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Capítulo veintidos

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Capítulo veintidos

—Camina un poco más despacito

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—Camina un poco más despacito...

—Ni siquiera estoy caminando rápido, voy a velocidad normal —Neymar se detuvo de golpe, con el ceño levemente fruncido, y esperó a que yo llegara a su lado—. Manuelita...

—No sé si te diste cuenta de que no voy sola —Me quejé, parándome a su lado para recobrar un poco el aliento—. Somos tu hija y yo intentando hacer ejercicio, dos cuerpos en uno, es muy injusto... además, vos sos deportista, así no tiene gracia.

—El doctor dijo que tenías permitido salir por un paseo diario y yo las quiero acompañar —Me agarró la mano y tiró de mí hasta que llegamos a un banco. Neymar se sentó y me hizo recostarme con la cabeza apoyada en sus piernas, comenzando a juguetear con mi cabello—. No imagino cómo debe sentirse quedar sin aire a media cuadra.

Soltó una risita cuando lo miré mal. Lo cierto era que mi cuerpo había cambiado notoriamente con el embarazo, y las cosas que antes hacía sin el menor esfuerzo, ahora me costaban el doble. Claro que él no lo entendía, sus músculos y su nivel no se habían desgastados al crear a la meloncito.

Miré a mi alrededor, disfrutando de la calidez del sol sobre mi rostro. Lo que más me gustaba del lugar donde vivíamos era que teníamos un parque enorme solo para nosotros, no teníamos que preocuparnos de ser seguidos por las cámaras o bombardeados de preguntas fuera de lugar, impidiéndonos compartir un momento de pareja normal.

Este era nuestro rinconcito, el castillo que habíamos armado para construir una familia grande como quería el jugador. Emma y Davi tenían espacio de sobra para correr, jugar y crecer en un ambiente sano. Y ahora nuestra hija también iba a formar parte de ello. Estaba segura de que, si bien ser hija de uno de los futbolistas más famosos del mundo le iba a traer algunas consecuencias negativas, tanto él como yo haríamos lo posible para que no las sufriera tanto.

Iba a crecer en un ambiente público porque por más que lo intentáramos su vida ya había dejado de ser privada desde el momento en que él y yo decidimos compartir con el mundo la noticia de su llegada. Aún así, intentaríamos dejarla fuera del foco de los periodistas, las fans y los hinchas del club que todavía no terminaban de querer del todo a mi marido.

𝗙𝗮𝗺𝗲 𝟮 |𝗡𝗲𝘆𝗺𝗮𝗿 𝗝𝗿Donde viven las historias. Descúbrelo ahora