Imagina que te encuentras en un limbo emocional, lleno de dudas, lágrimas y vacío sin respuestas y recibes un llamado desde otro continente para anunciar la muerte trágica de un ser querido...
Imagina que la pérdida de tus padres, no solo traería so...
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GIOVANNI RUGGIERO
Transcurrieron un par de días y no hubo señales de Luca, mis hombres se mantenían alerta ante cualquier amenaza. Descubrimos un par de traidores y Fabio se encargó. Gin se mantuvo cautelosa, se encerró en su habitación y no salió por miedo a que el infeliz viniera en busca de ella. Tenía prohibido a mis hombres acercarse a ella, su protección estaba bajo Enzo, Fabio y yo, no podía confiar en que no quedara alguna basura entre nosotros.
—Nos está dejando fuera —mi hermana me sacó de mis pensamientos
—¿Disculpa? —fruncí el ceño, no entendía lo que decía
—Gin... ella... no está dejando fuera, no habla, no ha llorado de nuevo, solo esta allí, existiendo —su voz era realmente de preocupación
—¿Puedo? —tocó la puerta Fabio
—Adelante —imaginé que también vendría a hablar de su hermana
—Necesitamos hacer algo, soy nuevo en todo esto de los hermanos, me estoy volviendo loco al verla así... —la frustración de Fabio era evidentemente incontrolable
—¿Qué puedo hacer? —pregunté alternando mi mirada entre los dos
—Ella... ella quería conocer Italia, solo salimos unas dos o tres veces, antes de que ella te viera... ya sabes —suspiró—, no puede estar encerrada...
—Mikhail me dijo que debes ir a Rusia para verificar un cargamento... —miré a Fabio— y tu —me dirigí a mi hermana— no sales de aquí sin protección... además serían un blanco fácil las dos juntas
—¿Podrías ir tú? —preguntó con temor mi hermana— eres el más capacitado para defender a alguien... Fabio no estará y Enzo está resolviendo los asuntos de Fabio...
—Creo que es una pésima idea... —resoplé
—No estoy de acuerdo... —gruñó Fabio
—¿En qué no estas de acuerdo muñequito? —a Enzo le encantaba llevar al borde la paciencia de todos, en especial la de Fabio
—En que Giovanni haga de guía turístico a mi sorella —hizo énfasis en la palabra hermana, en italiano
Enzo frunció el ceño confundido y se dirigió a mi —¿Guía turístico?
—Gin esta mal... ella... siento que esta a un paso de colapsar —explicó Giuditta— el miedo la ha bloqueado, ni siquiera he logrado que diga una palabra desde hace dos días...
—Mierda —murmuró Enzo—, no sabia que podría quebrarse de esa manera... —tomó aire— ahora entiendo, Ditta tiene razón, hay que sacarla de allí, no todo puede ser oscuridad, ha sufrido mucho
