—El amor es algo tan...infantil—dijo el hombre enmascarado mientras observaba por las cámaras de seguridad.
Al otro lado de la pantalla se podía ver a una pareja corriendo tomados de la mano, habían logrado escapar de las aterradoras incubadoras que congelaban sus cuerpos y juntos intentaban huir de ese lugar.
—No hay nada más patético que ver a mis presas intentar escapar de su pesadilla—dijo arrastrando las palabras y lo expresaba con odio—aunque debo admitir que es demasiado divertido ver a esas escorias con esperanza de salir. Supongo que no me servirán para seguir con mis
estudios, les tocará ser devorados por los suyos.Tras decir esto presionó un botón de color rojo que decía (Open), dándole paso a unas criaturas desfiguradas salir de su lugar.
Ese sitio era grande, escalofriante, escapar no era fácil y no sabían dónde estaba la salida; estaban desesperados,
asustados y mucho más cuando sintieron escuchar unos pasos aturdidores a sus espaldas, un escalofrío recorrió sus cuerpos y el temor de mirar atrás aceleraba sus corazones, pero la curiosidad terminó por ganar, al darse vuelta se encontraron con el terrible monstruo que se les había aparecido, quedaron estupefactos pero debían luchar por su vida.Intentaron escapar de aquella bestia rara que los perseguían. Sin embargo en poco tiempo aumentó el número de bestias y escapar era imposible.
—La mente y corazón de los humanos funcionan de manera diferente y aún así tiene que sobrellevar esa extraña relación, mientras una sólo intenta destruir, la otra intenta dar esperanza a qué todo será mejor y diferente. Que entretenido—una sonrisa se plasmó
en sus labios.Los dos chicos estaban agotados, pero nunca se detuvieron, el miedo de ser asesinados por esas cosas aumentaban sus fuerzas, era terrorífico, sólo podían escapar, nunca pensaron en esconderse, estaban seguros de que los encontrarían.
Se hallaban muy heridos y su sangre guiaban a las horribles criaturas.
Minutos después de una persecución interminable quedaron atrapados en una sala, no había salida, la puerta estaba sellada, el chico pateaba la puerta y hacia intentos de abrirla pero todo fue en vano, los nervios subieron al escuchar que se acercaba, casi no había luz pero pudieron ver cómo una figura asquerosa los miraba desde la entrada, era tan grande que su cuerpo no cabía por la puerta, por eso se agachó para poder pasar, era algo completamente anormal, parecía que no tenía piel, sus garras estaban afiladas, sus brazos eran extremadamente largos, sus ojos eran grandes y negros totalmente, su cabeza era más pequeña que su cuerpo y su velocidad era increíble.
Al ver a tal cosa no supieron cómo reaccionar, estaban horrorizados por ese ser, el chico hizo lo posible para poder salvar a su amor, tomó fuerzas para abrir la puerta teniendo éxito agarró a la chica del brazo y le dijo.
—Intenta huir por favor—pidió desesperado el chico—debes vivir—le dio un último beso y luego cerró con fuerza la puerta, quedando atrapado con la criatura.
La chica se paralizó, escuchó los terribles gritos del muchacho, empezó a llorar, y el miedo la abrazó, la oscuridad no le daba fuerza y el frío de la habitación la congelaba, pero tomó valor para hacerle caso a lo que su novio le dijo y empezó a correr, la tortura que pasó horas antes la tenía destrozada y cada vez su cuerpo se debilitaba.
—Las personas son un asco—dijo el hombre enmascarado viendo la escena—se aferran a un sentimiento y a una ilusión, aún sabiendo que todo puede salir mal. Que lamentable—rió.
La chica había encontrado la salida al fin, pero al igual que todas estaba cerrada, sintió mucha frustración. Intentó una y mil maneras y no logró abrirla, sabía que no debía durar
mucho tiempo en un sólo sitio pero ya era muy tarde, pues sintió una mirada tras suyo, no quería voltear, entendía
perfectamente que iba a pasar.
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Endless Nightmare
Mystère / ThrillerSINOPSIS Sufrimiento, dolor, sangre, bestias, experimentos, confusión, ira, torturas, asesinatos, demencia ¿cómo es que todo esto sucede?,¿acaso la felicidad es una simple ilusión que tiene el ser humano?, ¿merecemos ser felices o quizás sólo anhel...