Mes Kiribaku 2023

Día 13 - Deportes

"COME ON FEEL THE NOISE! GIRLS, ROCK YOUR BOYS,
WE'LL GET WILD, WILD, WILD..."

Katsuki despertó de un brinco, alertado por el escándalo, salió del dormitorio para encontrarse con Eijiro levantando pesas. Poniendo pausa a la bocina, se cruzó de brazos.

-Oh, buenos días, bro- le saludó al voltear por el silencio, sin dejar de hacer repeticiones.

-¿Me he convertido en Kaminari acaso?- lo miró molesto.

-¿Eh? No...

-Entonces no me vuelvas a decir "Bro" -picó su pecho- o tus pesas la pagarán.

-Sip, súper entendido -dejó las pesas en el suelo y besó su mejilla- buenos días, amor.

-Mucho mejor- golpeó su mejilla, se paró de puntitas para besar su nariz- Buenos días... Ahora, ¿Me puedes decir por qué estoy despierto a las 8 de la mañana en domingo?

-Ahhhh je -sonrió culpable- lo siento, olvidé decirte que entreno en la mañana.

-Y, ¿la música horrible es necesaria? Tendrás quejas por el ruido.

-Es buena música, con la que he entrenado por seis años, además no tendré más quejas de las que tendré por lo de anoche.

Katsuki se alejó de él con un evidente sonrojo, Eijiro simplemente se rió, regresando a su rutina y volviendo a poner su música de los 80.

-Iré a trotar -salió del cuarto con ropa adecuada para la actividad- después desayunamos y podemos ir por el resto de mis cajas.

-Tengo partido -le recordó- ¿Podemos pasar después?

-¿Otra vez? -se quejó, poniéndose sus zapatos- ¿Qué? ¿Tienen un juego de básquetbol cada día?

-Sólo son los fin de semana y es por una buena causa.

-Sí, comportarte como un niño mientras compites con tu copia barata.

-Vamos, también te gusta convivir con los niños.

-Como sea, no te perdonaré si vuelves hacer tu escándalo mañana - lo besó de nuevo- cómprate unos audífonos o algo, ya no vives solo... Regreso en una hora.

-Entendido, jefe.

Después de graduarse, Eijiro y Tetsutetsu se encargaron de las actividades recreativas de la agencia Fat Gum. Cada fin de semana, organizaban un partido de algún deporte que los niños de la comunidad eligieran y cada uno hacía un equipo con ellos.

De vez en cuando, Katsuki iba a estos partidos, claramente apoyando al equipo de su novio y convivía con los niños al final del día. Ahora que se habían mudado juntos, no parecía que esto cambiaría, aunque sólo le hubiera gustado no estar saliendo a las 9 de la noche de la chancha porque un grupo querían jugar con ambos.

-Bien, esta es la última caja - Eijiro se acostó en el suelo de regreso en su departamento- estoy muerto.

-Te dije que no cargaras a esos niños -Katsuki se sentó a su lado -ahora te dolerá la espalda.

-Hmm -sonrió acomodándose en sus piernas- tú también te divertirste, admítelo.

-Sí- acarició su cabeza- supongo... gracias -besó su cabeza- por la ayuda y todo eso.

-No hay de qué -lo miró a la cara- serías un buen padre, ¿sabías?

-¿Eso a que viene? -rió- no es como que me puedas convencer para embarazarme.

-Podría intentarlo -se encogió de hombros y su novio golpeó su frente- pero en serio, eres bueno con los niños.

-Sólo jugué con ellos un par de horas, eso no significa que lo seré.

-Pero lo has pensado -se sentó, quedando frente a frente, jugan ambos con las manos- te vi hoy, claramente disfrutas estar con ellos y ahora que vivimos juntos, podrás convivir más. La siguiente semana jugaremos volleyball, sé que juegas de vez en cuando con tu ma...

-¿Tú quieres hijos? - Katsuki lo interrumpió, mirándose cara a cara - ¿Quieres tener hijos conmigo?

El rubio lo miraba serio y Eijiro simplemente tragó saliva ya sabiendo su respuesta.

-Siempre he querido- rascó detrás de su cabeza- sé que es muy pronto para siquiera pensarlo, pero... Si tú quieres, algún día... Me encantaría tener un pequeño en nuestro equipo.

Se mantuvieron en silencio por unos momentos.

-Podría pensarlo -le contestó- algún día, después de que por fin me hayas pedido mi mano... Te dejaré tener todo un equipo de fútbol si así lo quieres -revolvió su cabello- ahora vamos a bañarnos, apestas.

-Claro -se levantaron para ir al baño.

Fin.