Tierra-928
Miguel O'hara
Elina: 15 años
Esto no me agradaba, para nada era de mi gusto, pensé que no pasaría por esto, pero verlo ahora con mi hija, es extrañamente tedioso.
-No creas que porque te di permiso, puedas hacer cualquier cosa Elina- estaba enojado, pero no con mi hija
-Papá, ¿vas a empezar de nuevo? - me giro a verme, después de ajustar su traje
-Él no me agrada lo suficiente, aún no se lo ha ganado-me cruce de brazos.
-Papá, literalmente hace dos semanas dijiste "Es un buen chico" y me diste tu permiso para ir con él -Ella también me estaba desafiando
-Sí, lo dije pero no significa que me agrade, y acepte por error antes de decirme de quien se trataba-seguia firme a mi convicción
-Papá, basta solo nos iremos por un rato, y volveré antes de la cena, ¿con eso ya me puedo ir? - ya estaba con una mano en la manija
-¿No se te olvida algo? - ella reviso su ropa, recordando si llevaba lo necesario.
-Nop- abrió la puerta casi por irse
-¿Y mi beso de despedida chamaca? - me acerque, y la jale, no se iba a ir así.
-Papaaaaá, me están esperando- no la iba a dejar ir sin eso, y ella lo sabía, y a regañadientes aun así lo hizo.
-Golpealo si se sobrepasa- la abrace, besando su cabeza
-Sabes que si- y ella me correspondió- ¡Ya me voy! - se safo de mi abrazo, y salió corriendo con una sonrisa enorme que me contagio por completo.
Pero luego se me borro cuando recordé con quien iba a verse.
Elina tendría una cita con James
-¿Pero qué ven mis pixeles? ¿Miguel O'hara esta celoso? - Lyla no faltó con sus comentarios
-Cállate, tenemos trabajo que hacer- también me cambie de ropa, tenía trabajo que irme también.
Salí aun con la molestia de que mi hija se fuera por unas 5 horas con un chico, ese niño no me caía bien del todo. Cuando llegue a mi centro de comando, no pude evitar, revisar las cámaras, vigilar qué ese niño no se pasará de listo con mi niña.
Efectivamente era una cita, aunque mi hija no lo diga así, le dice "salida de amigos" pero aun así no me convence. Estaban paseando por las ciudad de Brooklyn, del universo del niño. Sabía que eran buenos amigos, pero esto es mucho.
Elina sonreía, y con eso podría tener suficiente, pero si le hace hago lo mataré.
No podía concentrarme, tenía que revisar algunos informes y vigilar qué esos niños no hicieran nada indebido, pero no parecía ser el caso, ese niño se preocupa por mi niña, pero eso no es suficiente, debe ganarse su corazón y mi confianza, y claro, no lo hará con facilidad.
-Miguel, ¿estas escuchando? - Jess me hablo
-Si te oigo - ma tuve mi mirada en el gizmo, qué me mostraba las imágenes de mi hija
-Oye, si vas a seguir espiando a tu hija, será mejor que detengamos esta misión- apague de inmediato mi Gizmo
-No la estaba espiando, estoy vigilando al mocoso- mantuve mi postura
-Ay ajá, Miguel, tranquilo, si yo fuera tú también haría eso con mi bebé- Peter salio a relucir.
-No somos iguales Peter - gruñí en cuanto pensé en eso.
-Ya niños, ¿Quieren concentrarse? - Jess nos llamó la atención.
Ambos acatamos nuestro trabajo, pero aun estaba preocupado, es mi hija, siempre voy a preocuparme por ella, si algo le hace ese niño juro que lo mataré.
•
La misión consistía en hayar 2 anomalías en dos universos diferentes, dos equipos, y me hubiera gustado ir con mi hija, pero ya tenia otros planes. Cuando terminamos, yo estaba agotado, ya no era tan joven como antes, este trabajo te termina acabando de una manera u otra, llegue a casa derrotado, pero estaba en silencio, señal de que mi hija aún no regresaba. Me recosté en el sofá, tratando de recuperar un poco de energía que se me habían agotado, llevando mi cabeza hacia atrás, cerrando mis ojos, dormitando,dejando que el silencio de la casa me llenará.
Cuando menos lo espere oí la puerta principal abriéndose.
-¿Papá? Ya estoy en casa... -no respondí - ¿Hola? Papá ¡AH! -grito, creo que la había asustado- ¡Coño pa'! Creí que no estabas en casa, ¿Por qué no me contestas? -estaba enojada
-Porque estoy débil, y algo cansado- su reacción me dio risa, aún así me enderece
-Mínimo, hazme una señal de humo, en vez de asustarme asi- se sentó junto a mí, y eso era reconfortante.
-¿Qué tal te fue? - mi curiosidad me ganó
-Estuvo bien... -se acomodó junto a mi, pero sabía que había algo más detrás de solo un "estuvo bien"
-¿Hizo algo que no te gusto? - en secreto apreté mi puño
-No, no fue nada de eso-miro un punto fijo de la habitación
-Sabes que puedes decirme lo que sea amor.... -acaricie su cabeza
-Bueno...lo que sucedió fue... - y comenzó a relatarme.
Me dijo, que todo había sido increíble, qué él fue todo un caballero con ella, que la respeto en todo momento, eso calmo un poco mi ansia. También me dijo, que él fue detallista, diciendo que al principio lo noto muy extraño...
-Y minutos antes de regresar él... -Me volteo a ver- ¡Papá, prometo que no te vas a alterar! - su mirada era de que estaba siendo sería.
-Lo prometo - la un poco asustado
-¡Júralo!
-Lo juro- tuvimos una pelea de miradas, ella buscando la mentira, y yo sin saber que chingados pasa.
-Okey... -inhalo y exhalo- ¡Se me confesó y dijo que le gustaba! - dijo a los cuatro vientos, con una cara roja y los párpados apretados
-Voy a matarlo- me levante de inmediato, ese mocoso se iba arrepentir de cortejar a mi bebé.
-¡Papá no, lo prometiste! - me tomo de la cintura tratando de detenerme
-¡Cómo se atreve ese bastado! - a duras penas estaba llegando a la puerta
-¡Es que él también me gusta! - eso que dijo, me dejo petrificado por completo, quedando en silencio- Él también me gusta papá... -su voz salio algo baja
Me gire a verla, ella mantenía su mirada baja, pero no pude evitarlo, era muy pronto, ella todavía le gustaba jugar con su gatito, estar pegada a mi diciéndome "papá" todo el tiempo, comiendo papas fritas y sus dulces de naranja qué siempre le doy, colorear siempre que pueda.
Espera....
Quince años, mi niña ya tenia quince años, ella ahora trabaja como mi mano derecha, ayuda a todos los que puede, sabe defenderse, ¿esta ahora era mi niña?. Es verdad, y debía reconocerlo
-¿Crees qué es el indicado? - mi voz salía algo, ni siquiera sabía como ponerlo en palabras
-Lo creo, pero quiero saber que piensas tú papá - mantuvo su mirada oculta
Me acerque un poco más a ella, acaricie su mejilla, haciendo que me mirara, si, ella seguía siendo mi niña, sonreí sutilmente, tratando de ocultar mi dolor, con tal de verla feliz, no quería entregársela a nadie, pero si ella eso quería, entonces yo...
-Si crees que él te hará feliz, entonces esta bien- bese su frente, como una forma de aceptar su decisión, y ella me miro emocionada, no pudo evitar abalanzarse hacia mi, haciendo que la cargara
-¡Gracias papá! - me abrazo fuerte, y yo aun más
-Pero si te hace llorar lo mataré - y ella solo río.
Mi niña siempre lo sería, y no iba a dejar que ningún mocoso le hiciera llorar.
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Una Linda Anomalía || Miguel O'hara ||
FanficMiguel creía que la felicidad, una vida sencilla... Una familia, no era para él, después de conocer a su variante, inocentemente acepto la oportunidad, qué lo haría perderlo todo. Negando una mínima posibilidad. Eso, hasta que vio aquellos ojos caf...