El pelinegro dejo su tenedor junto al plato y clavo su mirada en Rubi.
-No, ¿por que lo dices?
-Es que te noto... no se, algo ido.
Y era verdad, durante toda la cena había permanecido callado y parecía que estaba en otro mundo. Juan también se dio cuenta, pero había pensado que se debía a todo lo ocurro últimamente.
-No te preocupes, estoy bien, solo estoy algo cansado. De hecho, creo que me voy a dormir ya.
-Buenas noches, papá.
-Buenas noches, hijo. Cuando termines de cenar, termina tus tareas y a la cama.
El niño asintió mientras Quackity le daba un beso en la frente y acto seguido se iba hacia la habitación. Rubí esperaba un beso también, pero al ver que la puerta se cerraba entendió que eso no ocurriría. Se pregunto si su novio estaba molesto con ella.
En el dormitorio, Quackity se dejo caer sobre la cama con la ropa puesta. Miro hacia la almohada que tenia al lado, el lugar que Rubí ocupaba cada noche, y frunció el ceño al pensar que esa misma persona, su novia, podía haber estado manipulándolo durante años. Animándole y consolándole para que superara su divorcio cuando ella, a conciencia, lo había provocado. Eso si Auron no mentía. Pero pronto lo descubriría.
Se le había ocurrido un plan muy sencillo, pero podía resultar muy eficaz, que consistía en colocarle un pequeño micrófono a Auron. A juzgar por lo que decía y su estado, Auron estaba demasiado borracho para recordar algo al día siguiente. Podían fingir que no sabían nadas, pero hacerle dudar insinuando que había dicho "ciertas cosas". Eso lo alertaría y no cabía duda que, si tuviera algo que ocultar, compartiría sus preocupaciones con Rubí. O al menos, eso pensaba Quackity.
La puerta se abrió y cerro rápidamente y en pocos segundos Rubí ya estaba en la cama. Quackity se hizo al dormido para no tener que hablar con ella. Sinceramente, no tenia ganas, solo nervios e impaciencia por averiguar si tenia motivos para desconfiar de la que había sido su "compañera" durante tanto tiempo.
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Por la mañana, el despertador sonó dos veces antes de que Rubí se despertara para apagarlo. Se giro hacia Quackity, per se sorprendió al ver que el susodicho no estaba. S e levanto y encontró una nota en la mesita de noche.
"Tuve que ir a una reunión importante. Nos vemos en la noche."
El resto de la mañana transcurrió con normalidad en su trabajo. El día estaba yendo bastante bien, mas poco antes de mediodía, recibió un mensaje que la altero. Uno de Auron, tan breve como inquietante: "Ven en seguida, es urgente" decía.
Rubí espero a la hora del descanso que tenían a la hora de comer, no podía permitirse faltar tanto al trabajo y encima ese día su jefe si estaba en la oficina. En cuanto el reloj dio la una, se teletransporto a la casa del de mechón amarillo.
-¡Ya era hora! -grito este al verla. -¿se puede saber por que has tardado tanto?
-Oye, tranquilízate, ¿vale? -replico ella mientras entraba. -Estaba trabajando.
-Te dije que era urgente.
-¿Y que es tan urgente, si se puede saber?
-Dime, ¿Qué paso ayer?
-Ayer... te deje en la cama para que durmieras, estabas ebrio. ¿No te acuerdas?
-De eso si, lo que recuerdo es lo que sucedió después
Rubí se encogió de hombros y lo miro sin entender a que se refería.
-¿No te dormiste? -Auron negó.
-Esta mañana me desperté en la casa de Luzu, pero no me acuerdo como llegue allí.
-Estupendo, ¿Qué mas? -pregunto al ver su nerviosismo.
-Pues... que ayer corto conmigo pero hoy estaba muy rara. Me dijo que lo había pensado después de la conversación que tuvimos ayer en la tarde, de la que no recuerdo absolutamente nada, y que no quería dejarme -explico.
-Pero eso es genial -exclamo Rubí. -¿Entonces que te tiene tan preocupado?
-A eso iba... después me dijo algo que me dejo totalmente descolocado. Justo cuando estaba apunto de marcharme.
Flashback
-Oye Luzu... -murmuro Auron, un poco nervioso. -Solo por curiosidad, ¿Qué fue exactamente lo que te convenció para que me dieras otra oportunidad?
Luzu sonrió y le acaricio la mejilla.
-Ay, el alcohol... M e dijiste que me querías como mil veces y luego intentaste cantarme el estribillo de la "Perfect" -recordó entre risas. -Me hiciste reír como nunca. Nunca te había oído decir tantas tontearías. Hablabas de engaños, del sentido de la vida... Hasta empezaste a decir cosas como que habías conspirado con Rubí para hacer no se que y fastidiar a Quackity -Auron palideció. -Oh si, no parabas de decir lo mucho que odiabas a Quackity, per tranquilo, eso ya lo sabia.
-Ah, ya - dijo soltando una risa forzada.-¿Y dije algo mas?
-Dijiste muchas cosas, ya no me acuerdo porque no les di importancia, pero lo de la canción fue increíble.
La castaña le dio un beso en la mejilla antes de cerrar la puerta, dejándole aturdido y confuso.
Fin del flashback
-¡Eres un imbécil! -Rubí le grito. -¿Como se te ocurre ir borracho a su casa? ¿Es que no pensaste en lo que podría pasar?
-Y yo que se, bebí mucho.
-Le hablaste de conspiraciones, de nosotros, ¡a saber que mas le habrás dicho!
-Ojala lo supiera...
-Que habrá querido decir con que hablabas con engaños, y de Quackity... no le habrás contado que el y yo no llegamos a acostarnos, ¿verdad? Porque así suena.
Auron miraba al suelo. En un ataque de ira, Rubí agarro una silla y estampo contra el suelo con tanta fuerza que la rompió.
-No se lo habrás contado, ¡¿verdad?! -repitió furiosa.
-¡No lo se! ¿vale? ¡No recuerdo nada de lo que dije! -respondió gritando. -¡Lo siento!
-Bueno... -la mujer respiro hondo intentando calmarse. -Vamos a calmarnos. Si supieran algo, ya no los habrían hecho saber, ¿no?
En ese momento escucharon un fuerte estruendo y la puerta cayó al suelo. Auron y Rubí se asustaron al ver ahí a Luzu y a Quackity.
-En eso estamos... -murmuró Luzu tronándose los dedos.
