Capítulo 8

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La luz del Sol entraba por entre las persianas de la habitación de su mejor amiga, molestándole la vista a raíz de la nueva posición que adoptó al dormir. Esto provocó que despertara con un dolor de cabeza como estrago por la noche anterior.

Observó su entorno y divisó a su mejor amiga quien seguía durmiendo. Tranquilamente tomó su celular, se le hacía extraño que la alarma no hubiera sonado aún, ¿habrá despertado incluso más temprano? La respuesta es no. Sus ojos se abrieron como platos cuando en la hora de su celular leyó 2:23 p.m. Acompañado de un mensaje que le atormentó todavía más.

-12:15 a.m. Sr. Youngsun:
Hola Mina, querida, oye irás con Chaeyoungie a algún lado? Lleva desde las 8 am sentada en la sala como esperando algo, pero no responde mis preguntas ya sabes cómo es jaja.

Mierda, mierda, mierda. Repetía una y otra vez en su cabeza poniéndose de pie de prisa con los ojos ardiendo y aquel dolor punzante en su cabeza.

Pudo notar cómo emitía un aroma que delataba haber tomado un poco de más la noche anterior, acompañado del olor a cigarrillos impregnado en su cabello y hoodie, no por ella sino por estar cerca de gente que no paraba de fumar.

Corrió a despertar a su amiga, quien con dificultad respondió sin abrir los ojos.

-Levántate, idiota - dijo desesperada - necesito que me lleves a casa ya... por favor-

-¿Qué pasa? ¿Por qué estas tan
alterada? Cálmate - preguntó.

-Debía llevar a Chaeyoungie al parque hace horas, date prisa - dijo moviéndola haciendo que esta se pusiera de pie.

-Está bien voy, voy... - dijo Momo colocándose los tenis y tomando las llaves del auto, bostezando.

Ambas llegaron al auto de la rubia y subieron emprendiendo camino a casa de la pelinegra.

-Creo que deberías ducharte antes de ir con Chaeyoung, apestas a alcohol y cigarros - advirtió riendo ligeramente la rubia.

La pelinegra no respondió, su mente estaba recriminándose una y otra vez por dejar que aquello sucediera. Sabía que tras aquel ofrecimiento de salir juntas, la menor no podría olvidarlo, estaría desde temprano esperándole, tal como siempre tomaba las cosas tan literal.

Apenas la rubia llegó a casa de Mina, esta bajó corriendo despavorida diciendo "gracias" en su correr. Sin siquiera responder a los saludos de su madre y hermano al encontrárselos por la casa, entró en su habitación desnudándose para entrar en la ducha aún cuando el agua no se había calentado aún. Se aseguró de ducharse rápido pero cuidando que cualquier rastro de olor del día anterior no estuviese más. Se secó y se puso lo primero que encontró limpio entre su ropa, unos pantalones de mezclilla, unos sneakers blancos, y una camiseta negra con la que sus músculos lucían de lo mejor.

 Se secó y se puso lo primero que encontró limpio entre su ropa, unos pantalones de mezclilla, unos sneakers blancos, y una camiseta negra con la que sus músculos lucían de lo mejor

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Tomó su cartera, llaves de su auto y de su hogar, su teléfono y salió corriendo a casa de la omega. Al llegar a esta, tocó el timbre y trataba de calmar su respiración y latidos para no delatar su obvio fallo a la cita que ella misma propuso. La madre de la menor le abrió saludándole con su típica sonrisa, y después de intercambiar un par de palabras le permitió entrar, subiendo ella a su habitación. Al parecer ella no estaba al tanto de lo sucedido, en ese momento agradecía lo poco que la omega hablaba con su madre. En cuanto escuchó la puerta del cuarto de la Beta cerrarse, entró en la sala, viéndo a la pequeña omega estática mirando a la nada, a su pequeña ángel, la cual era visible que se había preparado para aquella salida desde temprano.

Omega Autista                                                     [MICHAENG]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora