En tus ojos.

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En la atmósfera mágica de Hogwarts, una sombra de intriga se cernía sobre los terrenos del castillo. Con el anuncio de la próxima competencia de los Tres Magos, la emoción y la tensión estaban en el aire, y nadie estaba más sorprendido que Harry Potter cuando su nombre fue misteriosamente seleccionado para competir, a pesar de no haberlo ingresado.

Entre el bullicio y las especulaciones que inundaban el castillo, Harry se encontró cada vez más frustrado por las sospechas que rodeaban su participación en el torneo. A pesar de su negativa y la falta de interés en la competencia, muchos seguían creyendo que había manipulado el sorteo para garantizarse un lugar en el desafío.

En medio de este torbellino de emociones, una inesperada interacción con Draco Malfoy sacudió el mundo de Harry. Durante una clase de pociones, se encontraron emparejados por el profesor Snape, una combinación que ninguno de los dos encontró especialmente deseable.

A medida que el tiempo pasaba en la clase, Harry se dio cuenta de que las miradas persistentes de Malfoy lo ponían nervioso de una manera inexplicable. Y aunque las tensiones entre ellos siempre habían sido altas, algo en la actitud de Malfoy parecía diferente esta vez.

Un día, al final de la clase, Harry y Malfoy fueron los últimos en salir. Mientras avanzaban por los pasillos, una torpe colisión los llevó a ambos al suelo, sus cuerpos casi unidos en el impacto. En ese instante de proximidad, Harry se encontró mirando directamente a los ojos grises de Malfoy, una sensación de anticipación y confusión zumbando en el aire entre ellos.

Entonces, sin previo aviso, Malfoy se inclinó y sus labios se encontraron con los de Harry en un beso inesperado pero apasionado. Harry se quedó atónito, su mente dando vueltas mientras trataba de procesar lo que estaba sucediendo. ¿Draco Malfoy, su eterno rival, lo estaba besando?

Aunque inicialmente sorprendido, Harry se dejó llevar por el momento, dejando que la intensidad del beso lo consumiera. Durante un instante fugaz, todas las tensiones y rivalidades entre ellos desaparecieron, dejando solo la electricidad de la conexión entre ellos dos.

Cuando el beso llegó a su fin, Harry se quedó sin aliento, su mente girando mientras intentaba comprender lo que acababa de suceder. Miró a Malfoy, encontrando una sonrisa traviesa en sus labios mientras los ojos grises lo miraban con una chispa de diversión.

Para Harry, este beso marcó el comienzo de una nueva y desconocida etapa en su relación con Malfoy. Aunque no sabía qué significaría esto para su futuro, estaba emocionado por descubrirlo. En ese momento, Harry se dio cuenta de que, a veces, las sorpresas más inesperadas pueden llevarnos a lugares inesperados, y tal vez, solo tal vez, este beso era el comienzo de algo extraordinario entre él y Draco Malfoy

Draco agarró la mano de Harry con determinación, atrayéndolo hacia un aula vacía mientras continuaban besándose apasionadamente. Harry se dejó llevar por el momento, sintiendo la intensidad del contacto con Draco mientras sus manos se aferraban con firmeza al cuello del otro.

Sin embargo, la falta de aire los obligó a separarse momentáneamente, y Harry aprovechó ese momento para recuperar el aliento y hacer una pregunta que lo atormentaba.- ¿Q-qué estamos h-haciendo, Malfoy?.

Draco lo miró con una mezcla de intensidad y deseo en sus ojos grises, y respondió con una seguridad sorprendente.- No lo sé, Potter, pero no pienso parar.

Con un susurro apenas audible, Harry asintió, dejándose llevar por la corriente de emociones que lo embargaba. Se permitió disfrutar del contacto con Draco, incluso cuando el agarre firme pero suave de este último dejó marcas rojas en su cuello.

En la mente de Draco, las emociones también bullían en un torbellino de confusión y deseo. Observaba a Harry con una intensidad ardiente, asombrado por la respuesta positiva del chico que había sido su rival durante tanto tiempo.

Tienes que decidirte ‖ Drarry ‖ CompletaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora