𝐂𝐋𝐀𝐒𝐒𝐑𝐎𝐎𝐌 ✮ Noren

4.

Me gusta tomar fotos de las personas a mi alrededor, así que de vez en cuando salgo a caminar con mi cámara y aprovecho para tomar un montón de fotos de cualquier cosa que llame mi atención. Ya sea personas conversando desinteresadamente, o una nube con una forma graciosa en el cielo, me entretengo sencillamente.

Pero cuando Jeno aparece en mi campo de visión con una sonrisa y sus dedos en signo de paz esperando por una foto, me doy cuenta que fue una mala idea salir hoy. Pestañeo varias veces intentando reaccionar a la sorpresa de habérmelo encontrado fuera de la secundaria.

—¿Qué haces aquí? Tú no vives cerca —hablo cortante, ignorando que está esperando por una foto y comienzo a sacarle fotos al cielo.

Escucho su bufido, baja sus manos y deja de sonreír. Se tarda unos segundos en responder, mira sus zapatos marrones y lo único que escuchamos por un momento fue el murmullo del resto a nuestro alrededor.

—Iba a encontrarme con alguien —menciona por fin.

—¿En una plaza para niños? —pregunto inspeccionando el lugar con una ceja alzada, siento curiosidad.

Sí, soy una persona muy curiosa que debería dejar de interesarse por la vida de los demás. Pero la mía es demasiado aburrida como para que deje de hacer eso.

Jeno se encoje de hombros: Es un chico muy infantil.

Entrecierro los ojos y me acerco a él, inspeccionándolo. Lee comienza a ponerse nervioso y mira varias veces detrás de mí, me doy vuelta y observo a dos niños jugando juntos.

—Oh por Dios —murmuro al ver que el niño saluda en nuestra dirección—. Tú no tienes un hermano menor... ¡Estás haciendo de niñero!

Suelto una carcajada ante eso, mi compañero de clase camina enfadado hacia una banca para sentarse ahí y cruzarse de brazos.

No me di cuenta que había caminado detrás de él y me senté a su lado.

—Necesito dinero —murmura y carraspea su garganta—. ¿Tú qué haces en una plaza para niños? Y con una cámara, Huang? —Ladea su cabeza—. ¿Debo llamar al 911 y denunciar a mi compañero de clase?

Abro los ojos sorprendido y lo golpeo en el brazo.

—¡Yah! ¿Por quién me tomas, uh? —Bufo y miro mi cámara—. Me gusta tomarle fotos a las personas, cuando están distraídas y se ven muy relajadas. Es satisfactorio.

Jeno asiente y sonríe mirando hacia el frente.

—Vamos, sácame una foto como si no me doy cuenta —pide y río suavemente negando.

Me levanto, estoy a punto de despedirme pero Lee sostiene mi muñeca y me mira como si fuera a darme la noticia más increíble del mundo.

—Seremos compañeros para el proyecto de filosofía —dice. Suelto su agarre y frunzo el entrecejo.

—¿Por qué quieres serlo conmigo? Ya hasta pareces obsesionado.

—Yo también tomo como inspiración una relación homosexual, y sé que otro compañero no me dejará basar en eso el proyecto. Por favor, prometo que haré mi parte. No te dejaré hacerlo solo —Parece casi suplicar, pero es Lee Jeno, y sé que es imposible que él suplique. Mi boca se entreabre ante la sorpresa, no me esperaba que esté tan preocupado por filosofía y tampoco creí que nuestros compañeros sean tan cerrados con las orientaciones de otros.

—Bien, pero lo haremos a mi manera —ordeno y él asiente con una sonrisa. Tal vez acepté porque me sentí un poco mal por él, o porque sus ojos de perrito abandonado enternecieron mi corazón. De todas maneras, sé que voy a terminar arrepintiéndome.

—Hyuuuuung~ Quiero ir a casa —Un niño aparece frente a nosotros, sonrío al verlo. Sus mejillas lo hacen verse adorable.

El niño me mira, parece inspeccionarme.

—Yujin, él es Huang Renjun. Es mi compañero de clase.

El niño hace una reverencia y yo muero de ternura.

—Hola, hyung. Soy Han Yujin —se presenta educadamente y yo me pongo de cuclillas.

—Es un gusto conocerte, Yujin. Espero que Jeno esté cuidando bien de ti ―Me acerco a él y susurro—. Si tienes ganas de burlarte de él, tendrás mi apoyo en cualquier momento.

—Genial —dice con una sonrisa de oreja a oreja y chocamos los cinco.

Lee nos mira con sus cejas alzadas esperando una explicación.

—Charla de negocios —es lo único que dice Yujin logrando sacarme una carcajada.