Asher la observó. Sin duda, le gustaban las locas.
—¿Me estás diciendo que tú le facilitarte la droga?
—No. Te dije que yo, simplemente dónde dinero a una causa.
—Es lo mismo Emerson— Asher no sabía en donde se había metido precisamente.
—No. Yo solo encontré al tipo que estuvo a mí cargo cuando era adolescente. Le di algo dinero ya que lo vi mal y lo llevé a dónde me pidió— Emerson recordó el alivio que sintió, cuando leyó que había muerto. Ella si sabía lo que haría con el dinero, ella sabía muy bien lo que compraría—. Es fácilmente, una ayuda al necesitado.
—Me acabas de confesar que fácilitaste una muerte por sobredosis. ¿Sabes que si cambias algunas palabras, estarías confesando un homicidio?
—Suerte que no lo hice— ella le sonrió—. Si uno le da un arma aún chimpancé, y el chimpancé mata a alguien. ¿Sería culpa del chimpancé?
Yo creo que no.—En está hipótesis— Asher se volteó a ella—. ¿Tú eres la que se le da el arma al mono o tú eres el mono?
—Yo, lógicamente sería el mono. A mí me dieron dinero luego de trabajar como puta— él la reprendió con la mirada—. Déjamelo pasar, si. Bueno, en fin. Lo único que hice fue ayudar a alguien. En este caso fue matar a alguien cooperando con su adicción. Adicción que no sabía que mantenía, aunque debí imaginarlo— ella se encogió de hombros.
Asher sonrió. ¿Que más podría hacer?
Él no era quien para juzgar.—¿Te quedarás un par de horas con Evelyn?— ella asintió.
—Si. Quiere que la ayude con la chica de la virginidad en las Vegas. ¿Irás con nosotras el viernes?— Asher asintió.
—¿Casinos, tragos y tú con un minúsculo vestido?— soltó una risa ronca—. Claro. No me lo perdería.
Además, lo que pasa en las Vegas, queda en las Vegas— le guiñó un ojo.Emerson sonrió, la dejó en la entrada de la agencia y siguió su casa camino. Marcó el teléfono.
—¿Que quieres?— preguntó cuando respondió.
—No creo que sea buena idea tratar así a tu yerno— Kevin bufó en respuesta—. Suegrito.
—Tu y mí hija no se van a casar, antes le suelto toda la verdad y le digo que tú lo sabías desde un principio. Y no me llames de nuevo suegrito- advirtió él—. Se que es mentira, Evelyn me avisó del teatro de Stella. Y conociendo su historial médico, quiero a mí hija lejos tuyo.
—Lo lamento por ti. Pero ella y yo si nos comprometeremos. Debo hablar contigo. Y urgente, respecto a la herencia de Emerson y los Thomas.
—¿Que sucedió?— Kevin estuvo más dispuesto a hablar.
—Es largo de contar.
—Te espero en mí casa— Asher pidió al chófer cambiar de dirección.
Mientras revisaba los correos, le llegó un mensaje.
Número desconocido: Se que estás en la ciudad. Se que estás con ella y que te vas a comprometer. No pasará. No mientras yo viva.
El mismo tipo se mensajes que había Is recibido Emerson antes de que se fueran del país. El detective tendría más trabajo con él de lo que creía.
Decidió responderle:Asher: Si tanto te importa podrías dar la cara ¿No crees? Déjate de tonterías bonita, no me acuerdo de tí pero podrías mostrar la cara y no meterte con ella.
Número desconocido: Estás jugando con fuego amor mío.
Y me ofendería que no recuerdes mi rostro pero te lo dejare pasar porque terminaremos juntos.Terminaremos juntos vivos o muertos, penso la mujer. Viendo la pantalla y siguiendo el auto en el que iba asher dos coches más a tras. Él era suyo. Y ella era de él, ambos se pertenecían.
Asher bajo del coche, el número desconocido no le había vuelto a hablar y él no tenía ganas de jugar a las escondidas.
Kevin salió a recibirlo, era buena idea pincharlo.—¿Me debo sentir alagado por qué mi futuro suegro me espere en la puerta de su casa? ¿Puedo llamarte papi ?— Kevin entrecerró los ojos.
—Ni mi propia hija me llama así no serás tú el que me diga así— se hizo a un lado—. Entra payaso... Para ser tan buen abogado eres ridículo— Asher blanqueo los ojos.
—Aceptalo, me voy a casar con ella— Kevin torció la boca y pensó en asher decapitado.
—¿Cuánto durará la farsa? ¿Hasta que Stella sea internada en un centro de salud mental?— Kevin entró en la casa y pasó delante de él, lo siguió hasta el despacho—. ¿Oh hasta que te aburras? Los dos sabemos que si no te duran las relaciones es por Stella o por qué te aburres. Y mi hija no será tu juguete— Kevin sonrió desafiante—. Oh bien podría ser que termines siendo tú, el juguete de mi hija.
—Eso está por verse. Pero anoche, Emerson salió hecha una furia gracias a las dos eminencias de hijos que tienes...¿Que le dijeron?— observó el estudio, había fotos con Evelyn, otra con la que debería ser la madre de Kevin. Otra en un estante con sus hijos. Y había una, una que le llamó la atención. Un marco con tres fotografías.
Emerson sonriendo y sola, otra con Kevin y Emerson, ambos sonriendo y abrazados, y una en donde estaba Evelyn en un costado, Emerson en Medio y Kevin en el otro costado.
—Algun día estarán sus hermanos— habló Kevin, señalando la fotografía—. Pero por el momento me basta con que se lleven bien y por favor, deja eso en su lugar. No me gusta que toquen mis cosas— Asher dejo la fotografía en su lugar bajo la mirada aguileña de kevin—. Lo que me lleva a decirte Asher, que Emerson es mía. No la toques.
Asher no contuvo la sonrisa, él había hecho más que tocarla. Le había besado hasta el alma y había estado entre sus piernas con su boca y su...
—Borra esa sonrisa de la cara antes de que lo haga yo— Asher levantó las manos en señal de paz—. Dime lo que tienes que decirme.
—Primero: Tus hijos son un par de inútiles, tú no conoces aún a Emerson enojada Kevin. Y no es algo muy lindo de ver.
Segundo: La herencia de los Thomas.Emerson dejó su tasa de café sobre la mesa de la oficina de Evelyn. La chica estaba tiritando, se la notaba nerviosa y ansiosa, era muy linda, un tono natura de pelo color miel, ojos grandes y expresivos marrones que armonizaban su rostro. Labios ni gruesos ni finos, eran lo justo y necesario para su rostro, un cuerpo atractivo y... ¿A quien iba a engañar? Era demasiado inocente para hacer lo que estaba por hacer.
Evelyn decidió hacerse cargo de la situación en persona. Casos como ese en particular no sucedían siempre y era necesario tratarlo como se merecía. Con respeto y mucho, mucho pero mucho cuidado. Era algo delicado y algo que le gustaba a la prensa amarilla y a los blogs de cotilleo. Y la chica que había delante de ella firmando el contrato, tenía toda la apariencia de ser un cordero enviado al matadero
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El acuerdo +18
ChickLit🚩🚩SINOPSIS COMPLETA EN EL PRIMER APARTADO🚩🚩 La historia está actualmente en reparación 12/03/24 disculpen las faltas y errores ortográficos. Gracias. Emerson Emerson tenía veinte años, una cuenta bancaria en rojo, muchas cuentas impagas y a punt...