Otro atardecer; Quackity

Capitulo veinticuatro

🇪🇸📍Madrid, España | La casa Madrid |
3:16 a.m. | After y Baby Shower

Yuli

La música aún sonaba por toda la casa, Alex y yo habíamos estado juntos, mientras comíamos habíamos llegado a un acuerdo. Intentaríamos estar juntos, de nuevo. El quería formar parte de mi vida y la del bebé, quería estar presente y yo acepté, acepté porque aún estaba enamorada de él.

Baile toda la noche, disfrute con mis amigos, conocí a gente nueva, cante mis canciones favoritas y ahora me encontraba con Alex jugando billar.

—Eres horrible en esto amor—dije burlándome de el.

—No es mi culpa no ser un vago como tú, señorita "En prepa iba a los bares para jugar billar"—rodé los ojos.

—Eres un menso—dije riendo—Gáname y hablamos—le puse mi mano y el soltó una carcajada.

—Mejor ya dame un beso—dijo acercándose y negué.

—No, no, te conozco y no me voy a dejar ganar solo porque me des besos—dije riendo y el vino detrás de mi, me abrazó y reí.

—Te amo Yuli—dijo poniendo su naricita en mi mejilla.

—Yo también te amo—dije alejándome un poco para ver su rostro.

—Tienes unos ojos bien preciosos chaparra—sonreí y lo miré con una ceja alzada—Dame un besito—acercó su boca a la mía para besarme, sonreí entre el beso y nuestros amigos llegaron a interrumpir el momento.

—¡Vivan los novios men!—Osvaldo se abrazó a Alex y mi hermana estaba abrazada a mi, muy peda.

—No mames por fin ya le puedo decir cuñado otra vez a este puñeton—señaló a Alex y reí.

—¿Te sientes bien?—le pregunté, ella asintió—Si te sientes mal dime a mi o a Félix, ¿Si?—ella asintió.

Juan estaba grabando una historia, Alex y yo estábamos platicando muy cerca, reí por alguna cosa que dijo y mi amigo nos enfocó.

—Yo les dije, Yulckity no estaba muerto—Alex y yo reímos—bésense para que me crean—negue pero Alex me presiono mis labios en un beso.

—Somos amigos, así reforzamos la amistad—alejo la cámara y siguió besándome—Mmm...Tengo sueño—dijo alejándose de mi.

—Pues dulces sueños Alex—di un golpecito en su nariz y comencé a caminar lejos de él, lo miré un poco, me veía con un rostro lleno de incredulidad.

Reí y camine hacia mis amigos, llegue a la cabina de DJ donde Carola me abrazó con fuerza y correspondí.

—Pero que guapa que estás tía, es que de verdad te sentó de maravilla vivir en Europa—rodé los ojos.

—No digas eso, sigo igual que siempre—me encogí de hombros, el chico me ofreció una cerveza y negue.

—No puedo beber—me encogí de hombros—Ya sabes los medicamentos—el bufo y asintió.

—¿Algo de coca quieres?—asentí y el sirvió un poco. Me dio el vaso y siguió mezclando las canciones.

—¿Será mucho pedir que me pongas una canción?—pregunté y el negó.