{Si Jung Hoseok no le hubiese pedido que faltara a clases y le ayudase a escoger un anillo de promesa, tal vez Heo JiWon no se hubiese sentido tan culpable por enamorarse del novio de su mejor amiga.
Ella solía pensar que todo era blanco o negro per...
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Mi primera vez yendo al club nocturno Bangtan para ver a la banda D-Boys tocar su primer concierto, comenzó conmigo llena de nervios.
No es de extrañar ¿eh?
Desde que Yeonwoo pareció tan determinada en llevarme con ella, digamos que me absorbió en su entusiasmo, así que accedí e incluso comencé a emocionarme y terminé manejando a su casa tan pronto como las clases terminaron.
Conocí a sus dos hermanos menores. El mayor, Gunwoo, de catorce, incluso coqueteó conmigo haciendo que su hermana lo corriera de la habitación. Entonces conocí oficialmente a la novia de Kim Namjoon, Lim SeMi. Su joven cuñada la había invitado a unírsenos; apenas la vi, noté que la pobre exprofesora era una temblorosa bola de nervios como yo.
Yeonwoo nos forzó a usar vestidos, unos cortos que caían por encima de nuestras rodillas, y sin mangas. Entonces ella fue y se puso pantalones. Cuando le pregunté de qué se trataba esto, batió la mano diciendo:
—No tengo a nadie a quién impresionar —lo que me confundió porque yo tampoco tenía a nadie a quien impresionar. Pero cuando mencioné eso, me envió una ilegible sonrisa tipo mona lisa—: Te ves increíble. Vas a usarlo.
No estaba segura de si me veía así de bien, pero el vestido era bonito, y me hacía sentir bonita, así que fui con ello.
Creo que SeMi sentía lo mismo, pero incluso mientras se miraba largamente en el espejo, lo hacía parecer como si no quisiera dejar a los chicos solos en casa.
—¿Seguro que estás bien con calentar las guarniciones para cenar? —le preguntó a Gunwoo.
Él resopló. —Por favor, comíamos sobras de los vecinos cada noche antes de mudarnos aquí.
SeMi palideció y abrió la boca, probablemente para decir que no iba a dejarlos solos, pero el adolescente la detuvo con un gesto. —Vamos a estar bien. Solo ve. Diviértete. Haz que Namjoon se ponga a sudar en cuanto te vea y rompa algunos vasos.
Mordiéndose el labio, ella asintió siendo arrastrada mientras Yeonwoo nos rodeaba con sus brazos a ambas.
—No sé ustedes, pero estoy emocionada por esta noche. Tengo un buen presentimiento.
Yo era todo lo contrario, pero esperaba que sus presentimientos fueran más fiables que los míos.
Llegamos antes de que el club abriera. Yeonwoo golpeó la puerta de cristal del frente hasta que su hermano apareció del otro lado. Sonrió cuando nos vio y nos dejó entrar, pero a partir de ahí, sus ojos fueron solo para SeMi.
—Cuando Yeonwoo me envió un mensaje diciendo que te había convencido de venir, no lo podía creer. Juro que no has estado aquí desde... —Las comisuras de su boca se alzaron en una mueca traviesa, lo que provocó que SeMi mordiera su labio inferior mientras compartían un secreto interno. —Bueno...tú sabes.
