SOLEDAD

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          Por irónico que pareciese, Sasuke por primera vez en su vida se dio cuenta de que había  alguien más que sufría tanto como él, quizás no de la misma manera, pero igualmente dolorosa. 

           Destruir su alma para no tener debilidades en la batalla no era el único motivo,  Se había encontrado cara a cara con los demonios de Sakura, algo que llevaba mucho tiempo deseando.

            Había compartido su desesperación y sentido su dolor, ese dolor agudo  del que emergía la necesidad de acabar con dicho sufrimiento... Sasuke lo conocía mejor que nadie, si en su momento el joven muchacho hubiese sabido del recién citado método... hubiese hecho exactamente lo mismo. 

           Aunque ella, como siempre, hubiese tratado de impedirlo. Echando la vista atrás, a pesar de los desprecios y la distancia, la joven siempre se mantuvo a su lado.

          Entonces apareció la oscuridad envolviéndolo todo a su paso, en su vida creyó estar solo, pero por alguna extraña razón, ahora la soledad era más real que nunca.

           Quiso mirar en todas direcciones, en el caso de haber habido alguna...porque no vio nada, por cada segundo que pasaba, Sasuke a su manera,se iba poniendo más nervioso.

- ¿Hay alguien ahí? .- gritó haciéndose eco a su alrededor, eso quería decir que o no habían paredes, o el espacio era grande y sin obstaculos donde el sonido pudiese rebotar.

           Soledad, distancia, vacío," nada..."-!Sakura!.- gritó de nuevo.

           De repente el sonido de unos pasos se hizo a lo lejos, Sasuke no sabía por donde venían hasta que una pequeña silueta apareció en la lejanía, miró con desconfianza como se acercaba a cada paso, era Sakura pero no una Sakura cualquiera, era una pequeña Sakura de cinco años, de rostro serio y ceño fruncido que con forme avanzaba se iba convirtiendo en una muchacha de 12 años, luego de 18 años.- ¿Será este el lugar? ¿Por fin habré llegado ? .- pensó desconcertado.

             La joven se detuvo frente a él, la quinta y última Sakura, lo miró fijamente ...sin duda era ella, al fin la verdadera había aparecido y la tenía ahí delante.

             Sintió como si kilómetros de distancia los hubiese separado durante siglos, sin embargo después de todo, lo primero que afloró en su interior en cuanto la vio, fue...la falta que le hacía.

             No se había dado cuenta de lo solo que estaba o de lo que Sakura significaba en su vida hasta que ella desapareció, la ansiedad que lo inundó al pensar que está vez no podría recuperarla.

               No creyó encontrarla y aún menos tan rápido, no obstante simplemente el hecho de estar parada enfrente suya ya era motivo suficiente para recordarle una vez más el por qué, estaba él ahí y no era por otra razón que no fuese ella. 

               Sasuke estaba decidido, no le importaba quedarse atrapado para siempre o morir en el intento, haría cualquier cosa, incluso luchar contra ella si hacía falta aunque el joven prefiriese no tener que llegar a esa situación, había visto a Sakura luchar y sabía  de lo que era capaz, sentía un gran respeto hacia ella como adversaria, se había convertido en una contrincante digna de temer. 

               Por un segundo recordó como era Sakura en el equipo 7, llorona, repelente, débil, pesada,asustadiza... todo lo contrario a la mujer que se encontraba enfrente suyo.

              Cabría decir con un toque de ironía "cualquiera diría que es la misma persona".

               Por lo que cayó en la conclusión de que si  para él, en su día siendo más fuerte que ella, su entrenamiento de por si fue duro...¿Cómo debió de haber sido el de Sakura  para haberse convertido en la Kunoichi que era hoy en día? 

PROMESAS (sasusaku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora