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—doctor despertó… el paciente de la habitación 613 despertó —escuche de fondo la voz de alguien.

Los ojos los sentía pesados el cuerpo lo tenía entumecido, escuchaba el pi que hacía el monitor de latidos abrí lentamente mis ojos parpadeando en el momento para acostumbrarme a la brillante luz.

Mire a mi alrededor y estaba en una habitación blanca mi mano tenía una intravenosa estaba en una habitación de hospital, recordé lo que había pasado y toqué mi cuerpo rápidamente pero no encontré vendas por ningún lado y mucho menos dolor.

Escuché abrirse la puerta y entro un doctor desconocido, se acercó a mi y revisó el monitor la enfermera que lo acompañaba me miraba con una sonrisa a los minutos habló.

—¿cómo te sientes Jimin? —pregunto sacando una lamparita de su bolsillo.—sigue la luz, por favor.

Asentí e hice lo que pidió seguí la luz y después reviso mis ojos con la misma lámpara —estoy bien, gracias —conteste con seriedad.

—pide una resonancia —le pidió a la enfermera.—es un alivio que hayas despertado —me miro.

—lo sé, después de recibir tantos impacto de bala—conteste desviando la mirada.

—¿Balas?…—se escuchaba su voz confundida—¿te dispararon?—esta vez lo mire yo con incredulidad.

—¿no es por eso que estoy aquí?—pregunte levantando una ceja.

—esta usted equivocado —contesto con el seño fruncido —usted lleva en coma casi 6 meses —dijo eso y la sorpresa abordo mi rostro.

¿6 meses en coma?, Liam, como debía estar el, mi niño, entonces por eso estoy aquí y ya no tengo dolor, eso debia ser.

—¿cuántos impactos de bala recibí? —pregunte con seriedad.

—joven le he dicho que usted no recibió ningún impacto de bala…— se quedó callado un momento —usted ingreso al hospital una semana después de haberlo reportado como desaparecido y que alguien lo allá traído aquí por intento de suicidio — continúo contando aquella anécdota.

Intento de suicidio, la única vez que me intenté suicidar fue en la bañera en casa de Jeon en ningún otro lado, ¿que había pasado?, porque no estaba herido.

—¿qué año es? —pregunte con confusión.

El doctor me miró un momento y después se quedó callado, tomo el expediente que estaba en la parte baja de la cama e hizo algunas anotaciones lo dejo en su lugar y salió ignorando mi pregunta por completo.

Me levanté con cuidado, mis piernas estaban entumecidas aún así hice lo posible porque se movieran a mi voluntad, llega a la parte inferior de la camilla y tome el expediente, mis ojos se acuaron y las primeras lágrimas salieron desprevenidas haciendo que las demás las siguieran como si de una cascada se tratará.

No habían pasado 2 años, solo 6 meses en los que estuve dormido, entonces jamás desperté de mi intento de suicidio, no pase por otra violación por culpa de Jeon, no perdí un bebé, todo lo que había pasado había sido un gran producto de mi imaginación para dar señales de actividad cerebral.

—nada paso realmente… —lo dije en un susurro.

—¿dijiste algo? —me había asustado, no me había percatado que alguien había entrado a la habitación, su cara me era familiar pero no recordaba dónde la había visto.

—¿jin?— dije con confunsión.

—ese es mi nombre, supongo que el doctor ya te informo que estuve a tu cuidado estos seis meses —platico con una sonrisa.

Dulzura mía  [Kookmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora