Diecisiete

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Shoto miraba con cierto interés la cajita que Katsuki le había dado antes de irse

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Shoto miraba con cierto interés la cajita que Katsuki le había dado antes de irse. Shoto siempre había sido una persona simple, y una joya demostraba lo poco que Katsuki lo conocía. 

Izuku siempre había manejado el asunto del cortejo bien. Siempre le daba cosas de comer, llaveros, lápices; cosas que Shoto pudiese ocupar en el día a día y que no estorbasen con la imagen que el omega quería dar. Talvez seguir comparando a Izuku con Katsuki no le sirve en nada, ya sabe que son muy diferentes, y todo lo ocurrido la última semana, le ha dado la libertad para desprenderse más de Izuku, del lazo, y de sus ilusiones banales. 

Y de todos modos no esperaba nada de Bakugo, así que cuando abrió la caja, le sorprendió encontrar una cadena de oro delgadísima con un colgante de flor de cerezo, adornada en el centro con un cristal. Sin palabras, Shoto simplemente se lo puso en el cuello, y siguió adelante. 

Las clases de Aizawa fueron un calvario. Kirishima, contra todo pronóstico, lo lanzo a una pared, Momo lo colgó de un edificio, entre otros compañeros que solo estaban practicando. Shoto no es una persona débil; sin embargo, jamás ha sido bueno para el cuerpo a cuerpo, y Aizawa lo había notado porque ahora lo ponía en todas las batallas posibles con gente muy capaz de.  

Durante el descanso, nuevamente pudo visualizar como Kaibara pasaba a darse una vuelta al gimnasio, con las manos en los bolsillos, depredadoramente. 

No le sorprendía para nada. Ken siempre había sido mucho más insistente, mucho más atrevido. Shoto nunca había entendido si era porque era un hijo de puta, o algo más, pero incluso mientras estuvo fingiendo con Izuku, siempre estaba ahí; observando o diciendo alguna barbaridad. 

Sea como sea, lo único que le interesaba era salirse de su campo de vista, y como acción del cielo(o del diablo, seguramente) Katsuki se le puso en frente, ofreciéndole una botella de agua. 

—¿Me vas a envenenar con eso? 

—Talvez así Kaibara te deja en paz. — Bromeo sentándose a su lado.

—¿Por qué estás aquí?— Shoto lo miro acusatoriamente. 

—¿Te gusto el collar? —Ignoró deliberadamente. 

—No. 

—Qué omega tan complicado.— Dice el alfa ofendido, picándole la oreja con el entrecejo fruncido. — No joyas, no flores... ¿Peluches? 

—Si vas a gastar tu dinero, que sea en algo útil. 

—¿Qué se supone que te regale entonces? — Shoto se lo pensó entonces.  Aún recordaba lo absurdamente feliz que era cuando Izuku preparaba algún pastel el domingo. 

—Que tal algo de comida. — Menciono cuando vio la incredulidad del alfa, sintiendo que tal vez no era una buena opción. — Nunca hay cosas dulces en la cocina de la UA, y la última vez que intente cocinar algo, recordaras que queme la cocina. 

Katsuki trato de aguantarse la carcajada. 

—¿Qué quieres exactamente? 

—Cualquier cosa que sea dulce. 

—Bien, leche y Berlínes para el príncipe.— Dijo levantándose. —Diviértete en la clase mixta con tu idiota. 

—Oh, y tú con tu primo.— Mencionó burlesco devolviéndose a su sector. 

La hora de almuerzo llegó más rápido de lo esperado, Katsuki había tratado por todos lados evitar a sus amigos, sabiendo que lo regañarían por ir con Camie cuando esta lo llamo la semana anterior

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La hora de almuerzo llegó más rápido de lo esperado, Katsuki había tratado por todos lados evitar a sus amigos, sabiendo que lo regañarían por ir con Camie cuando esta lo llamo la semana anterior. Tampoco podía entenderlo, lo que pasaba entre ellos no era problema de nadie más que de él. 

Tal como predijo, fue cuestión de sentarse para que todos en la mesa se quedasen en silencio. 

— ¿Qué? — La mirada acusatoria de todos sus amigos se fijaban en él, y a este punto se estaba volviendo incómodo. 

—¿Saliste con Camie? — Sero, que estaba relativamente callado, abrió una bebida mirándolo con cierta desilusión. 

—Sí, ¿Es un problema que haga mi vida como se me dé la gana? — Respondió defensivo cuando Mina le agarro la mano. 

—No es lo que queremos decir y lo sabes.— Dijo suave. —Camie en muchas ocasiones aparece cuando cree que va a perderte. 

—Pero es mi problema, no el de ustedes.— Dice molesto por la intrusión. 

— Solo desearíamos que te quisieras un poco.— Denki, que no le había dirigido la mirada en ningún momento, hasta ahora. —Quiero decir, por cuanto tiempo más vas a aguantar, que Camie te tenga de segundo plato. Que suene el silbato y corras entre sus piernas. 

Katsuki bufo ante la mirada del omega, el que después de servirse una copa de helado continuo. 

—Abandonaste a Reiko porque ella te lo pidió, te exigió exclusividad y volvió con una marca y un lazo temporal. — Dijo quedito. — No te estoy pidiendo que la dejes de lado, pero si que recuerdes el calvario por el que pasamos todos cuando tu alfa decayó por su culpa. 

—No queremos entrometernos, Suki, pero debes entender que nos preocupamos por ti... 

Katsuki pensó entonces que Denki tenía razón, sin embargo, Camie había sido el primer destello de luz que había visto al salir de su casa, y no podía soltarlo tan fácilmente. Aunque quizá podía intentarlo. 

—Bueno, cambiando de tema...— Denki alzo la voz nuevamente. — ¡Te vimos con Todoroki! ¿Le preguntaste si podíamos llevarlo de compras como te pedí?

 — ¡Te vimos con Todoroki! ¿Le preguntaste si podíamos llevarlo de compras como te pedí?

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Hola buenas... su escritora lenta pero segura. 

Aún estoy leyendo BAD HABITS pero la neta me da pereza. JHBSNJDAC 


Saludos 

MaKA


Konohana ;✧ BakuTodoWhere stories live. Discover now