Recorro el pueblo para detectar alguna necesidad para poder solventarla, el frío cala mis huesos y la nieve rodea todo el lugar.
Aún con las capas de pieles cubriendo me el frío es indomable, extraño mi Reino donde la primavera está en todo su esplendor.Los habitantes detienen sus actividades para observarme de forma neutra y algunos con aparente molestia.
- Jefrye ¿Por qué su actitud? - Pregunto al caballero negro el cual es mi acompañante.
- Lo siento mi Reina, los habitantes del Reino Negro son recelosos con los extranjeros de tierras tibias, además esperaban qué el Rey desposara a una Dama originaria de las tierras nevadas - Dice muy educado, pero con una leve ronquera en la voz.
Unos niños pasan corriendo y lanzando bolas de nieve entre ellos, pero una sale disparada dándome en la pierna.
Todos se quedan estáticos...
- Con que con esas tenemos - Desmonto el corcel y recogí una bola de nieve iniciando nuevamente una guerra de nieve.
Me escondo en un muro mientras que una pequeña se pocisiona a mi lado lanzando bolas sin muy buena puntería.
Pero igual nos divertimos todos los niños al arrojar bolas de nieve a Sir Jefrye quien se mantene de pie sosteniendo los corceles.
- ¿Vamos a tomar chocolate caliente? - Propongo con una sonrisa a lo que los niños están encantados.
Organizamos una carreta y emprendimos la marcha al Castillo.
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El Reino Negro 🌙
FantasyDicen que para la venganza se necesita de dos tumbas, en esta Guerra solo se necesitará de tres. Continuación del Reino Alado 🪽