Sabía que había hecho mal, se había creado una barrera entre él y sus padres, una que había construido por su cuenta y que ahora lamentaba.
No era culpa de los progenitores del chico, ellos siempre habían buscado la manera de que Minho hablara sobre lo que sentía o sucedía en su vida, querían saber cómo podían ayudarle a sobrellevar las cosas. Cosa que nunca pasó por el alejamiento del menor.
Quedaba poco tiempo y ninguno podía cambiarlo, Lee Minho estaba completamente resignado, así era la vida, su corta vida.
- ¿Cuanto tiempo? - Habló la madre del chico a su lado, al final, el destino o como quieran llamarlo, era cruel. Supo que sería un corto periodo con su amado hijo cuando el médico frente a ellos no decía palabra alguna y su mirada se encontraba baja.
- Es incierto, máximo tres meses más. - Dijo - Sabemos que ésto pasaría si la medicina no hacía efecto. Llevamos un año en tratamiento y no encontramos algún avance. - Miró a las tres personas frente a él, especialmente al menor entre todos ellos, Minho. Tenía una, por no decirlo de mala manera, una apariencia, nada que ver con el chico de hace solo unos meses que sonreía y estaba con un humor positivo. Se le notaba deprimido, agotado tal vez y era entendible después de semanas en tratamiento, mejor dicho, años. - Es mejor que se vayan preparando para lo peor, lo lamento mucho.
Había sido médico personal de los Lee por años, desde que Minho era un pequeño niño de tan sólo cuatro años. Había llegado en mal estado, tenía desvanecimiento y pesadez en su cabeza, algo totalmente extraño. Al principio dijeron que era un simple tumor en su corazón o que podía sufrir de hipertensión arterial, sin embargo era algo mucho más riesgoso que eso.
No se creía en el cáncer de corazón en aquel hospital pues jamás habían escuchado de algún caso así, sin embargo, con la llegada de Minho todo eso se fue al carajo y entonces hicieron el tratamiento debido, fue difícil, pero después de cuatro años de lucha, salió bien y pudo seguir con su vida normal. Había riesgo de recaer y por eso sus padres lo cuidaban, su hijo, el único, su tesoro más preciado podría perderse de un día para otro.El sentimiento en la familia y amigos cercanos era terrible, Minho había pedido que solo unos cuantos más estuvieran cerca a él en sus últimos meses. Sus padres, Seungmin, Jeongin, Chris, algunos tíos y primos por parte de su madre, sus abuelos.
Debía ser una partida silenciosa.
Su corazón dolía de solo pensar en Hyunjin y el cómo podría tomarlo si se enteraba, por eso prefería mentirle y decirle que se iría a estudiar al extranjero. Chris, por su parte; seguía saliendo con Minho y aunque habían olvidado el tema de aquel beso, era imposible para Christopher el no odiar a Hyunjin por tener el corazón de su amado después de tanto daño causado.
- Channie - Habló el rubio con felicidad. Su cita iba lo suficientemente bien para que Minho estuviera felíz, y entonces el mayor también lo estaba. - ¿Podemos ir al parque y sentarnos un poco? Mis pies me están matando.
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𝑻𝑯𝑨𝑵𝑲 𝑼 / 𝑯𝒚𝒖𝒏𝒉𝒐.
Fanfiction"Solo quería que me amaras aunque sea un momento, lamento haber sido una pérdida de tiempo." - Con amor, Lee Minho. • Historia corta • Capítulos con un mínimo de 900 palabras