5. Fugitivo.

203 46 33
                                    


🌸


—¿No piensa venir?

Minseok y Jongdae desviaron sus miradas con incomodidad.

—¿Ya lo llamaron otra vez? —Junmyeon insistió, le molestaba el silencio de los supuestos encargados.

—No contesta —Jongdae repitió.

—Dame su dirección —Junmyeon exigió poniéndose de pie bruscamente.

—¿Qué planeas? 

—Buscarlo, obviamente —Junmyeon aseguró con el ceño fruncido—. No voy a permitir que se dé a la fuga con mi hijo.


🌸


Junmyeon se detuvo fuera del lavado de autos y tomó una profunda respiración. Le había tomado una hora convencer a su amigo de darle la información que necesitaba y solo lo había logrado bajo la promesa de guardar la compostura.

Bajó del auto y caminó dentro del establecimiento, buscando a su objetivo con la mirada. Un joven larguirucho y de piel tostada se acercó con una amable sonrisa.

—El lavado de motor está en oferta —ofreció.

Junmyeon negó y forzó un tono amable.

—Busco a Yixing —declaró y el moreno frunció el ceño, dándole una intensa mirada de pies a cabeza. Cuando terminó su evaluación se giró hacia un auto a su derecha.

—¡Yixing, te buscan! —el empleado gritó.

Los ojos de Junmyeon se redondearon por la sorpresa al ver al gestante de su hijo salir de debajo de un auto.

Los ojos de Yixing también se agrandaron al ver al ricachón en su lugar de trabajo. Demonios. Pensó en escapar, pero el señor Kim, luciendo como un furioso huracán, lo tomó de un brazo y lo ayudó a ponerse de pie.

—¿Trabajas aquí? —preguntó, aunque lo sabía y aunque era evidente; Yixing vestía un overol y botas de goma como el resto de empleados que empezaban a echarles miradas poco disimuladas.

Yixing asintió con el ceño fruncido y lo empujó para deshacer su agarre. Intentó mostrarse serio, aunque el pánico se apoderaba de su voz.

—¿Qué tiene de malo? —Yixing murmuró.

—¿Qué tiene? —Junmyeon preguntó irritado—. Estabas tirado en el suelo hace un momento —señaló con el ceño fruncido y miró un poco alrededor. Todo estaba mojado, las mangueras estaban por todas partes y la organización de los instrumentos era a simple vista un desastre. Como un profesional de la seguridad ocupacional casi sufre un infarto—. Además aquí hay demasiadas cosas peligrosas y en tu estado...

—¿Tiene algún problema con mi empleado?

Junmyeon miró al hombre de voz profunda y mirada intimidante que se acercaba a ellos con paso firme. No llevaba uniforme como el resto.

—¿Usted es el dueño de este lugar? —le preguntó.

El hombre achicó sus grandes ojos en un gesto de desconfianza y asintió.

—Do Kyungsoo —el hombre se presentó—. ¿Tiene algún problema con mi muchacho?

—También con usted —Junmyeon le devolvió la mirada, sin intimidarse ni un poco—. ¿Por qué le permite hacer este tipo de trabajo en su estado? 

MINE [Sulay]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora