Si alguien le dijera que ésto era un sueño, lo creerían, pero para su mala suerte, no lo era.
Tenía sus labios sobre los suyos, dejándolo por unos breves segundos sin saber cómo reaccionar o qué hacer.
¿Quién rayos se creía que era como para besarlo?. ¿De dónde salía tanta confianza?.
Y al intentar separarlo fue que sintió que le costaría alejarlo. Si quería irse, debía de tomarlo por desprevenido, así que prosiguió a corresponder el beso, comenzado con uno suave, siendo el movimiento de sus labios muy delicados.
Aun las palabras de Simon seguían sonando en su cabeza, pero a su vez le daba la razón ya que él también maldecía el día que lo había visto en aquel lugar, y también se lamentaba el haber buscado problemas.
Si hubiera sabido que las cosas serían así, lo habría pensado mil veces antes de hacer una estupidez...
Y notó que no se sentía tan mal besarlo, de hecho, se sentía cálido, y extrañamente dulce, como así decirlo...
Sus ojos los mantuvo cerrados, decidido a tomarse un segundo para disfrutarlo antes de hacerlo caer en la realidad.
Y en cambio Simon sí que se sorprendía por su propia actitud. Hace años que besar a alguien no lo hacía sentir así de bien, y justamente tenía que ser la persona que lo odiaba... Genial.
Se pudo hacer una idea de lo caliente que podía ser Jhonny en la cama, y no quería arruinar éste momento, pero le fue inevitable...
Tan inevitable como aquel ardor en su labio inferior, cayendo de un momento al otro hacia el suelo, observando a Jhonny no solamente con su ceño fruncido, si no también con uno de sus puños cerrados.
¿Se había atrevido a golpearlo?.
Todas ésas sensaciones lindas se habían desvanecido de un momento a otro, logrando que ahora ambos se miraran enojados.
– ¿¡Cuál es tú puto problema!?. – Habló molesto en lo que se levantaba del suelo y miraba su reflejo en el espejo. Le había lastimado una parte de su labio. Nuevamente lo miró.
– ¿¡Cuál es el tuyo, eh!?. ¿¡Qué pretendías que pase si me besas sin mi consentimiento!?. ¡No vuelvas a hacerlo en tú vida, o no respondo!. ¡Y agradece que me medí, idiota!.
Más que molesto le quitó el seguro a la puerta, aun que antes se giró para volver a verlo.
– ¡Y lárgate de aquí, ya tuve suficiente mierda por hoy!.
Ahora sí se fue de aquel baño, dejando a Simon molesto por aquel golpe.
¿Qué explicación le daría a Tiffany cuando lo vea con su labio inferior lastimado?.
Aun qué eso le daba un tanto igual. La cosa sería si Gary lo veía. Sabía que se podría enojar y meter en problemas a Jhonny, cosa que no quería pese a todo.
Limpió su boca y tras salir del baño es que volvió a su mesa, notando la preocupación en Tiffany apenas lo vió sentarse mientras tomaba una servilleta para limpiarse nuevamente el labio.
– ¿¡Qué te sucedió, cielo!?.
– ¡Nada, me golpeé contra la puerta del baño, algo sin importancia!. ¿Nos vamos?. Se me fue el hambre. – Tras dejar la servilleta de lado es que sacó dinero de su billetera, dejando un monto grande sin importar si era mucho o poco.
No les tomó tanto tiempo irse de ahí, teniendo a un Simon bastante frustrado, cosa que confundía a la mujer.
¿Tanto drama por golpearse con una puerta?. No tenía tanto sentido. Aun así, si Ghost no quería decirle lo que le sucedió, no iba a insistir. No quería ser una carga para él ni tampoco molestarlo.
Apenas la dejó en su apartamento es que condujo nuevamente hacía el suyo, necesitando quitarse el estrés del momento... Y para éso justamente llamó a Gary.
