La alfa se encontraba teniendo uno de los mayores debates de su vida.
Le quedaba claro que la omega no tenía idea de la anatomía humana, ¿siquiera sabía cómo funcionaba su propio cuerpo? Lo dudaba, dudaba que supiera que hacer con cada parte de su cuerpo, podía notar que su madre le hacía tomar supresores casi a diario para evitar cualquier instinto omega.
¿En su escuela no les enseñaban sobre eso? No importaba que fuera una escuela de chicos especiales, es decir, es algo fundamental que los chicos y chicas sepan sobre su sexualidad... Pero de algo estaba segura, si alguien había de explicarle sobre todos esos temas no iba a ser ella.
No le correspondía hacerlo, no conocía mucho sobre el cuerpo de los omega más allá de lo obvio y lo que veía en sus 'revistas especiales'.
-Chae... mejor veamos una película, ¿quieres? - propuso la alfa intentando desviar su atención del tema.
-Está bien - respondió sentándose en la cama con su alfa, acurrucándose en ella.
La mayor la tenía en su regazo viendo la película, pero no podía sacarse de la cabeza el tema, sobre todo porque no había pensado antes sobre aquello. Es decir, a fin de cuentas por supuesto que tarde o temprano querría tener relaciones con la pequeña omega rubia, pero si esta ni siquiera sabe la diferencia entre la anatomía de los alfas y los omegas eso sería imposible.
La alfa al pensar en aquello dirigió su vista hacia la omega en su regazo, comenzando por ver su rostro, tan hermoso y delicado. Pero con sus nuevas inquietudes, bajó su mirada hasta el pecho de la omega y detuvo su vista unos segundos mirando sus pezoncitos atraves de la blusita que portaba, era un día para descansar por lo cual la omega no traía sosten, y luego su mirada descendió a la entrepierna de la omega sobre la pequeña faldita que portaba imaginandose más de la cuenta.
La piel de la rubia era sumamente suave, por lo cual la alfa tenía una gran tentación ahora, pero no quería asustar a la pequeña chica en su regazo.
Tal vez si solo lo intentara...
Comenzó a acariciar el cabello de la pequeña como siempre lo hacía, pero fue bajando sus caricias hasta quedar muy cerca de su pecho. La omega no parecía inmutarse por el hecho. Con el corazón latiendo a mil por hora la pelinegra decidió mover su mano hasta que sus dedos quedaron sobre uno de los pequeños pechos de la omega, logrando sentir su pequeño pezón sobre su ropa. Comenzó a mover sus dedos y apretar con estos suavemente el pezón de la omega, haciendo que esta se removieron un poco incómoda en su regazo repentinamente cubriéndose la parte de su pecho, pero sorpresivamente habiendo emitido un pequeño gemido, y teniendo las mejillas rojas. Volteó a ver a su alfa apenada por el sonido que hizo. Era algo que no había sentido antes y se sentía extraño, su cuerpo sentía oleadas de calor y sus sentidos sensoriales estaban al mil, no entendía esta sensación.
-Lo siento angel, perdóname... no fue mi intención - dijo la alfa sumamente nerviosa esperando que la rubia no se molestase con ella por tocarla inapropiadamente.
-Se sintió muy extraño... mi mami me dijo que ninguna persona podía tocar mis pechitos... pero me gustó, y tú dijiste que mi novia puede hacer todo lo que mi mami dice que no debería hacer nadie, ¿cierto? - preguntó tratando de entender aquel momento donde se topaba con emociones nunca antes sentidas.
-Eh... sí... es cierto amor, nadie puede tocar tus pechos, ni tu entrepierna más que yo, tú alfa, pero solo si tú quieres que lo haga, nunca haría algo que no quisieras - explicó la alfa aún mas nerviosa que antes.
-Está bien, no me molesta que me toques Minari alfa- respondió la omega tranquila a la alfa que la veia fijamente.
-Entonces... ¿está bien si hago esto?
- preguntó suavemente volviendo a acercar su mano al pequeño pecho derecho de la omega , volviendo a apretar con mucha suavidad su pequeño botón, provocando en la pequeña rubia un escalofrio y un leve gemido.Llevó su otra mano al otro pezón de la omega haciendo lo mismo, haciendo que esta comenzara a respirar fuertemente. Era claro para la alfa que la menor estaba por primera vez sintiendo sus instintos omega, los cuales a pesar de su condición parecían estar intactos, pues reaccionaba como cualquier otro omega haría al ser tocado de esa forma.
De pronto un olor inundó las fosas nasales de la alfa, fresas y algodón de azúcar, era el aroma de la omega pero por primera vez lo olía con claridad.
Esto, acompañado de sus pequeños gemidos, su rostro completamente sonrojado y el estar tocando sus pechos hizo que los instintos más primitivos de la alfa despertaran, de un momento a otro, tomo con algo de fuerza a la menor y la dejo debajo suyo, para levantar su blusita y poder ver los pequeños y rosados botones de la omega, quien mantenia sus mejillas sonrojadas al tener a la alfa viendo fijamente y con una mirada extraña sus pechos desnudos.
Esto le pudo todavía más a la alfa, acercando sus labios a besar a la pequeña omega con efusividad. Desde hacía varios minutos que la pelinegra tenía una dolorosa erección en sus pantalones, cada segundo que pasaba su excitación crecía más y más. Una vez se sació de tocar los pechos de la omega y sin pensarlo dos veces bajó su mano y por sobre encima de la falda que traía la omega comenzó a tocar a la rubia, buscando dar con la zona que la hacía omega, moviendo sus largos dedos sobre la ropa, al sentir esa pequeña separación calida de la piel de la omega con facilidad al este llevar esa pequeña faldita de encaje que le permitio introducir su mano debajo y sobar por encima de las braguitas de la omega a su disposición.
-No!!... espera Minari no... no me gusta que me toques ahí... - dijo la omega algo asustada al sentir cómo la alfa intentaba excitar su pequeño orificio con sus dedos de una manera un poco ruda por la excitación que crecía dentro de ella al mirar a su pequeña omega sumisa debajo de ella con su blusita subida mostrandole sus pezones rositas y ahora rojizos erguidos y exitados por la previa digitacion en ellos y con su faldita desordenada que dejaba ver un poco de sus braguitas rosas de encaje.
-Oh yo... lo siento mi angel... no fue mi intención - dijo quitando su mano de aquel lugar y poniéndose de pie a prisa le dijo a su omega - espera amor, sigue viendo la película tú, yo... iré al baño rápido- la omega asintió y volteó a ver la pantalla como si nada hubiera pasado, ya en su mundo de princesas y príncipes.
La alfa salió de la habitación para ir al baño a atender su problema antes de hacer algo de lo que se arrepentiria con la omega.
Luego de lograr su cometido, volvió a su habitación donde se encontró con una rubia omega dormida con la televisión prendida.
Agradeció infinitamente el no haberse dejado llevar más por sus instintos, pues no soportaría lastimar a su pequeña bebé.
Se acercó a su omega, acostándose a su lado rodeando su estrecha cintura, tapándolas a ambas, para despues besar su cabecita y dormir acurrucaditas.
Hola mis amores, ustedes pueden mis amores, cuando este capítulo tenga 75 votos y 50 comentarios actualizaré, espero les haya gustado este capítulo, se que les gusto, esperen pacientes el siguiente capitulo. Los ama (👁👄.👁)
ESTÁS LEYENDO
Omega Autista [MICHAENG]
FantasyMyoui Mina es la alfa estrella de la escuela... Ella es todo un cliché, todo lo que pudieras desear de un alfa... ella lo cumplía. Era co-capitána del equipo de fútbol americano, alta, con músculos marcados, abdomen de ensueño, piel bronceada, escen...