Yo estaba allí cuando vi desde lejos que James conversaba sobre algo con Steve y Sam.
Luego de unos momentos, James y Steve estrecharon sus manos, en acuerdo.
Lo único diferente entre ellos dos era que Steve parecía muy feliz, mientras que James parecía frío como el mármol.
Después de compartir una larga mirada con los otros dos, James asintió, y se separó de ellos, para comenzar a caminar hacia mí.
Yo había estado largo rato abrazándolo antes, y cuando lo pude tener cerca de mí, lo volví a abrazar.
Cuando pude ver sus ojos, me di cuenta de que la frialdad y la indiferencia se habían ido y las había sustituido el dolor y la desesperación.
Mi mejilla descansaba en su pecho. Me aclaré la garganta y pregunté algo que me venía preguntando desde que vi a Rogers y a Wilson en la cafetería.
-¿Qué va a pasar ahora?
-Tengo que volver.- Contestó como respuesta a todo. Su tono de voz, era tajante.
Levanté mi mirada, pude ver que Steve y Sam ya se habían marchado del lugar.
-¿Qué quieres decir?- Mi voz tembló un poco, pero me hice la fuerte y lo quise mirar a los ojos.
El esquivó mi mirada, miró al suelo. Sus mechones de pelo le tapaban ya parte de su cara y ocultaban sus ojos.
-Steve tiene razón, si no me hago esos procedimientos, ¿Quién me garantiza que no te voy a hacer daño?
Cuando terminó de decir eso, yo lo tomé tiernamente de la cara, con mis dos manos.
-Sabes que confío en ti, sé que no me harías daño...- Me detuve.
Dejé de hablar. Steve tenía razón, claro. Era todo por el bien de James.
Obviamente no quería que se fuera. Pero no podía ser tan egoísta.
Mis manos dejaron su cara y cayeron como pesos muertos a mis costados. Mis ojos se llenaron de lágrimas y lo miré a la cara.
-Ve. Ve con Steve.
El me miró a los ojos, queriendo leer mis pensamientos, yo sabía que estaban llenos de lágrimas y dolor.
-Vas a estar bien sin mi...-La agonía hizo que su voz fallara, las lágrimas calientes corrían por mis mejillas sin parar.- Vas a estar mejor sin mí.
Puse una de mis manos en su pecho, y con la otra me tapé la boca para no comenzar a llorar.
-Prométeme que cuando estés bien, volverás por mi.- mi voz entre llantos era un desastre.
El juntó los labios y luego con una sonrisa que no llegó a sus ojos, respondió.
-Te lo prometo.
Su tono y sus ojos, dejaban ver claramente que era una mentira, pero él no me decía que no para no lastimarme más aún.
-Te amo.- Gemí y luego enterré mi cara en su abrigo, llenándolo de lágrimas.
-Yo también... eres la única que pudo conquistar mi corazón, y siempre será tuyo. Mi amiga, mi pareja.
-¿Qué vas a hacer ahora?
Cuando vi que no respondía levanté mi mirada otra vez hacia su cara.
Seguí sus ojos y vi que estaba mirando la llegada de mi abuelo hasta nosotros.
-Te acompañaré hasta tu casa.
Yo solo asentí ante su escueta respuesta.
La voz animada del abuelo llegó hasta nuestros oídos.
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Just call me James
RomanceLucy es una tranquila camarera y universitaria de la ciudad de Toronto, su vida es normal y no cree en los superheroes. Todo eso cambia cuando cierto soldado empieza a ayudar a gente en problemas en la ciudad. El y Lucy se encuentran cuando ella mas...