Día 1 y 2 -Vacaciones/Lluvia

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Se suponía que esto era un tiempo de relajación, meses de frustración y retrasos harían que el viaje fuera más una recompensa que una celebración.

Cumplían 1 año de matrimonio, un año donde había ocurrido de todo, desde casarse a las carreras, hasta por fin ser padres de la bebé que cuidaron por 3 años. Este era su momento de disfrutar de ellos dos, de sus logros.
Pero no contaban con que la temporada de lluvias también aplicaba para esta isla. No sabían que podría convertirse en una tormenta, que el aeropuerto cerraría dejándolos dentro, que ellos dos y miles de personas perderían sus vacaciones.

Eijiro parecía neutral y hacía lo mejor que podía para distraer a Katsuki, desde tontos juegos hasta ofrecerle comida. Pero el rubio nunca fue bueno con la lluvia, mojarse implicaba no sudar, enfriarse más rápido de lo normal; la lluvia significaba perder su don.

Tenerlo con los nervios de punta, no servía de mucho, sólo hacía que se enojara más fácil y se estresara aún más, Eijiro lo sabía perfectamente, así que mientras Katsuki estaba caminando por toda la sala VIP, su esposo le montaba una pequeña cama con los abrigos de ambos.

Agradeciendo que tuvieran las maletas con ellos o sería otro foco de estrés para el rubio.
Una vez teniendo los suéteres en su lugar, obligó a su esposo a sentarse en el sillón. Lo tapo con su propia chaqueta y uso la suya como manta. Katsuki simplemente lo miraba extrañado.

-Quédate ahí- le aseguro sonriendo- ahora vuelvo, empieza a entrar en calor, ¿Okay?

Eijiro fue directo a la pequeña barra de servicio, pidiendo dos bebidas que Katsuki no pudo ver qué eran hasta que volvió, teniéndole la suya. Chocolate caliente, no sólo eso, tenía una porción de café y malvaviscos, era chocolate como a Bakugo le gustaba.

-Gracias- se limpió las lágrimas furtivas, acomodándose en su improvisado refugio.

-De nada- Eijiro besó su cabeza - es sólo lluvia, pronto pasará.

-Lo sé... Pero no tenemos señal y no he podido comunicarme con mis padres... No sé cómo está Shin.

-Ella no está atrapada en el aeropuerto en vez de tomarle fotos al Partenón.

-Pero es mi primer día sin ella.

-Yo también estoy preocupado, pero ambos sabemos que estará bien con tus padres, sólo serán un par de días.

-Sí... Seguramente perdimos la reservación...

-Posiblemente... Aunque si en toda Atenas está lloviendo, posiblemente nos den una prórroga, si no, te dejaré pelearte con los recepcionistas para que nos regresen el dinero... Por ahora descansa, debes estar agotado.

-Estás igual.

-Tomaré la primera guardia, duerme un poco- volvió a besar su cabeza.

Horas más tarde, Katsuki despertó con Eijiro ofreciéndole una botella.

-Encontré té de gengibre en la tienda.

Gracias, Ei- besó su mejilla- ¿Qué hora es?

-La una de la mañana- se acercó más a su capullo de prendas, juntando sus cabezas- Feliz aniversario, mi amor.

-Feliz aniversario, Ei.

No fue el lugar más adecuado para pasar su primer aniversario, pero al menos estaban juntos y eso era lo que más importaba.

Fin.

Mes Kiribaku 2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora