Yours (Woosan)

Protégeme

El monarca se la paso hablando junto con su secretario mientras la mirada enojada de San no se quitaba ni por un pestañeo.

Wooyoung veía con interés el rostro del mayor, incluso el mismo se sentía intimidado por ella, pero el rey ni parecía inmutarse por ello.

Al parecer, la idea era que el conocido Choi San tenía que ir al palacio para reorganizar los avances del proyecto medico real y también, estar al pendiente de que todo se llevara al pie de la letra.

El castaño no quitaba tampoco su enfoque de hombre lleno de joyas frente a él y su esclavo parado detrás del magnate que irradiaba prepotencia y presunción.

En todo momento, trato de estar al lado del pelinegro, intentar que alivianara esa faceta que no le estaba agradando para nada, no le soltó de la mano en lo que se mantenía sentado a su lado.

San lo sintió, no fue nada tonto, por eso apretaba sus dedos de vez en cuando para recordar que la mano de Wonnie estaba ahí, incluso tenía en la otra un vaso de agua que tenía que llenar cada 5 minutos.

-Así que, veríamos resultados dentro de un mes o quizás más?-

-Dependiendo del trabajo y el personal- dijo Mingi señalando el trazo de papeles sobre la mesa de la sala -cuando se finalice, entonces solo proseguiremos al trabajo del hospital de la zona sur del pueblo-

-Entonces vendrás cada tres días a ver el avance ¿verdad?- el monarca volteó para ver al pelinegro con aparente inocencia, el pelinegro se mordió los labios internamente.

San apretó los dientes mientras su vaso temblaba un poco, el pelinegro respiro hondo y se dejó rendir, no tenia de otra.

-Está bien- dijo el pelinegro.

-Perfecto- dijo el rey mientras se ponía de pie y sonreía -habrá alguien para esperarte en el ala principal, con gusto te recibiremos...-

El secretario del Rey recogió los trazos y planes establecidos, Mingi acompañó a los "invitados" hasta la puerta, San caminó tras ellos casi arrastrando los pies, acto que no dejo pasar el castaño esclavo.

-Entonces, nos veremos pronto Song Mingi, Choi San- dijo el hombre sonriente y caminando hacia el carruaje tomando al esclavo de piel blanca de la cintura y subiéndose al mismo tiempo.

El cuarteto miro a la caravana irse mientras sus ojos se mostraban sorprendidos, realmente impactados y confundidos.

-Iré preparando las cosas- dijo San serio y bajo, caminando dentro de la casa y soltando la mano de su SXL -si gustas Mingi, puedes adelantar tu parte-

-¿Estas seguro?- le cuestiono el castaño, el pelinegro sonrió con trabajos y el par de esposos sabían que necesitaba tiempo a solas, se voltearon a ver y asintieron -está bien, te acompañaremos mañana...-

-Si, claro- Mingi camino hacia el jardín para salir y Yunho volteo rápido a ver a Wonnie, este tenía el rostro desentendido.

El menor se acercó a abrazar al castaño y este solo se quedó quieto, deseaba comprender que estaba pasando, pero tal parecía que nadie estaba dispuesto a decirle.

-Te lo contare después...- le susurro Yunho separándose de él y sonriéndole levemente antes de alcanzar a su esposo para irse a casa.

Wooyoung se tomó de las manos y camino dentro de la casa con pasos lentos y cansados.

No era ningún tonto, todo este embrollo tenía que ver con el esclavo que el Rey había traído consigo.

Porque en todo el rato que habían estado "conversando" la mirada anhelante y un poco triste de su amo, no se apartaba de la figura del joven esclavo de piel suave.