Capítulo X: Y así acabamos en el avión.

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-No podemos entregárselo así a Wendy. -Kyle fue el primero en poner a su amigo en la silla con ayuda de Eric, pero el chico había bebido demasiado y claramente estaba inconsciente. -Debemos bajarle la cruda.

-Muy bien, escucho soluciones no problemas. -Cartman volteo a ver a Leo que estaba asustado y a Kenny que le valía madres sinceramente.

-Ta... tal vez el aire podría ayudarle. -Sugirió Leo, había muchas veces inconsciente a Kenny por pasarse con la bebida, pero él la verdad jamás había tomado tanto a esos puntos de quedar como sus amigos, por eso no sabía bien que hacer.

-Es una jugada arriesgada, tengo una idea. -Cartman

Cartman pagó lo de todos y después todos subieron al auto de Stan mientras Eric conducía y Butters estaba de copiloto, Kenny y Kyle agarraban el cuerpo de Stan para que este sacará la cabeza y le diera el aire.

Había funcionado a medias, necesitaban algo más fuerte.

- ¿habrá café en algún departamento de esos de 24 horas? -Preguntó Eric, pero Kenny negó.

-Los desaparecieron hace unas semanas por robo. -Contestó el chico, de hecho, estar en la noche vagando por South Park era muy peligroso, muchas pandillas que ni siquiera vivían ahí se paseaban por la noche en esas calles.

-Mierda, necesita un shot de adrenalina para que gaste toda esa energía. -Pensó en voz alta haciendo que Cartman tuviera una idea.

- ¡Muy buena idea! Ya sé a dónde hay que ir. -Y sin más, empezó a conducir extrañando a todos.

En el camino Butters empezó a alterarse al ver que se alejaban del pueblo e iban a una zona más alejada de todo, muchos recuerdos le vinieron a la mente y ninguno era agradable.

-Oh, Cartman. -Decía el hombre viendo al castaño manejar concentrado y moviendo una ceja en señal de que lo escuchaba - ¿A dónde vamos?

-Por el shot de adrenalina de Stan. -Dijo como si nada, alertando a Kyle también.

- ¡OYE IMBÉCIL NI SE TE OCURRA CHOCAR EL AUTO! -Kyle empezó a alterarse, igual vinieron muchos posibles escenarios futuros que no contaban nada bueno para ellos 5.

- ¡Claro que no estúpido judío! -Respondió enojado el chico acelerando.

Después de 5 minutos llegaron a una estación de avionetas, lo que dejó sorprendidos a todos ¿Cómo Cartman sabía de ese lugar? Ni ellos lo sabían.

-Hola, buenas noches o días. -Dijo Eric al bajar del auto siendo seguido con mucha desconfianza por sus ex amigos que venían sosteniendo el cuerpo de Stan inconsciente.

-Si buenas noches, ¿Qué quieren a estas horas de la noche? -El viejito que estaba ahí se veía opero al mismo tiempo estaba siendo cortes con aquellos hombres.

-Necesito que nos de un paseo en su avioneta, le pagaré $20,000 dólares por hora. -A Cartman se le hacía un trato justo y al hombre una maravillosa oferta, ni por sus vuelos a Hong Kong le pagaban tanto y eran más de 1 hora.

- ¡Acepto! Prendo el motor. -Y como si fuera un hombre de 15 años salió corriendo a alistar todo.

Pero sus amigos no estaban del todo de acuerdo.

- ¡Estas loco!, pero claro, tu siempre has estado chiflado. -Kyle reía del nerviosismo y el enojo, ¿Cómo porque se subiría a una avioneta a las 3 de la madrugada con su mejor amigo inconsciente?

-El aire le hará bien al imbécil ese. -Señaló a Stan. -Además de que se le bajará la cruda al tener la adrenalina al máximo, haciendo despertar sus lados conscientes y estarán bien para llevar a nuestras preciosas hijas a la escuela sin los efectos de anoche.

-Vaya viejo, no puedo argumentar nada antes esa lógica. -Kenny ya estaba viendo que debía ponerse para subir al avión, se le hacía emocionante.

-Pero a mi me da miedo las alturas y no tome mucho... ¿puedo esperarlos aquí? -Leo era el más nervioso y con justa razón, las cosas parecían poder ponerse tensas en cualquier momento.

-Claro, si quieres enfrentarte a osos o lobos que rondan por aquí y les llamará la atención el sonido del motor. -Le dijo el anciano poniendo más nervioso a Leo al grado de que empezaba a temblar.

Y Kenneth, como el estúpido que es, no dejó pasar la ocasión y en lo que Leo revisaba que del bosque no saliera nada lo agarra por atrás, asustándolo.

- ¡AAAAAAAHHHHHH! -El grito de Leo fácilmente pudo despertar a toda una manada de lobos a 10 kilómetros a la redonda, de hecho, fue lo suficientemente fuerte para despertar a Stan que solo asomo la cabeza sin saber dónde estaba.

Leo no lo pensó dos veces y se lanzo directo al auto, pero no vio el letrero que había enfrente de él y terminó chocando con esta, quedando inconsciente mientras su esposo se ahogaba en la risa, como le gustaba molestar a su esposo de esa forma.

-Eres un tremendo imbécil Kenny. -Kyle lo regaño dejando a su amigo tirado en el suelo pues estaba despierto, pero no podía pararse solo para ir a ayudar a Butters. – Lo desmayaste.

-Bien, pues nos acompañará al viaje.

- ¿Qué viaje? -Stan apenas podía hilar que ya no estaban en el club. - ¿Dónde estamos?

-Tú solo súbete idiota. -Eric lo ayudo a pararse y lo subió juntó con él, mientras Kenny hacía segunda; y Kyle junto con Leo eran los últimos en subirse.

-Espero que disfruten el viaje. -El hombre se había cobrado de la tarjeta, por lo que estaba muy feliz.

El avión arrancó y justo cuando estaban arriba intentando disfrutar la vista el hombre amenazó.

-Por cierto, para bajar... hay que aventarse de esos paracaídas, tengo que ir a Hong Kong y voy mal de tiempo...





Prometo ya actualizarlo seguido, lo prometo :( 

Un loco para papáDonde viven las historias. Descúbrelo ahora