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Taehyung siempre supo que llegaría el día.

Seokjin, siendo dos años mayor que él, se marcharía a la universidad primero. Así, él pasaría a ser el hermano mayor.

Le tocaría llevar a cabo las tareas que ahora Seokjin deja atrás: ayudar a los gemelos con sus deberes cuando Papá está ocupado, llevarlos a sus extraescolares en caso de ser necesario, recordarle a Papá que compre una botella del vino favorito de Mamá cada vez que ella vuelve de viaje...

Simplemente, no pensó que ocurriría tan pronto. Los años parecen haber pasado a una velocidad vertiginosa, y Taehyung apenas ha sido consciente de ello.

Su madre es adicta al trabajo. Un trabajo que la obliga a marcharse de viaje durante días. Desde que Taehyung era pequeño, siempre ha sido así. Mamá se va de viaje aproximadamente dos o tres veces al mes, y el resto de días está encerrada en su oficina hasta la hora de cenar. Llegados a este punto, ya todos están acostumbrados.

Cuando Taehyung era más pequeño, le costaba entender por qué su madre prefería estar siempre en el trabajo en lugar de en casa con ellos. Por qué era capaz de marcharse de viaje durante días y no sentir ni una pizca de lástima por ello.

A medida que fue creciendo, comprendió que la carrera profesional de su madre era algo que le había supuesto mucho esfuerzo y dedicación, y que no iba a rendirse fácilmente con ella ¿Cuántos padres adictos al trabajo casi no ven a sus hijos mientras que sus esposas se encargan de criarlos solas? ¿Por qué nadie se queja de ello pero sí les molesta cuando se trata de una mujer?

Papá trabaja por las mañanas, así que por la tarde se encarga de las tareas de casa. Nunca le ha molestado que Mamá trabaje tanto; de hecho, cuando la ascendieron, él cambió de trabajo para conseguir uno que le proporcionase mayor flexibilidad y así poder encargarse de cuidar a los gemelos, hacer la comida, limpiar la casa... Sin duda, no hay nadie que se alegre más de los triunfos laborales de su mujer que él. Siempre se han complementado a la perfección, y el ámbito laboral no es la excepción.

Taehyung lo ayuda con ciertas cosas como la colada o la lista de la compra, pero es cierto que Seokjin desarrolla un papel mucho más activo en casa. O, al menos, solía hacerlo. Porque ahora se marcha a estudiar a una Universidad a seis horas en coche, así que desde luego no va a estar disponible para recordarle a papá dónde ha dejado el vestido favorito de Yoojin o que Hyunsoo es alérgico a los cacahuetes. Sinceramente, no tiene ni la menor idea de cómo van a arreglárselas sin Seokjin.

"No me creo que te vayas ya." mumura Taehyung, sentado sobre la cama de su hermano mayor y observándole meter un par de cosas que faltaban en su maleta de mano.

Han decidido que doce horas de viaje para llevarle a su destino y volver a su hogar son demasiadas, así que lo mejor será que Seokjin coja un vuelo. Por lo tanto, deberían salir de casa en menos de media hora si quieren llegar a tiempo al aeropuerto.

"Venga ya... ¡Si lo estabas deseando!" se burla Seokjin con una sonrisa, a la vez que recoge una fotografía de su escritorio.

Como siempre, el humor es su escudo contra la tristeza. Seokjin nunca se permite derrumbarse. Es el hermano mayor, y tiene que actuar como tal.

En la fotografía que sostiene aparecen Taehyung, Seokjin y Woobin. El último está situado entre ambos hermanos, y los tres sonríen a la cámara. En aquel entonces, Taehyung apenas tenía nueve años; la misma edad que Seokjin cuando conocieron a Woobin. Están contentos, despreocupados y llenos de energía.

"No vuelvas a decir eso." masculla Taehyung. Lleva desde anoche con un nudo en la garganta que se aprieta más a cada minuto que pasa, impidiéndole tragar saliva.

play pretend [kooktae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora