—¿Vamos juntos al supermercado? —Junmyeon preguntó mientras Yixing luchaba por atarse el cinturón de seguridad—. Aún no he comprado los ingredientes para la cena.
Yixing alzó su mirada y se encontró con los ojos de Junmyeon mirándolo inquisitivamente. Temeroso de que cualquier palabra o gesto suyo pudiera delatar su fechoría de la mañana, se limitó a asentir.
Junmyeon encendió el auto y llevó su vista al frente.
—¿Te sientes bien? —preguntó luego de un par de minutos. Yixing observó su atractivo perfil y sus manos sobre el volante y asintió—. ¿Estás cansado?
Yixing asintió de nuevo.
—De acuerdo, si no empiezas a hablar voy a llevarte al hospital.
—¿Qué quieres que te diga?
—Nada en especial, pero usualmente eres más conversador.
—Tengo hambre, solo cállate y conduce.
—Eso es más normal —Junmyeon comentó con una sonrisa y encendió la radio.
—¿Y estás seguro de que sabes cómo preparar burritos? —Yixing preguntó luego de unos minutos, cuando sus temores se apaciguaron—. ¿Por qué no los compras ya hechos?
—¿Aún no confías en mis en mis habilidades culinarias? —Junmyeon le dio una breve mirada—. Lo peor que puede pasar es que no sepan tan bien.
—O que acabemos intoxicados.
Junmyeon sonrió, parecía de muy buen humor.
—Un poco de fe, por favor.
—De acuerdo, confiaré en ti, pero recuerda que tu hijo también se alimenta de lo que yo coma, podría ser un asesinato doble.
🌸
—¿Te gusta venir al supermercado? —Junmyeon preguntó al notar que Yixing parecía de muy buen humor mientras empujaba el carrito de las compras.
—Sí, es desestresante, además me gusta el olor del pasillo de detergentes, también el de comida para mascotas.
Junmyeon sonrió. Dejaría de ser Yixing si no decía algo raro.
🌸
—Bien, ya solo necesitamos las bebidas —Junmyeon anunció mientras revisaba la lista en su móvil—. ¿Qué quieres?
—Coca —Yixing dijo con un gesto de obviedad.
—¿Seguro que no quieres algo distinto? ¿O al menos una de dieta?
Yixing frunció el ceño y le dio una mala mirada.
—Jun, toma una gaseosa normal y no me hagas hablar de las dietéticas, es tan indigno. Alguien que esté a dieta no debería tomar gaseosas. Es más, tráeme dos, el bebé también quiere.
—Ese pobre niño debe querer agua —Junmyeon murmuró.
Yixing iba a seguir diciendo estupideces en las que no creía, solo para molestar a Junmyeon, pero la presencia de cierta persona al final del pasillo lo hizo cerrar su boca.
Kris estaba ahí, junto a alguien, tomando algo del estante de las salsas.
—Vámonos de aquí —Yixing murmuró y echó a andar hacia la caja de inmediato.
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MINE [Sulay]
Hayran KurguKim Junmyeon era un hombre exitoso; a sus treinta y cinco años poseía su propia empresa, una casa enorme construida a su gusto, una cochera repleta de autos, una esposa envidiable y, por si todo aquello fuera poco, era muy apuesto, talentoso y caris...