Colombia había muerto.
Si, había muerto, fue al cielo y ahora estaba en presencia de uno de los mas bellos ángeles que habían en el paraíso. O al menos esa es la única explicación que el colombiano le encontraba a la situación en la que ahora se veía protagonizando en la cocina.
Justo frente a el estaba una figura celestial, un cuerpo tallado por la misma Afrodita dotado de una gracia y belleza divina digna de cualquier ninfa de la mitología griega, con ligeros movimientos de caderas tan sutiles y al mismo tiempo tan atrayentes que lo invitan a deleitarse observándolo todo el día, de lejos, sin atreverse a interrumpir sus actividades o seria brutalmente degollado.
Colombia se encontraba parado en la entrada de la cocina hipnotizado mirando a su pareja con un pequeño brillo en los ojos y un perceptible sonrojo adornando sus mejillas. Había entrado en la cocina desde hace rato, pero apenas entro y vio al venezolano en tal forma fue simplemente imposible que no se quedara embobado viéndolo en silencio para no arruinar el ambiente, ya hasta se le había olvidado el motivo por el cual había ido a esa pieza de todos modos.
Ok, algo que es seguro aclarar, es que desde que Venezuela a estado yendo a terapia y de a poco recuperándose de su trastorno dismorfico corporal había empezado a ser menos inseguro con su cuerpo, por lo cuál ya no tenia tantos problemas en mostrarlo como antes, que incluso llegaba al extremo de usar ropas que fueran una o dos tallas mas grandes con tal de esconderse. Y eso es algo a Colombia le gustaba, no solo por ver que su esposo estaba superando sus traumas y empezando a aceptar su propio cuerpo sin prejuicios, el siempre lo había dicho, el venezolano era hermoso tal y como era sin importar que tantas grietas o heridas tenia y era lindo ver como él mismo por fin se estaba dando cuenta de eso, y también por ello ahora se daba el lujo de usar trajes que le quedaban un poco mas ajustados, algunos que mostraban un poco de más, o también, como es ahora el caso, de no llevar mas que unas pequeñas bermudas dejando al descubierto su torso y piernas.
Creo que ya estamos entendiendo porque Coco se detuvo a contemplar a su pareja, y es que el cuerpo de Venezuela tenia un detalle en especial que hacia que una vez lo vieras, no fueras capaz de apartar la mirada. Y eso eran sus caderas y su cintura.
Partamos del hecho de que un rasgo distintivo de la anatomía común entre los hombres es el tener los hombros igual o mas anchos que la cadera, con una cintura igual de ancha o en su defecto, apenas un poco mas estrecha que la cadera; en el caso de Venezuela no es así. Su cintura si es notoriamente mucho mas estrecha de lo que debería ser, sus caderas eran anchas y sus hombros pequeños, lo cual le daba una apariencia mas parecida a la de una mujer.
Eso fue algo que habían notado desde que era pequeño, digamos que si habían percibido que tenia una cintura mas pequeña pero en ese momento no le habían prestado atención, simplemente supusieron que era un defecto que con el tiempo y a medida de que creciera desaparecería, cosa que obvio no sucedió, mas bien esa figura se fue moldeando aun más, al punto de que ahora fácilmente pudiera hacerse pasar por una modelo y nadie lo notaría, al menos hasta que le escuchen la voz y se den cuenta que es hombre... O pensaran que era trans, como le ha llegado a pasar en unas contadas ocasiones.
Y todos en el continente están de acuerdo de que es uno de los atributos físicos mas atractivos que poseía el de ocho estrellas, y eso bien lo sabia aprovechar, por allá en la década de los ochenta y noventa era bastante común ver a Venezuela presumiendo su cuerpo usando prendas muy ajustadas y minishorts, solo porque le divertía ver las reacciones de los demás al verlo, le gustaba ser el centro de atención y destacar en los lugares al que fuera; pero lastimosamente eso cambio cuando le empezaron a aparecer esas dolorosas grietas que fue cuando empezó a avergonzarse de su cuerpo y ocultarlo con prendas muy anchas.
Venezuela desde hace rato había notado la persistente mirada del colombiano detrás suyo, pero no le había prestado atención debido a que estaba muy ocupado concentrado en arreglar lo que fuese que estuviera fallando en la cocina que no quería llegar gas. Se había levantado mas tempano como de costumbre y se puso a preparar el desayuno pero no había podido hacer mucho ya que la hornilla no quería prender. Y esto empezaba a desesperarlo.
—¡Vergacion, Coco! ¿¡Me podei' hacer el favor de venirme a ayudar con esta mierda para hacer el desayuno!?—Grito muy enojado volteando a ver a su pareja.
Ese grito saco a Colombia de su ensoñación, parpadeo un par de veces y movió la cabeza de un lado a otro, ya había recordado lo que vino a hacer en la cocina.
—Cortaron el gas, hay una tubería rota y le están haciendo mantenimiento.—Respondio lo mas tranquilo del mundo.
Venezuela se le quedo viendo un par de segundos.
—...¿¡Y si me estai' viendo tratando de prender la mardita hornilla como el propio gafo por qué coño e' la madre no me decís nada!?—El sabia muy bien porque no le había dicho y solo se le quedo viendo... Pero aun así no quitaba lo enojado que estaba.
—Ah bueno...—Colombia no sabia exactamente como responder esa pregunta.
Venezuela se paso sus manos por su cara y soltó un muy sonoro bufido cargado de frustración.
—¿Ya que coño? Traeme la verga esa del tostiarepa pa' acá.—Dijo con desgano, Venezuela odiaba preparar arepas en eso, si, era mas fácil y mas rápido con ese aparato pero no, que asco, el prefería hacerla en la forma tradicional.
Colombia con una sonrisa nerviosa se acerco a su esposo y le planto un tierno beso en los labios.
—Lo amo~.—Comento en un tono bastante meloso para luego dirigirse a acatar la petición de Venezuela.
Este se quedo quieto unos segundos, luego se cruzo de brazos y soltó un suspiro cansado, sintiendo como su enojo poco a poco se disipaba.
No se si también les pasa pero odio las arepas cuando las hacen en el tostiarepas, no se porque, pero no saben igual de rico y se ven todas raras y feas.
Yo prefiero hacerlas en el budar, se tardan mas y con la cocina que tengo que se le sube el volumen de llama sola corro el riesgo de que se me quemen, pero aun así me gustan más.
Tengo otro one-shot de este estilo planeado, pero al revés, osea Venezuela todo embobado admirando la belleza de Coco.
Un par de visitas por aclarar.
—Para los que no han leído mi libro de Headcannons de countryhumans les comento que mi versión de Venezuela es andrógino, es decir, que posee rasgos que no coinciden con el sexo que le corresponde.
Venezuela a pesar de ser hombre tiene cuerpo de mujer.
—Las ninfas, según la mitología griega, son deidades femeninas de extrema belleza las cuales estan asociadas a la naturaleza. Y que según algunos relatos eran bastante protectoras con sus santuarios, tanto que llegaban a matar a cualquiera que se adentrara en ellos sin permiso o lo irrespetaban.
(Como que de repente me entraron ganas de escribir un one-shot con un Venezuela ninfa 😏😏 tal vez lo haga, tal vez no)
—Tanto Vene como Coco tienen la costumbre de decir "te amo" en un tono cariñoso cuando su pareja esta enojada para calmarla, y de hecho lo peor del caso es que funciona XD
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Cåfê Cøn Čhøčølåtê||•Venecolo•||Countryhumans||
RomansaEl mundo necesita mas contenido de esta pareja, y yo estoy dispuesta a contribuir con ello. •Contenido bl/Gay, escenas NSFW y lenguaje altisonante. •Fluff y smut por igual. •Los one-shots no son cronológicos. •Creanlo o no, todo lo que verán en este...