Ser admitida en la mejor Universidad de Artes me dejó completamente estupefacta. Además recibí una beca. Es cierto que mis calificaciones siempre fueron las mejores y me esforcé en ser la mejor en todo. Lo logré. Logré mi sueño de entrar a esta gran escuela. Es una lástima que mis padres no estén aquí para verme triunfar.
Ellos murieron hace muchos años en un accidente de tráfico cuando yo tenía la corta edad de ocho años. Era solo una niña y por esto quedé al cuidado de mi tía, la hermana de mi madre. Mis padres iban en el autobús y algo pasó que todos los pasajeros a bordo perdieron la vida. Yo debí estar ahí pero, me prometí que viviría por ellos.
Mi tía, Elice, es una persona muy amable conmigo aunque nunca debes hacerla enojar. Ella tuvo una hija llamada Laura que desde que tengo uso de razón es mi mejor amiga o por lo menos es la persona con la que comparto cada detalle de mi vida.
Ambas me tienen mucho cariño y yo a ellas. Siempre me han tratado bien, estoy agradecida por eso y porque me acogieron cuando lo necesitaba. Juntas nos cuidamos las espaldas ya que sólo somos nosotras tres, el padre de mi prima desapareció cuando ella nació y no hay rastro de él. De eso no se habla mucho. Las cosas tristes no son temas de conversación en la casa de la tía aunque yo creo que es porque le incomoda y todavía le duele su abandono a diecisiete años de aquello.
En realidad yo no vivo con ellas, sino en la casa de al lado. Por lo tanto convivo con ellas de igual manera ya que desayuno, almuerzo y ceno con ellas. Casi nunca estoy en mi casa y la mayoría del tiempo me encuentro en esta es porque cuido a mis hermosos cinco gatos.
Elice posee un restaurante familiar —en la que sirven comida italiana— que heredó de los abuelos aunque originalmente le pertenecía a mi madre por ser la mayor de las dos pero cuando mi mamá muere, el restaurante pasa a ser de la tía. Ella, su hija y yo nos encargamos del lugar con mucha dedicación, cariño y empeño, después de todo ese lugar es nuestro sustento. Tenemos muchos clientes todos los días, en especial los fines de semana porque casi nadie trabaja los sábados y domingos y a veces viene gente nueva.
Pero bueno, creo que hablo mucho. Mejor pasemos a la acción.
Tienes toda la razón, mi querida Ara Montez.
Vamos a pausar la historia un segundo. Esa fue mi adorada e inoportuna conciencia. Como seguramente se dieron cuenta, Ara Montez es mi nombre, supongo que se preguntarán por qué tengo un nombre tan raro que es súper difícil de encontrar una persona llamada así y yo me pregunto lo mismo.
He googleado mi nombre y Ara es un nombre predominantemente femenino de origen Hebreo y significa “león”, supongo que mis padres me llamaron así porque soy una luchadora que jamás se rinde.
Según la Biblia judeocristiana, Ara era uno de los hijos de Jeter y líder de la familia de los asheritas. Cabe mencionar también al héroe de la literatura popular armenia, Ara el bello, cuya belleza es elogiada en diversas leyendas de este país. Ara fue el responsable de la guerra con Asiria, ya que la reina de esta nación le pretendía sin éxito.
Ahora sí, continuamos y empezamos con la verdadera acción. Ya basta de palabrería.
Empecé a preparar todas mis cosas para asistir a la nueva escuela hecha para ricos. El día anterior fui a la tintorería para dejar mi uniforme y que lo arreglaran, lavaran y plancharan adecuadamente. El dueño me avisó que ya estaba listo y fui a recogerlo sin problemas.
Mi mochila se encontraba preparada con todos los libros necesarios. Me vestí rápidamente con el uniforme. Eché una miradita a mi reflejo y debo admitir que este uniforme no me favorece en nada. Soy conciente de que no soy nada comparada con las chicas de la Uni.
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BILLONAIRE
RomanceUna prestigiosa Universidad para ricos. Un chico y sus cuatro hermanas populares. Una chica ordinaria, sin dinero. Una fiesta de bienvenida y dos amores por venir. Ara Montez, becada en la mejor Universidad de Arte del país, una matrícula que no pu...