Mondhotel [Loona| Artms| Loossemble]

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1852

Las puertas se abrieron de golpe, dándole la entrada a una chica con camisa blanca, saco formal negro masculino y una falda del mismo color, al igual que sus botas de cuero. La chica sonrió al ver el lugar y luego caminó hacia la recepción.

Su caminar era juguetón al igual que su sonrisa, antes de llegar a pedir su habitación miró con mucha emoción el lugar. El aire tétrico, podía sentir la maldad y la libertad con solo respirar, no todos los hoteles son cálidos como un ser vivo.

Se apoyó en la recepción y tocó sin parar la campanilla. Entrecerró los ojos al ver a la recepcionista, demasiado femenina e inocente con lo que esperaba ver. Un hombre grande, peludo y mal bañado combinaba más con el sin fin de leyendas del lugar, o hasta un hombre con un traje exageradamente limpio cumplía con los requisitos, no una chica de su edad que parecía no estar a la moda.

–Buenos días ¿Qué tipo de habitación desea? -dijo Heejin, la recepcionista.

-Solo la 602–la sonrisa de Heejin se fue.

–Esa habitación no ha estado disponible desde hace 30 años–

–Lo sé, vengo por esto–sacó de su bolsillo un papel doblado y arrugado, lo aplanó lo más posible y Heejin lo leyó.

Era la letra de Hyunjin, la reconoció en menos de un segundo. Era cuadrada y firme. Era un borrador de un anuncio en busca de un trabajador, uno tan peculiar que hicieron lo más posible para que fuera lo más discreto posible, aunque fallaron tanto que habían botado todas las ideas que tuvieron. Heejin pensó que la única probabilidad de que lo haya encontrado es revisando sus bolsas de basura.

"¿Estás cansado de que no te paguen por matar? ¡Pues tenemos la mejor oportunidad para ti! MondHotel está en busca de alguien que siga sus rituales que contienen algo de sangre. Si estás dispuesto de hacerlo a cambio de una habitación gratis y la mejor comida del mundo ¡No dudes en venir! La habitación 602 estará listo para recibir unos cuantos sacrificios"

–Lo encontré en el suelo–dijo la chica. Heejin cerró los ojos, golpeando en su mente a su eterna compañera de trabajo por ser tan directa en el borrador.

–No buscamos gente así, seguro es una broma de un cliente–la chica la miró confundida e hizo un leve puchero.

–Cumplo con todos los requisitos que seguro piden. O sea, menos de asesinar a alguien, nunca lo he hecho, pero por un techo con gusto lo hago ¿Entiendes mi urgencia? –

–Tienes ropa de muy buena calidad como para necesitar un techo gratis–la chica miró su ropa y soltó un suspiro.

–Tienes razón–al segundo se acercó a Heejin para hablarle–pero de todas formas puedo hacerlo, quiero hacerlo–dijo tocando su mejilla con su dedo. Heejin se alejó, asustada de la sonrisa juguetona de la chica y de su forma de ser.

–Está bien–dijo alejándose para sacar dos llaves 701 y 602–estará a prueba por una semana–sacó el libro de registro–¿Cuál es tu nombre? –

–Jung Jinsoul ¿Cuántos cuerpos? –

–Un hombre al día, no puedes ser vista y solo lo puedes hacer en la habitación 602, cuanto tengas tu primer cuerpo me llamas a mí o a Hyunjin, nadie más sabe de esto–

–Suena emocionante–

–Suerte–

Jinsoul se retiró del lugar, girando ambas llaves mientras subía las escaleras. Miró alrededor, había escuchado un sin fin de veces las leyendas del lugar, una de sus favoritas era que fue construido por una bruja y que los empleados eran fantasmas, pero la mejilla de Heejin era demasiado sólida como para creer en eso.