BOOKS AND HORSES || 2yeon

Capítulo 21

En caso de tener errores ortográficos, en la redacción o confundirme con la trama por favor avísame para corregir y hacer mas cómoda la lectura.

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La mañana había llegado con una Nayeon ansiosa por ver a la pelicorto. Mientras desayunaba con sus padres pensaba en que en tan solo unas horas volvería a verla y de nuevo podrían comenzar a enseñar lo que una sabe a la otra. Mentiría si dijera que queria verla solo para las clases, porque su corazón le pedía volver a tenerla cerca, ver sus ojos cafés entrecerrados por el sol, su característica sonrisa amable o su timidez cuando le decía algo de broma. El día anterior había evitado pensar en lo que pasaría después de haber compartido el beso y si su relación de la que dudaba todavía fuera una simple amistad se vería afectada, el poco tiempo que compartió con la menor no parecía diferente ni distante por lo que sentía que hasta ahora no debía preocuparse.

En momentos como esos su mente parecía jugarle bromas pesadas ya que sin querer y como había estado haciendo desde el día anterior, recordó el suave toque de los labios de Jeongyeon junto a los suyos. Había sido maravillosa la forma en la que parecían haber encajado en los labios de la otra como si llevaran tiempo esperando a que ese momento sucediera. Una sonrisa como la que se asomaba justo ahora era lo que mantenía a sus padres mirándola de manera interrogante pero sin querer preguntar para no invadir su privacidad, sabían que en cualquier momento y cuando la menor de la familia estuviera lista iba a hablar.

Su padre carraspeó asustándola y sacándola de manera repentina de sus recuerdos.

–Llevas aproximadamente dos minutos moviendo tu tenedor por todo tu plato sin siquiera llevarte algo de comida a la boca– con un levantamiento de cejas le dijo de forma expectante.

– ¿Me contaron el tiempo? increíble– con fingida molestia comenzó a comer.

–Has estado distraída desde que llegamos, podemos notarlo Bunny– su madre esperaba que cualquier cosa que estuviera pasando en el pequeño mundo de Nayeon sea algo bueno, cosa que al parecer era así porque los últimos días se había mantenido más tiempo con la sonrisa que habitualmente tenía.

–Lamento decirles que no sé de qué hablan– dijo con una sonrisa burlona.

–Ya veremos– su madre le respondió de la misma manera.

– ¿Tienen algo planeado hoy? – preguntó Nayeon intentando persuadir a sus padres para detener las preguntas.

–Nosotros no– habló su padre – ¿Y tú? – le preguntó apuntándola con el tenedor que usaba.

–Saldré con Jeongyeon por la tarde, estaba pensando en comenzar las clases hoy pero creo que prefiero salir y seguir aprendiendo a montar. Realmente estoy interesada– comentó y sus padres asintieron en comprensión, sabían que si su hija se proponía aprender algo lo lograba.

–Quizá algún día te animes a salir a montar con tu padre– cuando escuchó a su madre decir aquello no pudo evitar toser mientras tapaba su boca.

– ¿Sabes montar, papá?

–Por supuesto, pero dejé de hacerlo hace algún tiempo. Pensé en enseñarte cuando llegamos pero al parecer Yeoni me ganó en hacerlo.

–Oh, sí, podrás hacerlo un día papá, podemos salir juntos– se sintió mal por un momento cuando se dio cuenta que parecía pasar más tiempo pensando en la pelicorto y conviviendo con ella pero no estaba segura de atreverse a dejar las clases para empezar a aprender junto a su padre. Era la única forma en la que podía pasar tiempo con Jeongyeon de forma justificada.

–Claro hija, cuando quieras.

Después de haber terminado con el desayuno y de haber lavado los platos, organizó el protector solar y la toalla en caso de necesitarla y después pensó en comenzar una llamada en el grupo que compartía con Momo y Sana. Desde el día que lo había confesado todo a Sana no volvió a comunicarse con ella ni con su novia para evitar preguntas de las que todavía no tenía respuesta.