Un semestre terminó,
otro nuevo empezó.
El invierno cesó
y el verano nos abrazó.
Todo lo que una vez conocí,
junto a ti, se volvió desconocido para mí.Una semilla se sembró,
una flor de ella nació.
El tiempo rápido se movió,
y yo me quedé congelado.
Memoricé cada detalle sobre ti,
preguntándome si valió la pena para ti.Nos diste por sentado
pero nada fue como me lo imaginé.
Prometimos no hacernos daño,
entonces, ¿por qué me encuentro justo donde me dejaste?Me diste por sentado,
y yo hice todo para que te quedes.
Juraste jamás hacerme daño,
entonces, ¿por qué me encuentro justo donde me dejaste?Vi las hojas caer
al suelo, formando
un colchón salvavidas
amortiguando mi caída
en cámara lenta.Escuché la lluvia caer
desde mi habitación
y cuando intenté correr
tropecé, cayendo en los charcos
de tu apatía.Sentí el frío rozar mi piel
desde el marco de la puerta
aferrándome a la idea
que hacia atrás mirarías,
pero avanzaste... y yo,
me quedé justo donde me dejaste.
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aprendiendo a amar.
PoesiaAquí estamos ahora, 50 poemas que narran mi agridulce travesío por los 23; una montaña rusa de emociones sin más, un caleidoscopio de múltiples colores y gritos ensordecedores; una voz, un lápiz, un papel, un corazón tan sensible y delicado que no c...