play pretend [kooktae]

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De pequeño, Taehyung era de esos niños que no querían perderse nunca un día de colegio. Incluso cuando estaba enfermo, le rogaba a Papá que le dejase ir a clase. Estar en casa significaba aburrirse, porque Seokjin estaría en el colegio. Cuando nacieron los gemelos, significaba que además tampoco podría quedarse durmiendo; porque había demasiado barullo en casa. Los gemelos lloraban, se reían, tiraban la comida o gritaban. Papá no daba a basto con ellos; por lo que Taehyung no quería añadirle la carga extra de tener que cuidar también de él. Así que, la mejor opción parecía ser ir al colegio; por mucho que le doliese la cabeza o tuviese fiebre.

Al entrar en la adolescencia, se añadía la dificultad de que perder un día de clase significaba un montón de apuntes y deberes atrasados. Taehyung odia ir atrasado. Odia perderse las explicaciones. Siente que si lo hace, su nivel académico se verá irremediablemente alterado. Por lo tanto, siempre escondía el hecho de encontrarse enfermo hasta que ya se encontraba tan pálido que Seokjin brincaba en su sitio a causa del susto.

Por suerte, su sistema inmunológico parece haberse vuelto más fuerte, y apenas ha faltado a clase por estar enfermo desde que empezó el instituto. Solo hubo una ocasión en que tuvo que quedarse reposando en casa durante tres días, y fue en gran parte porque, de lo contrario, Seokjin lo habría encerrado en su habitación y habría tirado la llave. Lo cual, se trataría de un gesto enormemente hipócrita, porque Seokjin es el primero en ignorar que se encuentra enfermo y seguir adelante con su vida como si nada. En ocasiones, Taehyung se sorprende al pensar en la gran cantidad de cosas que ha ido copiando de su hermano mayor a lo largo de los años.

Un día después de su visita a casa de Jungkook, Taehyung moquea ligeramente. Se trata simplemente de un catarro, y decide no darle más importancia. Simplemente, lleva un paquete extra de pañuelos en la mochila; y con eso parece más que suficiente. Solo tuvo puesta su ropa mojada por un periodo inferior a una hora, y Jungkook se encargó de cuidarlo bien. Taehyung no tiene por qué ponerse enfermo. Lo más probable es que se trate de un simple catarro que no va a pasar a mayores.

Definitivamente, a Jungkook no se lo parece cuando Taehyung sube al coche sorbiendo por la nariz.

"¿Qué te pasa? ¿Estás llorando?" pregunta en un inicio, y acto seguido frunce el ceño "Taehyung, ¿estás enfermo?" a juzgar por el tono de voz que utiliza, Taehyung tiene la teoría de que si le dice que, efectivamente, lo está; el azabache va a padecer una crisis nerviosa.

"Tengo tu ropa." contesta en su lugar, agitando levemente la bolsa que descansa en su regazo en un intento de distraerlo.

Desgraciadamente, Jungkook no parece caer en su trampa "Taehyung, respóndeme." insiste de nuevo.

"Solo moqueo un poco." se rinde finalmente Taehyung, encogiéndose de hombros en un intento de restarle importancia "Tranquilízate, ¿vale?" pide, rodando los ojos.

Jungkook chasquea la lengua, pero no responde. El resto del camino lo recorren en silencio. Al menos, hasta que los gemelos llegan a su destino, y ellos se quedan solos dentro del coche. Taehyung observa cómo Jungkook tensa la mandíbula, volviéndose esta más filosa en los contornos.

"¿Qué te pasa?" suspira Taehyung finalmente. No entiende por qué tanto drama por un simple catarro ¿Es que acaso Jungkook nunca los padece?

"Como te hayas puesto enfermo en semana de exámenes..." farfulla Jungkook simplemente, sin apartar los ojos de la carretera. Tiene esa expresión de preocupación y enfado en el rostro que Taehyung odia con todo su ser. Jungkook es el tipo de persona que nunca se toma nada demasiado en serio, y a Taehyung le gusta que así sea. De esa forma, ambos se complementan perfectamente.

Taehyung suelta una risa seca "¿Eso es lo que te preocupa? ¿Que te deje colgado y no tengas con quien estudiar?" pregunta, con un bufido "Tranquilo, si hace falta te daré las clases desde la tumba." ironiza. No puede creerse que todo esto sea por sus estúpidas clases particulares.