El acuerdo +18

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Adiós almuerzo
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Asher bajo nuevamente a la cocina la cual del desastre que había echo Emerson con los perros no quedaba nada, tan limpia como Maddi la había dejado. Asher preparó un café, quería preguntarle a Emerson de sus planes después de todo era se segundo día alli.

-Pense que no desayunarias aquí- dijo Emerson detrás de él.

-No, hoy mas que nunca necesitaba uno, hace dos días que no duermo.

-Eso no es muy sano- comento ella al pasar restándole la importancia que verdaderamente sentía.

-¿Qué planes tienes para hoy?

-Ire a almorzar con Harper. Luego iré de compras, hay algunas cosas que necesito.

-Anda con cuidado, estamos en territorio de Stella.

-Este también es territorio tuyo Asher. A Stella no le temo por muy loca que esté ella a mí no me va a tener como perro con el rabo entre las piernas.

Asher vió que se había cambiado de ropa.

-Te cambiaste- comento el-, estabas mejore con la playera.

-Tenía solo la playera y una tanga Asher, claro que a tus ojos estaba bien así. De seguro viste de que color era.

-Si, tu playera era un verde militar y un amarillo muy claro.

Emerson blanqueo los ojos.

-Me refería a mi ropa interior.
-Roja y encaje negro- respondio Asher como si le hubieran preguntado del valor de las acciones de algun cliente, Emerson lo miró aburrida-. ¡Que! Tú me preguntaste.

-Aja- Emerson prefirió ignorar aquella explicación tan detallada de su ropa interior-. ¿Puedes esperarme unos minutos?

-Voy tarde ya- Asher levantó su chaqueta-. ¿Para que quieres que te espere?

-Si no me vas a llevar, ¿Para que quieres que te diga?-respondió con otra pregunta, Asher blanqueo los ojos.

-Por nada, me voy. Adiós.

- Dile a Harper que iré por ella.

Asher serró la puerta, y entro al garaje por su auto. Salió de la casa y a mitad de camino de la entrada de la casa hasta la puerta de hierro de entrada a la propiedad se sintió culpable y volvió por Emerson.

-Mierda- murmuró para él, sólo en su auto.

Emerson fue arriba y entro a la ducha y en menos de diez minutos ya estaba secándose el pelo, salió del baño y fue al vestidor a buscar su ropa.
Una mini falda con un tajo en la pierna derecha negra, un top manga corta blanco y unos zapatos de tacón. Ella vió como en la cena en la casa de los padres de Asher esté no podía quitar los ojos de sus piernas, la había dejado sola en un lugar al que no conocía y sin saber bien cómo encontrar un taxi allí o si habría un auto a disposición de ella. Lo provocaría en la oficina, como mínimo se le sentaría en las piernas y le provocaría una erección, obviamente, ella no se la alivianaría. Una coleta alta, un bálsamo labial de cereza, rímel, base y algo de rubor. Tenía el anillo de compromiso de su madre en el dedo medio y el de su padre que había echo ajustar para ella en el índice de la mano derecha, tomó su perfume, móvil y su bolso ya listo, un abrigo y salió.

-¿Y ahora donde se supone que encuentre un puto taxi?- se preguntó ella sin darse cuenta de que Asher estaba en la cocina.

Asher miraba como Emerson bajo por las escaleras, no hacía ni veinte minutos que el había vuelto a la casa de nuevo y Emerson ya estaba preparada para salir a donde sea que ella fuera a ir. Mientras Emerson rebuscaba en una mesa, Asher no quitaba la vista de su culo. Sus piernas bien torneadas y largas que se perdían bajo una minifalda negra.