Regreso a Hogwarts.

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Harry, al notar la acumulación de platos sucios, decidió llamar a Ginny para obtener ayuda. Con un tono juguetón, la llamó:

- ¡Ginevra!, ayúdame con los platos sucios.

Ginny aceptó la solicitud y se unió a Harry para ponerse manos a la obra en la tarea. Juntos, lavaron y secaron los platos, compartiendo risas y charlas mientras trabajaban. Una vez que terminaron, Ginny dejó a Harry y Draco solos en la cocina, permitiéndoles continuar con su tiempo a solas.

En la tranquila cocina de la Madriguera, Harry estaba concentrado cortando vegetales para la comida. Draco, que estaba preparando un jugo de fresa, dejó momentáneamente su tarea para observar a Harry. Sin previo aviso, Draco se acercó por detrás y puso sus manos en la cintura de Harry, abrazándolo.

Draco hundió su cabeza en el hombro de Harry, disfrutando de la cercanía. Harry, sintiendo la presencia reconfortante de Draco, sonrió y se giró suavemente para encontrarse con los ojos de Draco. En ese momento, aprovechando la intimidad del momento, Harry le dio un dulce beso a Draco, compartiendo un gesto de cariño en medio de la rutina de cocinar.

La cocina se llenó de la calidez de su conexión, y continuaron trabajando juntos, disfrutando de esos pequeños momentos que fortalecían su vínculo especial.

Tiempo después, Hermione se aproximó a la cocina, detectando la actividad y el bullicio proveniente de allí. Observó a Harry y Draco trabajando juntos en la preparación de la comida.

- ¿Necesitan ayuda con algo?.- Preguntó Hermione, ofreciendo su colaboración.

Harry, agradecido, le sonrió y le indicó algunos ingredientes que podrían necesitar.

- ¡Claro, Hermione! ¿Puedes picar esos tomates? Draco y yo nos encargaremos del resto.

Con la contribución de Hermione, la cocina se llenó aún más de actividad y colaboración. Juntos, continuaron preparando la comida, compartiendo risas y charlas amenas mientras cada uno desempeñaba su papel en la tarea culinaria. La Madriguera seguía siendo el escenario de momentos entrañables entre amigos.

Draco, aprovechando la presencia de Hermione, decidió molestarla con una sonrisa juguetona. "Entonces, ¿te atrae Pansy, no es así, Hermione?" insinuó.

Hermione, tratando de mantener la calma y sin dejarse intimidar, negó con la cabeza. "No, Draco, no sé de qué estás hablando. Solo estamos aquí para ayudar con la cena", respondió Hermione, intentando desviar la atención de la broma de Draco.

Draco soltó una risa traviesa. "Está bien, está bien. No tienes que ocultarlo. Todos notamos la química", bromeó, provocando risas entre los presentes.

La atmósfera en la cocina se mantuvo ligera y divertida, con Draco disfrutando de su papel de bromista mientras todos continuaban trabajando en la preparación de la comida.

Ginny, al notar la actividad en la cocina, decidió unirse y ofrecer su ayuda. Se aproximó con una sonrisa y preguntó: ¿Necesitan una mano por aquí?

Harry, agradecido por la oferta, asintió.

¡Claro, Ginny! ¿Podrías ocuparte de la ensalada? Estamos a punto de terminar.

Ginny se puso manos a la obra con la ensalada, uniéndose al equipo en la preparación de la comida. La cocina estaba llena de risas y charlas animadas mientras cada uno contribuía de manera activa. Con Hermione, Draco y Ginny presentes, el grupo colaboró armoniosamente, convirtiendo la tarea en un momento agradable y compartido entre amigos y familia en la Madriguera.

Los chicos, divirtiéndose con la dinámica de bromas, decidieron molestar a Ginny respecto a Luna. Mientras Ginny negaba que le gustaba Luna, Harry no pudo contener la risa, recordando la ocasión anterior en la que Ginny le había confesado que sí tenía cierto interés en Luna.

Tienes que decidirte ‖ Drarry ‖ CompletaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora