𝐔𝐍 𝐀𝐓𝐀𝐉𝐎 𝐇𝐀𝐂𝐈𝐀 𝐄𝐋 𝐀𝐌𝐎𝐑 - 𝐉𝐀𝐘𝐖𝐎𝐍/𝐉𝐀𝐊𝐄𝐇𝐎𝐎𝐍

YO TE ESPERABA

[🎶 Yo Te Esperaba - Alejandra Guzmán 🎶]

Hace 14 años o un poco más se podía ver por las noche fría y oscura a una señora que tomaba la mano de su hijo mientras que con la otra cargaba a su bebé de tan solo dos meses.

El de mayor edad veía preocupado a su mamá, no le gustaba que la gente le gritará cuando no tenía el pago completo para poder pagar en dónde vivían.

¿De verdad era necesario correr a alguien por no pagar a tiempo? Sobre todo porque su mamá hacía todo lo posible para que no les faltará nada, trabaja mucho y dormía siempre muy noche, el chico trataba de ayudarla en lo que podía con los cuidados de su hermano menor.

— Mami, ¿a dónde vamos? — levantó su mirada y se frotó los ojitos adormilados — . Ya me cansé de caminar y tengo hambre — tocó su estómago.

— Ya casi vamos a llegar, ¿si? Espera un poco Jay.

La señora intentaba contener sus lágrimas, llevaba ya más de cuatro horas caminando y no quería que sus hijos se enfermaran, pero nuevamente el dueño de la vecindad los habían corrido, estaban en busca de otro lugar para vivir, pero o el pago era muy alto o no aceptaban a niños.

Había recibido indicaciones sobre una vecindad en dónde podría vivir, así que iba con la esperanza de que dejarán que ella y sus hijos se quedarán siquiera a dormir o descansar un rato.

— ¿Ya llegamos? — preguntó Jay al ver que su madre se había detenido.

— Sí — acomodó a su otro hijos, su brazo estaba cansado — , aquí podremos vivir los tres, ¿está bien?

— Sí, mami.

Esa misma noche los niños y su madre tuvieron donde dormir, la persona que los dejó quedarse les dió algo de comida y algunas mantas para que ninguno de los tres pasara frío por el momento.

Pocos días pasaron y habían logrado instalarse bien en la vecindad, todos sus vecinos la habían apoyado para que ella pudiera trabajar, ya que al no tener algún familiar más sus dos hijos solían quedarse solos, el menor de ellos siendo cuidado por su hermano de tan solo seis años.

— Ve a jugar mi niño — Doña Cleo le seguía diciendo a Jay — , yo cuidaré a tu hermanito.

Había sido su turno de cuidar a los pequeños y le servía ya que su hijo asistía ya a la primaria.

— ¿Segura? No quiero molestarla señora — a Jay le apenaba dejar que otras personas cuidarán de su hermano.

— Sí, si, ándale tú ve a jugar al patio.

— ¡Va! — salió de su casa para jugar.

Aunque la mayor parte de sus veces solía hacerlo solo, ya que la mayoría de los niños solían salir tarde la escuela y el apenas entraría la siguiente semana, estaba emocionado por eso.

Solo que esta vez fue diferente, porque no tan lejos de ahí había un niño hecho cuclillas, jugando con tierra y una pala para arena al igual que una cubeta. Algo curioso intentó acercarse a él, mirando todo con curiosidad la acción que estaba realizando, les estaba sacando la tierra a las macetas de una casa.

— ¿A qué tas jugando? — preguntó Jay.

Aquel niño se giró al oír aquella voz, Jay intentó no reírse al ver lo sucio que estaba.

— Juego a hacer castillos de tierra, casitas y así — respondió mostrando lo que había hecho.

— Tas todo sucio — señaló el rostro del niño.