Me empiezo a remover incómoda sobre una superficie suave.
De poco a poco empiezo a abrir los ojos, adaptándome a la luz que me llega a ellos.
Se me sale un quejido de la boca al sentir un ardor en mi brazo derecho, confundida miro mi brazo percatandome de que tenía puesta una intravenosa.
—Por dios Hera, que bueno que despertaste— volteo la vista hacia la voz que hablo, era mi madre, la cuál tenía una expresión de preocupación.
—¿Donde estamos?
—Estamos en el hospital, tus amigas nos llamaron desesperadas.. te habías desmayado— me dice.
Yo me siento sobre la camilla donde estaba acostada, volteo a la vista hacia una ventana fijandome en que apenas el sol estaba saliendo.
—Mamá, ¿qué hora es?— le pregunto confundida.
—Son casi las cinco de la mañana.. espera aquí, iré a traer a la doctora— me dice antes de salir corriendo.
Volviendo a los pocos minutos en compañía de la doctora que me atendió la vez pasada, y junto a ella una enfermera.
—Buenos días— me saludan ambas.
—Buenas— saludo igualmente por cortesía.
—Hera, tus amigas nos contaron que fue lo que hizo que tuvieras esa reacción. Al ver esa noticia tuviste un ataque de pánico, lo cual es comprensible por la situación que pasaste.
—¿Fue eso nada más doctora?— pregunta mi madre.
—Por ahora eso parece, pero de todos modos le haremos algunos análisis para ver si hay algo más detrás del desmayo— dice.
La enfermera se acerca a mi, con una jeringa en su mano.
—Es necesario extraer un poco de sangre— dice antes de pinchar me con la jeringa provocándome un quejido.
Cuánto termino de extraer la sangre, me puso una curita arriba del puntito del pinchazo.
—¿Cuando estarán los resultados?— pregunto mirando hacia la doctora.
—Probablemente dentro de media hora, no demora mucho..
Antes de salir de la habitación, se voltea y me mira:
—Por cierto... ¿cuando fue la última vez que viste tu periodo?— me pregunta con curiosidad.
Me quedo pensando y confundida respondo.
—Emm no recuerdo.. creo que... antes del secuestro— suelto, confundida por su pregunta.
—Esta bien..
Dice antes de salir junto a la enfermera de mi habitación.
(...)
Estaba viendo los mensajes que mis amigas me enviaron, preocupadas y preguntando si me encontraba bien.
Dejo el celular a un lado cuando la puerta se abre entrando por ella la doctora con unos papeles en manos.
—Ya están los resultados de los análisis..— dice para volver a hablar:— Hera lo que te voy a decir necesito que lo tomes con calma ¿de acuerdo?
Yo asiento confundida.
—¿Que tiene mi hija?— pregunta mi madre impaciente.
—Bueno señora, le hicimos el análisis de sangre, y el resultado confirmo mi sospecha— dice. Con la cara apenada, como si fuera a dar una mala noticia
—¿Que sospecha?— está vez pregunto yo.
—No te desmayaste solamente por un ataque de pánico— da un suspiro— lo que te voy a decir Hera.. te cambiará la vida por completo— dice con pésame.
—Hable de una vez— pido astiada.
—Estas embarazada...
Embarazada
Embarazada
Embarazada
Embarazada
Embarazada
Embaraz...—¿Que?..— pregunto con la voz temblorosa, a punto de llorar mientras mi madre se lleva las manos a la boca para callar su grito.
—Si.. tienes al rededor de un mes, pero no estamos seguros, necesito hacer un ultrasonido para comprobarlo.
—Doctora... Nos.. nos puede dejar un momento a solas.. por favor— pide mi madre con los ojos aguados.
—Claro.. con permiso— se despide antes de retirarse de la habitación cerrando la puerta.
Me volteo hacia mi madre llorando..
—Mamá.. que haré, solo tengo dieciséis años.. y es producto de una.. de una...
—Hay mi bebé— dice mientras me abrazaba, yo apoyé mi cabeza en su hombro llorando— lo siento tanto...
Yo lo único que puedo hacer es llorar asustada... el estar embarazada significa que algo me une a ellos, dándoles más razón de volver por mi.
Nos quedamos un rato así, hasta que ella me pregunta:
—Hera.. necesito preguntarte algo— me dice mi madre separándose de mi y mirándome con la cara empapada en lágrimas, pero con seriedad—¿tu.. estás dispuesta a tener a... ese bebé?
—No se— le digo sollozando.
—Quiero que sepas... que te apoyaré en lo que decidas.
Me quedé unos largos minutos pensando mientras ella me miraba, al final tome una decisión.
—Si, si quiero— le digo— este bebé.. no tiene la culpa de nada.. no me creo capas de poder a..a— me callo no pudiendo decir la palabra.
—Esta bien, tu eres fuerte, lograrás a salir adelante— me dice para besar mi frente.
—¿Me prometes ayudarme?— le pregunto en un hilo de voz.
—Claro que si..
Nos quedamos juntas abrazadas, ella consolandome.
Al rato vino de nuevo la doctora, preguntándome mi decisión.
Al oírla me apoyó, y me dijo que tendrían hacerme un ultrasonido más tarde, pero que primero tendría que descansar.
Mi madre fue a hablar con mi padre para contarle la noticia, mientras que yo me encontraba pensando.
Un bebé, tendré un hijo...
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Presa de una obsesión [#1]
Misterio / Suspenso"Así es, somos tus amos, somos tu mundo, ¿Entiendes eso? No puedes vivir para nadie más, solo para nosotros, para complacernos". - Aedus Dagger l libro de la trilogía Obsesiones. ...... Todos los dere...