ONLY ONE | MIGUEL O'HARA

Capítulo 6 | Te callas o te callo.

¡Buenas, amix! ¿cómo están?

Yo feliz porque ya se viene lo chido 😈
A partir de aquí este emoji (🌹) significará comienzo y final de contenido sugestivo, dónde se hace mención de fetiches y demás. Tomen sus precauciones si no les gusta este tipo de contenido ✨

Sin más, Disfruten 💜

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Los medios de comunicación hablaban de una sola cosa: La aparición de una heroína de ficción en New York. Todos hablaban de como la ficción supero a la realidad, y lo que muchos creyeron fantasía se volvió realidad. Las calles de New York tenían a alguien que los protegiera ahora.

Las opiniones eran divididas, unos estaban entusiasmados y eufóricos al ver como una mujer araña se columpiaba de manera natural y ágil en las estructuras, velando por la seguridad de toda la ciudad; en cambio, otros creían que esto era un invento del gobierno o algo así, una cortina de humo con buenos efectos especiales. Se sentían asustados, veían a su trepa-muros como un arma que sería capaz de todo si se lo proponía y matar a sangre fría, nadie podría contra ella si intentaba acabar con la ciudad.

Irix se apodó a su misma como Spider-X, usando la última letra de su nombre para adornar su alter ego sin perderse así misma en esta nueva versión de ella. Era una joven adulta aún muy torpe, aun no sabía de lo que ella misma era capaz. Pidió ayuda y consejos por todas partes, haciendo amigos en el proceso e inspirándose de ellos, quienes eran, sus poderes y sus nombres.

A parte de los hermanos O'Hara, quienes sin darse cuenta se habían vuelto los tutores de esa nueva mujer araña, otros arácnidos decidieron ayudar cuando la curiosidad los consumió al enterarse de la extraña aparición de la mujer de un universo al que creían normal y común entre otros que no tenían un héroe. Pavitr Phabrakar, el Spider-Man del universo 50101, fue otro que se volvió amigo de la morena; ambos compartían el ser nuevos en esto de ser héroes, aunque Pav decía muy naturalmente lo fácil que era para él y eso, le sacaba risas a Irix.

La llegada de Irix fue tan impactante por la naturaleza de su existencia, que fue como si todo se fuera paralizado para ayudar a esa extraña mujer que había captado la atención de la mayoría. No solo por ser atractiva a la vista, sino que su entusiasmo era contagioso y eso se le sumaba su personalidad extrovertida. Por alguna razón, La Sociedad Arácnida se había vuelto más agradable desde que aquella mujer llegó.

Gabriel insistía que en ella había algo más que los poderes comunes, e insistió que los entrenamientos siguieran pero esta vez de la mano de su hermano. Miguel tomaba tiempo del poco que tenía para dedicarse a Irix, mejor dicho, a su entrenamiento. ¿Era duro? Bastante, pero era lo necesario para sacar el potencial de la chica. Miguel también se la llevaba a pequeñas misiones, donde veía su comportamiento en situaciones de peligro.

Hoy, era una de esos días en que Miguel se llevaba por los pelos a Irix a una misión junto a otros Spiders. Irix, sola, estaba combatiendo contra un villano que no parecía encajar para nada en ese universo; su estética era distinta y era como la pieza de un rompecabezas que encajaba pero tenía un patrón distinto. Era extraño pero era la naturaleza de las anomalías.

La morena chocaba con varias superficies, pero rápidamente se volvía a levantar para seguir en su lucha y cumplir su misión.

- Entiendo que la estas entrenando pero de verdad dejarla totalmente sola con algunas semanas haberse convertido en quien es ahora, es duro. – La voz de Peter B. Parker, levantó la vista de Miguel hacia él.

- No sé de qué hablas, Peter. – el semblante de Miguel se notaba estoico, no muy serio. – A muchos de nosotros nos tocó estar solos al principio, La Sociedad Arácnida no siempre existió. Hasta a mí me tocó aprender solo al principio.