#10: THE PREYING

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—La reina de Caelirye ha estado traficando esclavos y descubres que nobles tesatrovos y caeliryanos han estado involucrados. La reina Helena necesita pruebas irrefutables y testimonios para proceder judicialmente, pero solo tiene algunos nombres. ¿Qué haría Gavin Renard?

Gavin miró a la señorita Rossin con cierta cautela. Quería comer en paz, pero su instructora siempre le decía que el mejor momento para trabajar era el momento menos pensado. Ella solía interrogarlo en cualquier momento del día para obligarlo a pensar rápidamente, para que aprendiera a tomar las mejores decisiones en las circunstancias menos pensadas.

—Gavin Renard conseguiría pruebas y testimonios para ella —contestó, dejando su tenedor a un lado para poder elaborar—. Usaría los nombres que tenemos. Interrogaría a los empleados de esos nobles primero, porque interrogar a la nobleza directamente podría poner sobre aviso a los otros nobles cuyos nombres no tenemos. Una vez con los nombres definitivos en mi poder, mandaría seguir a los nobles de Caelirye. Si ellos resultan ser culpables, haría lo mismo con los nobles tesatrovos. Seguirlos sería esencial, porque no solo me diría si mi investigación está bien encaminada, sino que podría darme pruebas contundentes contra la nobleza caeliryana y su reina.

»Al final, me encargaría de los nobles tesatrovos con la mayor confidencialidad posible y entregaría las pruebas y los testimonios a la reina. Le aconsejaría convocar a los otros reyes de Kelebek con discreción, porque la reina de Caelirye goza de la estima de los otros soberanos y eso podría jugarle en contra a la reina Helena.

La señorita Rossin pareció meditar por un momento. Gavin esperó con paciencia, devolviendo la atención a sus fideos. El comedor de la casa noble Renard estaba desolado a esa hora —había terminado de entrenar tarde, así que almorzaba tarde—; por lo tanto, el silencio era casi estruendoso.

—Casi perfecto —declaró finalmente su instructora, todavía de pie a unos metros de él—. Responde esto: ¿por qué no investigarías a los nobles tesatrovos primero, si son los que tienes más cerca?

Gavin no dudó al responder.

—Porque son tesatrovos. Mi lealtad está con mi nación, así que, de ser posible, preferiría no humillarlos sin estar seguro de su culpabilidad. Si mi investigación a la nobleza caeliryana dictaba que los nombres de los nobles tesatrovos no eran más que una falsa alarma, habría deshonrado a la nobleza de nuestro país por simples sospechas.

—Buena respuesta, pero no es práctica —corrigió su instructora, cruzando los brazos sobre su pecho como cada vez que le daba lecciones para recordar—. Los nobles tesatrovos serían más fáciles de controlar que los caeliryanos, porque tu influencia en Tesatrova es grande y puedes encarcelarlos de forma discreta, así como prohibirles salir de Tesatrova. No puedes hacer eso con la nobleza de Caelirye.

Él contuvo un suspiro cuando la señorita Rossin terminó de hablar, pero ella pareció notar su decepción.

—Has vivido once años como un noble tesatrovo, lo cual significa que el amor que sientes por tu nación es válido y precioso. No voy a quitarte eso —comentó, frunciendo ligeramente el ceño—. El problema es que el amor nunca debe impedir que hagas lo que tienes que hacer. Eres un Renard, así que debes vivir por y para tu reina, incluso si eso significa que utilices o humilles a tu familia, a tus amigos o a la nobleza de tu propio país. Todas las piezas que están a tu alrededor pueden ser usadas y tú no debes temer usarlas porque el tablero te pertenece. ¿Comprendes, Gavin Renard?

Gavin Renard volvió a dejar el tenedor a un lado. Giró el rostro hacia su instructora y le dedicó una sonrisa.

—Comprendo, señorita Rossin.

BK: Butterfly's KissDonde viven las historias. Descúbrelo ahora