Estoy maldito,
estoy embrujado.
En cada esquina que giro,
te siento venir.
Cada segundo que pasa,
se siente eterno.
Cada palabra que pienso,
casi te menciono.Tú fuiste mi primer amor,
eso creí.
Terminaste siendo un fantasma
persiguiéndome para toda la eternidad.
Cada hombre que conocí
después de ti,
tiene algo:
un rasgo físico,
una faceta o
su actitud.
Siempre me recuerdan a ti.Te nombré frente a todos como "el amor de mi vida",
resultaste ser "mi pesadilla vívida",
y prometí amarte hasta que diera mi último aliento,
y lo hice.
Morí el día en el que me rompiste.
Morí cuando descubrí tu vil secreto.
Morí cuando manchaste mi camisa de un rojo escarlata.
Morí cuando impregnaste en mí tu hedor a alcohol,
lo volviste un vicio para mí.Estoy maldito,
estoy embrujado
por ti,
y tus malditas maneras de mostrarme y decirme "te amo".En cada hombre que conocí
después de ti.
Cada uno de ellos
tienen algo que me recuerda a ti.Creo,
me perseguirás como maldición escéptica,
jugando con mi salud mental.
Creo que yo lo permití,
me perseguirás hasta la muerte.
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aprendiendo a amar.
Thơ caAquí estamos ahora, 50 poemas que narran mi agridulce travesío por los 23; una montaña rusa de emociones sin más, un caleidoscopio de múltiples colores y gritos ensordecedores; una voz, un lápiz, un papel, un corazón tan sensible y delicado que no c...