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-Nadie del harem esta en cinta, ni siquiera sus favoritas señor. -anunció Amelia.

Owen Hunt soltó un suspiro mientras pensaba en algo, ya casi un mes iba a cumplir de que Amelia tuviera un aborto y nadie de su harem quedaba en cinta ni mucho menos su actual esposa.

-Necesito un heredero, lo necesito lo más pronto posible, el pueblo está comenzando a hablar y a crear chismes. -dijo levantándose del asiento. -Suficiente tengo con que el imperio de Maya ya no provee alimentos a mis tierras.

-He escuchado que Carina esta en cinta, señor. -comentó la pelinegra. Hunt se burló de lo dicho.

-¿Esa omega en cinta? Amelia querida, no digas tonterías esa es omega inútil e inservible.

-Todos en el imperio estan...

-¡Cállate! ¡Carina es infertil! -gritó un tanto alterado. -Tu misma me dijiste que Carina te lo había confesado ¿no? -la omega paso saliva antes de hablar.

-Yo le mentí... Carina nunca me dijo eso.

-¿Que dices? -cuestionó, pero la omega solo se encogió en su lugar. -¡Habla maldita sea!

-El emperador Bishop me dio varias monedas de oro y joyas a cambio de que yo lo convenciera de divorciarse de ella... el emperador quería que usted la dejara. -confesó al borde de las lágrimas.

Owen Hunt comprendió todo en ese momento, el como ese día del evento no quitaba su vista de su reina, el como la invitó a bailar cuando estaba prohibido hacerlo, también como se casó con ella en tan poco tiempo después de rescatarla y llevársela del reino.

A su mente llegó la estúpida sonrisa de superioridad del emperador cuando le invitó a su boda. Por supuesto que no asistiría, ¿por qué hacerlo si ya tenía lo que quería?

-Esa maldita desgraciada... -murmuró tratando de controlar su enojo.

-Mi rey, perdóneme por lo que hice... lo hice por amor. -la omega se arrodilló frente al alfa. -Haría lo que fuera por usted. -Owen pateó a la omega lejos de él. -¡Eres una estúpida! Hiciste lo que te ordenó esa maldita por unas miserables monedas, eres una traidora. -la omega trataba de aguantar el dolor que sentía, vio como el alfa se acercaba más a ella. Hunt la sujetó del cabello y la arrastró hasta la habitación donde tenía todos los cuadros de Carina cuando era su reina. -¡Por tu culpa Carina se fue con ella! ¡Ella me la quitó! -exclamó.

-No todo fue mi culpa. -habló a duras penas.

-Cambie a la omega más hermosa de este reino por algo tan insignificante como tú, solo porque pensé que era infertil. -soltó una carcajada. -Maldita traidora.

-Deje de echarme la culpa. -intentó hacer que el alfa soltara su cabello. -Usted es un cobarde... -el alfa le dio un golpe en la mejilla.

-Veo que eres muy valiente, haré que me respetes.

👑👑👑

Maya daba pequeños masajes a los pies de la castaña mientras comía su desayuno.

-Tendrás una dama de compañía, cariño. -Carina trago lo que tenía en su boca.

-¿Para que? No necesito una. -la alfa rió levemente.

-Ella será tu asistente personal en los meses de embarazo, necesitas una.

-¿Y quien será? -preguntó.

-Estaba pensando en la hija del duque Hughes, su nombre es Victoria -respondió sin dejar de masajear los pies cansados de la omega.

Carina no conocía a la mayoría de los nobles así que no tenía idea de quiera era la chica.

-No sé quien sea, pero si tu consideras que es la más adecuada esta bien... supongo.

-Cariño, una dama de compañía es muy útil. -la omega asintió levemente.

-Mejor dime que día será tu celo.

-¿Estás ansiosa? -vio como las mejillas de su esposa se pusieron rojas, se le hizo muy tierno así que rió. -Será muy pronto, iremos a una vivienda qué no está muy lejos de aquí para que nadie nos moleste.

-¿Habrá roles de canela?

-Todos lo que quieras. -respondió y Carina aplaudió levemente mientras sonreía.

-¡Eres la mejor esposa! -Maya sonrió en grande al ver como su omega lucia muy feliz, estaba orgullosa de su buen trabajo. Carina había pasado de estar la mayoría del tiempo sin alguna expresión en su rostro a sonreir a cada rato.

-Cariño, creo que la noticia muy pronto llegará a oídos de Owen... ¿Como crees que tome la noticia?

-Se va a desquitar con la persona que este frente suyo, no importa quien sea.

-¿Deberíamos hacer una ceremonia para dar la noticia de que estás en cinta? -cuestionó. Carina se iba a negar pero a su mente llego la imagen de los rostros de las personas que la humillaron por su omega inútil e infertil.

-Invita a la nobleza de reino de Hunt. -Maya sonrió en grande al escucharla.

-Lo que tu ordenes.

👑👑👑

Carina entraba a la oficina con mucha tranquilidad, hoy conocería a su dama de compañía.

-¡Tú! -exclamó Carina al ver a la omega que sería su dama de compañía. -Me dejaste sin roles de canela el otro día.

-A mi también me dejaron sin roles de canela, solo me comí ese. -se defendió la omega.

-Me hubieras compartido, no solo metértelo a la boca sin antes pagarlo. -habló la emperatriz.

-Si no lo hacía me lo iba a ganar usted. -hizo un puchero. Carina de igual manera hizo un pequeño puchero pero luego sonrió.

-Vamos al jardín, la cocinera esta haciendo docenas de roles de canela y me los van a llevar al jardín.

-¡Su majestad es muy amable! -habló la omega.

Ambas omegas salieron de aquella oficina mientras empezaba a platicar de varios tipos de pan.

-Ni siquiera las presente... -murmuró Maya mientras veía la puerta donde habían salido las omegas.

Caminó hasta su ventanal donde perfectamente se veía el jardín y pudo ver como su omega y Vic reían mientras caminaba por el césped.

-Me alegra que se lleven bien.

Dio media vuelta para dirigirse a su oficina, tenían un evento que planear.

La Omega del Emperador Bishop (MARINA). Donde viven las historias. Descúbrelo ahora