Capítulo 2

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-Lo lamento Younsung, no debí preguntar demás, fue grosero de mi parte, una disculpa - comentó Sachiko ante la respuesta de la rubia madre de la omega.

-No, no te disculpes - respondió la rubia con una sonrisa - no tiene nada de malo, es solo que... algunas personas suelen...asustarse o hacer mala cara, cuando saben que mi hija es autista - culmino diciendo esto ultimo con un tono un poco triste.

Continuaron charlando durante unos minutos hasta que finalmente las alfas se despidieron de la beta, saliendo de aquella casa para ir a su propia casa.

- Chaeyougie es una niña muy linda, ¿no crees hija? - preguntó la alfa mayor a su hija.

-Sí, es linda - respondió Mina fingiendo desinterés, sin embargo pensaba más que aquellas tres palabras acerca de la tierna omega que acababa de conocer apenas hace unos minutos.

Transcurrió el resto de la tarde, y por más que Mina intentó poner su atención en sus deberes, en arreglar su habitación, e incluso solo en mirar alguna serie, su mente regresaba siempre a la pequeña omega rubia que había visto unas horas atrás.

Como pudo, logró conciliar el sueño hasta la mañana siguiente, donde la rutina de todos los días se repetía, incluso por un momento parecía no estar más pensando en aquella hermosa omega, o al menos así era hasta que salió de su casa, con intenciones de ir a su auto cuando volteó la mirada a la casa que había visitado el día anterior, para encontrarse con aquella mujer beta del día anterior apresurada como pocas veces había visto a alguien.

Parecía que iba a enloquecer con las prisas que llevaba, estaba vestida de manera formal y subía alguna que otra cosa al auto entrando y saliendo de casa.

Mina decidió acercarse a ver si podía ayudar en algo, claro sin ninguna intención de poder volver a ver de cerca a Chaeyoung.

Cuando estuvo lo suficientemente cerca pudo captar la atención de la mujer.

- Señora Youngsun, buen día, disculpe, ¿se encuentra bien? - preguntó a lo que la mujer mayor volteó y la miro, y por un momento se podía ver la locura misma en su mirada - ¿hay algo en que pueda ayudarle?

-Oh Mina, querida buen día - dijo brindándole una fugaz sonrisa sincera aún guardando lo que parecía ser una pequeña mochila escolar con dibujitos de fresitas en el asiento de copiloto del auto - sí yo... solo tengo una entrevista de trabajo en... oh Dios mío - dijo desesperada al ver su reloj, y mirar que ya no le quedaba mucho tiempo- tengo que apurarme en llevar a Chanyoungie a su escuela o no llegaré - dijo alterada y aún más apurada que antes.

-Eh... yo podría llevarla a su escuela, si usted quiere - se ofreció tranquila, sin mostrar emoción alguna aunque por dentro sus nervios eran inmensos.

La mujer al oír aquello pensó por unos momentos.

Claro que de primera instancia hubiera declinado esa oferta como cualquier madre en su situación lo haría. Sin embargo, aquella era una entrevista a la que definitivamente no podía llegar tarde ni faltar, era una oportunidad única, y ella sabía que si llevaba a Chanyoungie a su escuela no habría manera humana de que llegara a tiempo a la entrevista.

Luego de reflexionarlo unos segundos en su cabeza decidió que estaría bien, quitándose ese pendiente de encima podía estar mucho más tranquila con el tiempo, no le sobraba, pero tan siquiera ya no habrian prisas exageradas a la hora de llevar a su pequeña cachorra al colegio.

-Es muy gentil de tu parte Mina, créeme que no abusaría de tu amabilidad si no fuera realmente necesario - dijo la beta riendo sinceramente, y suavemente sacando de su bolso una libreta y un bolígrafo, poniéndolo sobre el capo del auto y comenzando a escribir algunas cosas.

Omega Autista                                                     [MICHAENG]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora