Capítulo 19

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Lan Qiren había dejado el salón hace algunos minutos mencionando que debía dar una clase en otra parte de la secta. Jiang Cheng se sintió un poco más relajado una vez que se fue. En realidad no temía al anciano tío de Lan XiChen, él sólo se sentía un poco tenso debido a la impresión que daría a las demás sectas su decisión respecto a su heredero. Quería anticiparse a la reacción del resto de cultivadores a través de la opinión del Gran Maestro Lan. No toleraría que trataran mal a A-Yang bajo ninguna circunstancia, por lo que debía asegurarse de que el niño fuera tratado con el respeto que merece el heredero de una secta sin hacerlo menos por no llevar su sangre.

— En tus cartas pude notar el gran avance de A-Yang estos días. Agradezco que me mantengas informado. — mencionó Lan XiChen sacándolo de su burbuja de pensamientos.

Se estaba acostumbrando a que el Jade no permitiera dar una conclusión a lo que pasaba por su cabeza. En definitiva no podía permitir que eso se volviera un hábito. ¿Cómo podía este hombre en tan solo unos días arraigar algo en su comportamiento?

Con un bufido mal disimulado respondió— Pensé que había dicho que no debías agradecer por ello. Además, la práctica de escritura mejora las habilidades de A-Yang.

Lan XiChen imaginó por unos instantes al pequeño niño siendo ayudado por Jiang WanYin a escribir los fragmentos de lo que sería una carta para él. Saber que el líder de la secta Jiang se había tomado el tiempo de acompañar al menor en la escritura de aquella carta hizo que un sentimiento dulce se instalara en su cuerpo, le hizo recordar al sabor de los pasteles de loto que empezaba a degustar con frecuencia. No pudo hacer más que sonreír hacia la persona que tenía enfrente.

— Entiendo, pero aún así debo agradecer, al menos por los dulces que llegan a mí entre tus cartas. Son muy agradables a la hora de acompañar el té, pensé que tendría que esperar mi siguiente viaje a Yunmeng para probarlos.

— Eso era parte de nuestro acuerdo, yo enviaba los pasteles de semillas de loto y tú enviabas las hierbas del té con propiedades relajantes. — de hecho ese té lo relajaba mucho. Y a A-Yang le provocaba algo de sueño.

— Espero que puedan quedarse en la secta para descansar de su largo viaje, en vista de que viajaste hasta aquí para entregar una invitación. Gusu Lan se siente halagada por ser el primer destino del líder de secta Jiang y su heredero fuera de Yunmeng, espera que su hospitalidad sea aceptada.

A Jiang Cheng le dieron ganas de rodar los ojos, lo hizo.

— Por supuesto que Yunmeng Jiang no se atrevería a rechazar la hospitalidad ofrecida por Gusu Lan y su líder. — agregó con una entonación irónica.

— Esta vez quería hacerte una petición, no como Zewu-Jun sino como Lan XiChen.

Jiang Cheng enarcó una ceja en señal de interrogación. Al parecer ahora iban a dejar los títulos totalmente a un lado, a pesar de que ya lo habían hecho de forma implícita.

— Te escucho, XiChen. — recordó su momento de vergüenza al pedir ayuda para contener a A-Yang luego de contarle la verdad sobre sus padres. Algo en ese recuerdo hizo que se removiera un poco, incómodo. ¿Un favor por otro favor? No esperaba eso del Primer Jade.

— Quería saber si podrías acompañarme a una cacería esta noche.

Notó que Lan XiChen miraba hacia la taza en sus manos al hablar, sus pestañas contrastaban con la blanca piel de su rostro y en sus mejillas había cierto tono rosa que bajaba en dirección a su cuello. Se quedó unos segundos admirando a la persona que tenía enfrente, la imagen del Jade avergonzado era algo que grabaría en su memoria. La petición le llamaba la atención. ¿Por qué él?

El nuevo discípulo de Muelle de LotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora