Como ya la habían avisado, estuvieron 6 horas de reloj preparándola para la boda que esperaba que no se celebrara.
-Ya solo te queda el maquillaje. -Sonrió Lia.
A Aida la caía bien, había llegado a palacio cuando apenas contaba con 3 años y la habían permitido asistir a clase con ella y con Aroa hasta los 11. La había llegado a considerar como una hermana mayor pero las cosas habían cambiado mucho y aquella chica rubia de ojos miel de 22 años, ya no era la de 11 con la que jugaba al escondite.
-Déjame a mí. Vosotras idos a realizar otras tareas, seguro que hay mucho por organizar aún.
Lia miró a Aida y esta asintió .
-Tiene razón, lo mejor es que os dividáis o no os dará tiempo a todo y el rey no tolerará ningún error, no quiero que os maltrate más de lo que ya hace. Vosotras dos podéis quedaros. -Señaló a Carla y Claudia. -Las demás, repartíos en las otras tareas como bien gustéis.
-Está bien, mi reina. Así lo haremos.Todas las criadas realizaron una reverencia antes de salir por la puerta. Lia fue la última.
-Tomad. Sabéis que tenemos órdenes de encerrarla hasta que vaya a comenzar la ceremonia. -Dejó la llave en la palma de la mano de Carla. -Lo lamento, majestad.
Se fue con un gesto triste.
En cuanto la puerta se cerró, Aida se abalanzó sobre Carla y Claudia y comenzó a llorar.
Lucía salió del armario y se unió.-Pero Aidi, no llores más.
-Lo siento. -Sollozó. -No deberíais estar aquí. Os he arrastrado y si Alejandro os pilla estaréis tan jodidas como yo o peor aún. Ese hombre es capaz de cualquier cosa con tal de lograr su objetivo.
-No repitas eso más, tía. -Claudia dejó un beso en su cabeza. -Estamos aquí porque hemos querido y vamos a ayudarte. Carla, busca el color dorado. Hay que maquillarla de verdad.Lucía se sentó junto a Aida y la tomó de la mano.
Así estuvieron durante 1 hora y media mientras Claudia y Carla la maquillaban.-Ni se te ocurra llorar ahora. -La advirtió Carla. -Si se te corre el maquillaje...
-Ya no tengo lágrimas que derramar. Estoy completamente seca.
-¿Estás segura? -El tono sugerente que utilizó Lucía hizo intercambiar una mirada a Carla y Claudia.
-¿Estáis juntas? -Preguntó Claudia con los ojos abiertos como platos. Aida y Lucía se pusieron coloradas. -¡¿Estáis juntas?!
-Shhhhhhhhhhh. -Lucía tapó la boca de Claudia y Aida la de Carla. -No pueden escucharnos. Y no, aún no estamos juntas.
-¿Aún? -Aida la miró con una sonrisa tonta en los labios.
-Pues claro, alteza. No seré ningún príncipe pero creo que he demostrado merecerme más ese título que él cabronazo que quiere convertirse en tu marido.
-¿Creo? Es más que obvio.
-Bueno, chicas. Aún faltan 2 horas para que comience la boda. Carla y yo vamos a salir y a fingir que somos dos sirvientas más.Aida y Lucía asintieron.
-Os encerraremos y vendremos a la hora acordada. Todo irá normal hasta el "sí, quiero" tuyo, Aida. El rey dirá que se interpone y mientras Alejandro está distraído, te apartarás disimuladamente y te esconderás por donde buenamente puedas. Lo demás es cosa nuestra.
-Pero...
-Aida. -Lucía la tomó de las manos. -Déjanos ayudarte.Aida se perdió en aquellos ojos verdes. Asintió sin darse cuenta de que lo hacía.
***
Cuando Carla y Claudia se fueron, Aida se tumbó en la cama y Lucía se tendió a su lado.
-¿Qué te pasa? -La preguntó Lucía. -¿Por qué tienes esa expresión en la cara?
-Yo... tengo una sensación rara, Lu. Es como sí... Vas a creer que es una tontería.
-Prueba a ver.
-Siento que algo va a salir mal esta noche, tengo un pálpito.
-Es normal, mi amor. Estás nerviosa.
-No, no es esa la sensación de la que te estoy hablando.
-¿Por qué no intentas dormir un poco?
-No me estás escuchando...
-Alteza, necesitas descansar.Aida se cruzó de brazos y la dio la espalda.
-Aida... Aidi...
No la hizo caso. Entonces comenzó a darle besos en la nunca para seguir por su espalda.
La desabrochó el vestido y siguió bajando hasta llegar a la espalda baja.
Aida tenía la respiración entrecortada.-¿Así me perdonas? -La hizo girarse hacia ella. -Dime.
-No lo sé. A ver.Lucía sonrió y la bajó el vestido dejándola los pechos al aire.
Inclinó la cabeza y capturó un pezón entre sus labios.
El gemido que soltó Aida la hizo excitarse muchísimo.-¿Así, alteza?
-Mmmmmm...
-No te oigo.
-Sí.Lucía sonrió y le dio atención al otro pezón.
Se separó y la besó.
El beso fue largo e intenso y estuvieron en una lucha por el control hasta que el aire se hizo necesario.-Creo que he arruinado el trabajo de tus sirvientas. -Aida se sonrojó. -Pero así estás mucho más bonita. Si por mi fuera te dejaba completamente al natural. Sin ropa ni maquillaje, con el pelo revuelto. Y sobre todo, debajo de mí con la espalda arqueada.
-¡Lucía Summers! No digas eso...
-Eres demasiado sexy.
-¿Y me lo dices tú precisamente?
-Pues sí. Tú no te estás viendo ahora mismo.
-Ni tú a ti.Se sonrieron.
-Un momento, Lu. ¿Qué hora es? Tengo que arreglarme todo este desastre antes de que vengan a buscarme.
-Seguro que nos da tiempo a seguir un poquito más.Lucía se inclinó hacia ella pero antes de que sus labios tomaran los de Aida, esta se separó.
-¡Oye!
-Mira la hora, por favor. Si Alejandro nota algo estamos jodidas.
-Es cierto, alteza. Lo lamento. Es que me vuelves loca.Aida se rio.
-Eres una payasa.
-Menuda boca tienes, alteza.
-Pues bien que te gusta.
-Y tanto. -Lucía miró la hora. -Pues tenías razón, más vale que te prepares en seguida. Faltan solamente 30 minutos para la boda.Aida corrió al tocador y se arregló el pelo y el maquillaje con la ayuda de Lucía. También se recolocó el vestido.
Se miró al espejo.-¿Estoy bien?
-¿Bien? Aida, estás preciosa. -La abrazó. -Ojalá verte así algún día para mí.
-Lo harás, Lu.Intercambiaron un beso y se miraron como lo que eran, dos tontas enamoradas que ni siquiera se habían dado cuenta de cuando habían empezado a sentirse así la una por la otra. Pero el sonido de la llave al introducirse en la cerradura de la puerta, las hizo separarse y a Lucía correr al armario.
Y aunque pensaban que se trataba de Carla y Claudia, menos mal que lo había hecho. Porque mirándola desde el marco de la puerta, no estaban ninguna de sus amigas.
-Majestad, es la hora.
¡Aquí os dejo un nuevo capítulo!
Ya están surgiendo más cositas entre nuestras protas. Yo también estaba deseándolo.
ESTÁS LEYENDO
La reina de Nordlichter
FanfictionAida Brooke es la hereda al trono de Nordlichter pero ella no quiere ser reina. Cuando se da cuenta de los planes del que sus padres han decidido que sea su futuro marido, huye encontrándose con una castaña de ojos verdes en la que decide confiar pa...