♥ Una Extraña Manera de Amar ♥

Cap 13 ♥ -Pasión-

Dojo, tendo:

Todos se yacían en la mesa comiendo los deliciosos alimentos, Akane quien llevaba a su hijo en brazos le estaba dándo pecho, Nabiki y Soun comían relajadamente observando la acostumbrada pelea que hacían cada día Ranma y su padre.

-¡Eres un aprovechado! Tú tienes tu propia comida, ¡aleja esos palillos!- grito Genma hacia su hijo, pegándole una palmada en las manos de Ranma, haciendo que a este se le cayeran los palillos.

-¡Idiota!- le devolvió el grito Ranma, cogiendo de nuevos sus palillos y quitándole un pescado a Genma.

-¡Ya me hartaste, niño maleducado! ¡Ya te casaste y tienes un hijo y aun eres un inmaduro! Yo hize lo posible para criarte bien, pero eres un caso perdido- exclamo Genma fingiendo llorar.

-Pues tus esfuerzos para lograrlo no creo que fueron muy buenos, ¿Cuál padre mete a su hijo envuelto de pescados, en un hoyo lleno de esas fieras salvajes?- preguntó Ranma, sintiendo un escalofrió al recordar ese día, aun recordaba todos los maullidos de esas malditas fieras, y su voz pidiéndole ayuda a su padre.

-Lo hice para que aprendieras esa gran técnica, todo lo he hecho para que seas un gran peleador día a día, pero mira tú como me pagas ¡Eres un malagrasido!- gritó Genma sollozando, mirando a su hijo con supuestas "lagrimas"

-¡Tu tuviste toda la culpa, por ser un despistado y no leer el papel por las dos partes! Eres un cabeza hueca, siempre te metes en problemas y a mí me toca solucionártelos siempre, me comprometiste con chicas que yo no conocía, solamente para ganarte un poco de comida o dinero, ¡me cambiaste por un tazón de curry y pescado! ¡Por eso no mereces ni comer!- Le grito Ranma mirando hacia otro lugar, recordar todos esos momentos era muy duro para él, recordar todos los momentos en los que su padre lo cambio solo para su beneficio, la única persona que estaba a cargo de él, y a pesar de eso siempre lo ha amado, sus ojos estaban aguados, parecía un mar a punto de convertirse en olas viajando por sus mejillas, no quería que nadie lo viera así de frágil y de débil, así que simplemente miro hacia otro lugar mientras su mar de lágrimas se secaban.

-Hijo, lo sé que cometí un error al cambiarte por comida, pero no quería morirme de hambre porque si lo hacía ¿Quién iba a cuidar de ti? Luego te recupere para irnos de ahí, aguantando un poco más lo que nos esperaba, por mi culpa conociste a la mujer que amas y ahora es tu esposa, además de tener un hijo con ella- exclamo Genma comiendo su comida lentamente, aun recordaba todos esos momentos en los que hacía pasar mal a su hijo, pero son errores que cualquier humano comete, después de todo él era un simple humano cualquiera, pero lo que si era segurísimo para él era que nunca iba a abandonar a su hijo, ni por la comida más deliciosa, ni por un millón de yenes, él era su tesoro más preciado aunque no lo demostrara.

-Lo sé, y te agradezco que me hayas comprometido con Akane, es lo único que has hecho bueno para mí, pero eres un idiota ¿Cómo pones a tu hijo a subir una maldita montaña con una gran piedra en su espalda cuando solo tenía pocos años de vida? enserio de pasas con esos entrenamientos ¡Al agua pez!- grito Ranma para luego agarrar a su padre de su camisa y tirarlo al estanque, luego se paro para poder mirar mejor a su gran oso-padre salir del estanque, sonrió de lado, por más estúpido o ridículo que fuera, era su padre y agradecía por tenerlo, aunque lo haya sometido a duros entrenamientos , él sabía que todo lo hacía para convertirlo en el mejor maestro de artes marciales, lo obligo a subir a una montaña con una piedra para hacer que siempre se mantuviera recto en una pelea, y miles de entrenamientos estúpidos pero que dan sus frutos.

-"Como te atreves"- Saca un cartel el gran panda, para luego dirigirse a su hijo que estaba riendo hasta tal punto de parecer que se iba a ahogar, lo agarro de la camisa y estaba a punto de tirarlo al estanque.