado con los niños, especialmente con Melody ¿Y si le sucede lo mismo?— Nos quedamos mirándonos fijamente, pensando me quedé hipnotizada con sus ojos, iguales a los de Melody.

Tenia razón, siempre las tenia, así que solo me quedé quieta pensando, cruce mis brazos en mi pecho pensativa y desvie la mirada hacia donde los niños estaban.

Mis padres podrían sacarme de ahí a gritos ni bien llegara con ambos, es una posibilidad, pero también es una posibilidad que los adoren, solo me quedaba arriesgarme, por la seguridad de mis niños, no quedaba otra, ni bien atraparan a los idiotas, todo volvería a la normalidad..

Me limite a asentir con la cabeza, Tom me dio una sonrisa tranquila para luego ir en busca de los chicos, suspire y empecé a buscar las cosas necesarias.

Le pedí a Tom que maneje el Cadillac, mientras cada tanto miraba por el retrovisor las caras de los niños, miraban cada uno por su ventana, parecían no entender nada, volví a suspirar y me removi intranquila.

Derrepente sentí la mano de Tom acariciarme la pierna cerca de la rodilla, lo mire, en me sonreía y con los labios me dijo "Tranquila" yo asenti y me quedé mirando hacia la ventana, el saco la mano lentamente, obviamente, mis nervios vinieron ni bien apoyo su mano.

Not Just Sex Tom KaulitzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora